La mística celebración a la Virgen de Guadalupe en Chiapas
Recorrimos el estado de Chiapas para estar presentes en las celebraciones que los pueblos de este lugar le dedican a la Virgen de Guadalupe.
Ante tu imagen sagrada, por ti virgen soberana, venimos a darte gracias, excelsa Guadalupana. A ti Virgen del Anáhuac, a ti virgen soberana, recurrimos a tu amparo ya que eres virgen indiana. – Tradición oral
Es la madrugada del 12 de diciembre en la casa de Maruch en San Juan Chamula se reúne con sus amigos antorchistas quienes van a llevar el fuego sagrado hasta el templo de Guadalupe en San Cristobal de las Casas. Realizan sus últimos preparativos antes de partir, se desayunan un café, un atole servido en jícara y un plato de frijoles con huevo y chile acompañado de tortillas recién hechas que la madre de Maruch va cociendo y calentando en un viejo comal. Afuera del calor del hogar el frío aprieta y el humo de la cocina se escapa por las rendijas de la techumbre de teja. Una vez listos se encomiendan a San Juan Diego y a la Vírgen de Guadalupe para que les vaya bien en el trayecto.
Juan es el primero en cargar la pesada imagen de la Virgen mientras Maruch con su pelo recogido y envuelta en su mochebal (chal de lana) es la encargada de prender, llevar y mantener el fuego de la antorcha encendido, así inician su peregrinación de 12 km rumbo al Valle de Jovel y San Cristobal de las Casas.
Después de una emotivo recorrido a las 6:00 de la mañana el grupo llega a la base de la escalinata del Santuario de Guadalupe en San Cristóbal de las Casas en donde el canto del gallo y el continuo tronido de los cohetes anuncia el este día de fiesta; Apenas esta clareando el sol va despuntando por la montaña. Todos los jóvenes visten con sus tradicional chuj de lana blanco y llevan un pañuelo amarrado en la cabeza con la imagen de la virgen traen el rostro tiznado de negro por el humo de la antorcha, paso a paso ascienden por la escalinata hasta llegar a lo alto del santuario en donde se encuentran con otros peregrinos algunos de ellos traen instrumentos musicales; todos se arrodillan y algunos cantando y otros en silencio cubren los últimos metros de su recorrido con un hipnótico balanceó de cuerpos hasta llegar al altar de la Virgen Morena el cual esta adornado con flores y luces de colores. Esta imagen es la que reina durante todos el día en el Templo de Guadalupe de San Cristobal de las Casas en donde durante días previos al 12 de diciembre y el mero día van llegando miles de peregrinos, antorchistas y procesiones de todos los rincones de Chiapas y de todo el país quienes se dan cita en este santuario para festejar el día de madre de todos los mexicanos.
Algunos llorando, otros riendo y con los pies lastimados luego de varios días de camino; al final el sacrificio del viaje ha valido la pena, llegar frente a la imagen y aunque no la pueden ni siquiera tocar, expresan su emoción y alegría por arrodillarse frente a ella. Durante la noche afuera del templo de reúnen a danzar los grupos de parachicos quienes atraen la atención de todos los visitantes especialmente de los niños quienes con un churro o un elote lleno de mayonesa en la mano disfrutan y se rién de los bailes de estos coloridos personajes.
La iglesia de Guadalupe fue construida en 1835 en un pequeño cerro a orillas de la ciudad, Se cree que su arquitectura haya sido mejorada entre 1854 y 1864, estando a cargo el obispo Carlos María Colina y Rubio, quien recibiera la condecoración de Comendador de la Orden de Guadalupe por parte del entonces presidente Santa Ana. La imagen que se venera fue donada por el deán de Catedral, Lino García en 1850.
De fiesta en Tenejapa
El día 12 de diciembre fue un día muy largo al amanecer fuí a tomar fotos del Templo de Guadalupe y luego me fuí a visitar el pueblo de Tenejapa. La carretera que une a estas dos poblaciones esta llena bellos escenarios que con la salida del sol y el calor de sus rayos comienza a levantar la espesa neblina que se va deslizando entre los bosques y las montañas, en mi camino hice una parada en el panteón chamula de romerillo el cual es muy facíl de ubicar ya que esta ubicado a un costado de la carretera en una loma coronada por numerosas cruces pintadas de azul y verde, despues de tomar unas fotos seguí adelante hasta llegar a Tenejapa, en la entrada del pueblo vive la famosa tejadora Maria Mesa con quien puedes comprar increibles textile tejidos en telar de cintura.
Según cuentan los antepasados, el origen del tejido en Tenejapa se remonta a la historia de María Méndez Ton, quien tuvo un sueño en el que la Virgen de Santa Lucía le decía: «Yo te voy a enseñar a bordar y a tejer la tela, yo te voy a dar la sabiduría». Así, la mujer empezó a hacer pequeños bordados, chales, pañuelos y más y más prendas y enseñó el oficio a otras mujeres y pueblos de la región.
Al llegar a la iglesia de la comunidad estaba por dar inicio su tradicional procesión en donde un grupo de mujeres salió cargando una imagen de la Virgen de Guadalupe mientras otras mas iban sahumando y purificando el ambiente con sus copas llenas de copal. Detrás de ellas venía toda la gente de la comunidad entonando los tradicionales cantos. La procesión fue visitando cada barrio hasta regresar de vuelta a la iglesia en donde se oficio la tradicional misa.
Rumbo a Pocolum
Despues de Tenejapa seguí mi camino por una carretera secundaria que se va abriendo paso por las escarpadas montañas el paisaje es único, vas pasando por diferetes comunidades hasta que llegue a Pocolum en donde tuvo lugar un evento muy especial fue la Consagración del Templo de Guadalupe, este es una replica en menor escala de la Basílica de Guadalupe de la CDMX, la obra fue dirigida por el arquitecto Felipe Antonio Martínez Martínez, este nuevo santuario tiene una capacidad para 700 personas sentadas y 300 paradas, dicho santuario no fue construido al azar, según testimonios indígenas la Virgen de Guadalupe les envió diversos mensajes.
La construcción de este santuario tomó cinco años y fue realizado por manos indígenas de la region dirigidos por el párroco de la Misión de Tenejapa el R.P Gabriel Arreguín Villa quién les explicaba en lengua Tezeltal cual era el concepto del proyecto y las necesidades. Felipe Antonio Martínez arquitecto del proyecto recuerda como llegaban familias de 5 a 8 personas incluyendo mujeres y niños en camiones de redilas cargados de piedras destinadas para el santuario, ellos mismos las bajaban y cargaban en las carretillas.
El día del evento llegaron cerca de 12,000 indígenas que bajaron de las montañas para participar en este gran evento, todos lucían sus trajes tradicionales llenos de colorido.
La consagración del Santuario fue realizada por el Obispo Titular de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, Don Felipe Arizmendi. La ceremonia inició con una solemne procesión en la que grupos de jóvenes cargaron las imágenes de la Virgen de Guadalupe y de San Juan Diego, a su paso la gente lanzaba pétalos de rosas hasta que ingresaron en el templo en donde ambos cuadros fueron levantados y colocados, quedando en el centro un Cristo crucificado de 2 metros y medio de altura.
Se espera continuar con la construcción del complejo religioso aun falta la casa rural, el espacio para oficinas, la tienda de articulos religiosos así como el albergue.
Asi es como finalice este viaje mas por las montañas de Chiapas disfrutando de la magia, colorido y hospitalidad de sus pueblos indigenas y observando en cada uno de los lugares el fervor que le tienen a la Virgen de Guadalupe.
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