El cañón en la frontera del que no habías escuchado
El Cañón de Santa Elena es un paraíso desértico en la frontera del que no habías escuchado. ¡Descubre qué hacer y cómo llegar!
No es un destino turístico famoso, pero este paraíso desértico en la frontera de México conquistará el corazón de cualquier viajero aventurero.
El Cañón de Santa Elena, tiene el nombre oficial de Área de Protección de Flora y Fauna Cañón de Santa Elena y se localiza en los municipios de Ojinaga y Manuel Benavides, Chihuahua. A unos 15 kilómetros de la frontera con Estados Unidos, es uno de los principales tesoros del desierto chihuahuense. Esto se debe a que, al abarcar un rango muy extenso de alturas, es hogar de una biodiversidad extraordinaria.
En tiempos pasados, esta zona fue el escenario de aguerridas batallas. Éstas sucedían cuando tribus de apaches y comanches atacaban a exploradores y funcionarios españoles que llegaban a establecer fuertes y puestos de vigilancia. Por muchos años, fue imposible dominar esta región.
Después, vinieron largos años de silencio. El cañón, alejado de toda civilización y sin más tribus de indígenas norteamericanos, permaneció prácticamente sin presencia humana por décadas. Fue hasta 1994 que fue declarada Área Natural Protegida y, desde entonces, la zona se ha dado a conocer. Aún así, sigue siendo un rincón de México relativamente desconocido.
Te contamos qué hacer y cómo llegar en el Cañón de Santa Elena, el paraíso desértico en la frontera del que no habías escuchado.
Hacer senderismo en el Cañón de Santa Elena
En el parque hay varios senderos que puedes recorrer a pie. Durante estos recorridos, es posible que te encuentres con alguna de las más de 70 especies protegidas de animales que habitan y transita la zona. Castores, halcones, gatos monteses, coyotes y venados son algunas de ellas.
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Navegar en el río
Una de las actividades favoritas de los viajeros que se aventuran en el cañón es navegar por la vertiente del Río Bravo que lo atraviesa. Esto se puede hacer en canoa o kayak, pero siempre con la ayuda de un guía y con el equipo adecuado, ya que hay algunas zonas de rápidos.
Relajarte en un spa natural
La zona del cañón está repleta de aguas termales y manantiales, en donde es posible relajarte y refrescarte por un rato. Además de reducir el estrés y producir endorfinas, esta actividad es un merecido descanso después de recorrer el área.
Tomar fotografías
En el Cañón de Santa Elena encontrarás algunos de los paisajes más espectaculares del norte de México. La combinación de montañas, riachuelos, barrancas, matorrales, mesetas y desierto crea vistas que vale la pena fotografiar. Si te gusta coleccionar paisajes, este lugar es para ti.
Cómo llegar al Cañón de Santa Elena
En auto desde Ojinaga, toma la carretera federal 67 hacia el sur en dirección a Camargo. Al llegar a Álamo Chapo, toma la desviación a la izquierda (carretera federal 200) hacia Manuel Benavides. Tanto en Ojinaga como en Manuel Benavides puedes contratar un tour para recorrer el cañón. Es necesario explorar esta zona con ayuda de guías experimentados que conozcan bien el área.
Abraham Bojórquez Escritor enamorado del México profundo y ancestral. Explorador, aventurero y cuentacuentos nato.