Para darse La Buena Vida

La calle Mazatlán, en la colonia Condesa, alberga la llamativa construcción de La Buena Vida, que anteriormente era un edificio de departamentos. El equipo de ARCO Arquitectura Contemporánea, dirigido por los arquitectos Bernardo y José Lew (responsables de desarrollos residenciales como Las Nubes o de interiorismo como iló y Móbica) se encargaron de remodelar el espacio para adecuarlo a las necesidades del hostal.  

-Su inconfundible fachada ostenta triángulos de tablaroca color magenta (el típico rosa mexicano) y una celosía de madera que aíslan el ruido interior y acentúan la estructura, dando al visitante una idea del buen humor y la calidez imperantes en su interior.

-Al dejar la calle atrás, los visitantes ingresan a la recepción, un pequeño lobby cuyo piso posee losas características de las construcciones de época. Por las escaleras se sube a los diferentes espacios del hostal: las habitaciones, el área de lavado, la cocineta y comedor comunal, el espacio lounge con internet, la terraza y sus sillas para asolearse.

-El diseño gráfico e imagen, realizados por Ernesto Moncada, destacan lo más representativo de la  tradición mexicana con un lenguaje que define al México contemporáneo y global: el color como tema principal, la geometría otorgando ritmo al ambiente, los motivos relativos al Día de Muertos, como los murales y ventanas decorados con el rostro de La Catrina, La Parca o La Huesuda, apelativos de la muerte que también dan nombre a las habitaciones. La mayoría de las piezas decorativas provienen de tianguis populares, y el mural de su restaurante es una pieza original del artista plástico Ramón Ruiz.

-Los dormitorios para mujeres, hombres o mixtos, cuentan con una capacidad de entre cuatro y diez camas. La comodidad es prioritaria, de hecho, la ropa blanca es de alta calidad para llevar la confortabilidad al máximo. Los gráficos kitsch y la combinación de rosa, amarillo y gris crean armonía y originalidad. Cada recámara cuenta con lockers y módulos de baño integrados.

-A diferencia de los hostales convencionales, todas las habitaciones de La Buena Vida cuentan con un baño interior. Los huéspedes pueden disfrutar de Cielito Lindo, una terraza amueblada para el descanso; sala de televisión y cómputo, servicio de internet las 24 horas, vigilancia y circuito cerrado de TV.

-El menú del restaurante La Gula ofrece un paseo por la gastronomía de las distintas regiones de México con detalles contemporáneos: quesadillas fritas con un toque de chocolate y mole, tamales barbones de camarón o pescado bañados en salsa pasilla, y de postre, qué tal un flan de guayaba con salsa de tacha o un helado artesanal Xtabentún.

Alrededores

Al encontrarse en el corazón de la colonia Condesa, los hallazgos interesantes están garantizados: tiendas, restaurantes, bares, galerías de arte ubicados en sitios emblemáticos como el Parque México o la calle Amsterdam.

En las cercanías, el Paseo de la Reforma, el Castillo de Chapultepec o el mirador del World Trade Center son otros puntos de interés. También es posible desplazarse en 15 ó 20 minutos al Centro Histórico de la ciudad para conocer la esencia del México prehispánico y colonial.

Contacto

Hostal La Buena Vida
Mazatlán No. 190, Hipódromo-Condesa, México, DF.
Tel. 5271 9799.
www.hostallabuenavida.com

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