5 increíbles historias del Museo Banco de México
¿Ya conoces este recinto recién inaugurado? Luego de leer estas historias del Museo Banco de México querrás conocerlo hoy mismo.
En la Ciudad de los Palacios hay un nuevísimo recinto que presume tanta belleza arquitectónica como sus vecinos: ¡conoce las historias del Museo Banco de México! A un costado del Palacio Postal y enfrente del Palacio de Bellas Artes está el edificio del Banco de México que, desde el 24 de septiembre, está abierto al público como un museo y sin ningún costo.
Este edificio de estilo ecléctico en su exterior y art déco en su interior, obra del arquitecto Carlos Obregón Santacilia, cautiva la mirada desde la entrada.
Un amplio vestíbulo de mármol negro y detalles en dorado recibe a los visitantes. Los frisos en el techo atraen la curiosidad, pero el vitral diseñado por el artista Fermín Revueltas atrapa la atención en cuanto se mueve.
Se trata de una inesperada proyección que permite apreciar cómo la tecnología da una nueva armonía a un espacio tan majestuoso mientras se entiende por qué el Banco de México es parte de la vida de todos los mexicanos. De cierto modo, lo traemos en las carteras diariamente.
Pero este lugar envuelve con sus historias, mucho más allá de los datos relacionados con la economía y las finanzas. Y para muestra, aquí algunas de las historias del Museo Banco de México:
1.- Un trabajador digno del Premio Nobel
El escritor Octavio Paz trabajó en el Banco de México contando billetes viejos que estaban destinados a quemarse.
Justo en ese lugar, contó en una entrevista el ganador del Premio Nobel de Literatura, es donde comprendió el verdadero carácter de la sociedad moderna y confesó que como no era bueno para contar, se puso a escribir. Aunque no se ha encontrado información en los archivos, contaba el escritor Octavio Paz que en algún momento trabajó en el Banco de México.
“El empleo en el Banco de México también tuvo sus ventajas. Tenía que pasar cuatro o cinco horas contando billetes y me di cuenta de que siempre me equivocaba, así que decidí ya no contarlos…»
Octavio Paz
“Hacía como que los contaba y lo que hacía era componer sonetos, así pude componer una serie de sonetos”, confesó alguna vez.
2. ¿Hay lingotes de oro?
En el museo sí hay lingotes, dos específicamente, y están en una de las salas dentro de una vitrina. Así que ese deseo de ver una barra de oro con ojos propios sí se cumple.
Cada lingote pesa alrededor de 12.6 kg y son parte de las reservas internacionales del país que, por cierto, no se encuentran en México, sino en un banco en Londres. Dos increíbles y brillantes trozos de oro.
3. El día que hay más dinero en el país
¿Sabías que durante el Buen Fin es cuando más dinero hay en circulación en todo México? A partir de esa fecha, arranca la venta de mercancías hacia la temporada decembrina y luego el Fin de Año.
Esto lo sabe el Banco de México, por lo que debe asegurarse que haya suficiente dinero en efectivo disponible, especialmente en billetes de baja denominación, es decir de 20, 50 y 100 pesos.
Pero el Banco de México no solo se encarga de proveer a la sociedad de moneda nacional, sino también de cuidar su poder adquisitivo, así como impulsar un sistema financiero sano y estable; además, asegurarse de que todos puedan realizar sus transferencias y pagos de manera ágil y segura.
A través de pantallas interactivas, el visitante puede “jugar” para comprender qué es y cómo se controla la inflación, conocer a los participantes del sistema financiero (bancos comerciales, afores, sofomes…) y sorprenderse con la cifra de SPEIs (transferencias electrónicas) que se realizan por segundo en el país. Imposible seguirle el ritmo.
4.- Para recordar a Mesopotamia
De esa zona ubicada entre los ríos Tigris y Eufrates, de la que tanto aprendimos en la escuela, proviene una de los objetos más extraordinarios del Museo del Banco de México: una tablilla con casi 4 mil años de antigüedad.
La pieza se distingue por su fragilidad: está hecha en arcilla; por ser pequeña: mide apenas 6.8 x 4.5 centímetros y por sus grabados: tiene escritura cuneiforme y pictogramas.
Se le considera uno de los primeros registros contables de la humanidad. Todo un tesoro.
5.- Una moneda única en el mundo
La colección numismática del Banco de México, patrimonio de todos los mexicanos, está considerada una de las más importantes del mundo, no solo por la cantidad de piezas que la integran (más de 118 mil), sino por la calidad y la rareza de muchas de ellas.
Hay muestras desde los primeros medios de pago en la época prehispánica hasta las monedas y billetes contemporáneos, tanto de México como del mundo.
En la exhibición destaca una moneda de barro. Se trata de un centavo de origen zapatista que se acuñó en 1915 durante la Revolución Mexicana. Es el único ejemplar conocido.
Esta moneda ha inspirado un sinfín de viajes de distintas partes del mundo. Los conocedores quieren admirarla de cerca.
El dinero sirvió de inspiración para crear este espacio, donde queda claro que hay muchos valores en juego como la confianza y la estabilidad lo que ha hecho evolucionar los sistemas con los que pagamos, compramos o intercambiamos bienes y servicios.
Este Museo es el pretexto ideal para escuchar increíbles historias del Museo Banco de México (que tienen que ver con el país y con el mundo entero).
Museo Banco de México
- 5 de Mayo #2 (esq. Eje Central Lázaro Cárdenas), Centro Histórico de la CDMX
- Abre de martes a domingo de 11:00 a 17:00 horas.
- El acceso es gratuito.
- Puedes reservar un horario a través de su portal oficial o llegar directamente a la taquilla (hay acceso por la entrada de Eje Central).
- Sigue en sus cuentas de Facebook, Twitter e Instagram.
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