Chacala: un paraíso escondido en la costa del Pacífico (Nayarit)
Durante tu estancia en la Riviera Nayarit no dejes de visitar esta playa -casi virgen-, rodeada de una espesa flora que simplemente, cautivará tus sentidos.
La costa sur del estado de Nayarit presenta, a partir de la bahía de Matachén, múltiples puntas, bahías y ensenadas con escarpados salientes. La sierra se acerca al mar y a veces parece volcarse en las olas. Chacala es una de las playas más hermosas de esta costa que, a diferencia de otras, no tiene el problema de los jejenes.
En la bella región del Pacífico nayarita hay numerosas playas prácticamente vírgenes, a las que es posible llegar por caminos accesibles casi todo el año; en época de lluvias algunos resultan difíciles de circular.
La playa de Chacala se encuentra rodeada de palmeras, y a medida que se interna a la selva aparecen caobas, parotas, rosamoradas, pochotas, etcétera. También se ven huertas de mango y plátano.
Durante las caminatas por la selva aún se pueden ver, aunque de forma esporádica castores, tejones, armadillos, pumas, ocelotes, víboras de cascabel, además de un sinnúmero de aves tropicales.
A menos de un kilómetro de Chacala se encuentra otra espléndida playa: Chacalilla, perfecta para practicar la natación, el snórquel y el kayac.
Pero Chacala, además de sus sobrados atributos naturales, tiene lo más importante: su gente. Gente pionera, trabajadora y emprendedora; un buen ejemplo es la doctora Laura Del Valle quien llegó a esta región hace casi veinte años. Hoy dirige y vive en Mar de Jade, pequeño albergue, con una casa principal de bella arquitectura mediterránea frente al mar. “El lugar –nos dice la doctora– se fundó con el espíritu de labor social y agradecimiento por el entorno natural.
Mar de Jade es una experiencia única para la gente aventurera que goza de una sencilla manera de vivir en un precioso lugar tropical” […] “Con los recursos que genera y con el apoyo económico de algunos visitantes –continúa– pudimos abrir una clínica en Las Varas, en un edificio que donó el municipio”.
Otra situación importante que vale la pena señalar es que en Chacala la construcción de casas se hace con un cuarto adicional para recibir a los turistas.
El ingeniero Del Valle, responsable de esta idea, nos comenta: “Realmente este proyecto no sólo tiene que ver con levantar casas, se trata de construir una nueva vida para el pueblo en tanto que su gente adquiera el poder para encargarse de su futuro. El proyecto fomenta que la gente se quede en el pueblo y tenga una ganancia adicional con el cuarto turístico. Los propietarios reciben capacitación hotelera para administrar sus cuartos.
Hacer empresa y desarrollar turísticamente una comunidad no tiene porque significar destrucción del ambiente.
Este proyecto busca el desarrollo económico local auto sustentable. Una comunidad con recursos económicos y buena planeación es una comunidad que puede resolver fácilmente los problemas de basura, drenaje, agua potable o simplemente atender a la naturaleza que es lo que la enriquece. “Techos de México” es una franquicia que se ocupa de conseguir financiamiento, organizar y capacitar a la comunidad con el fin de que participe en el mercado turístico y promover los servicios turísticos comunitarios.
Tenemos que agradecer a todos los que han colaborado con recursos para acreditar el fondo común y han hecho posible los préstamos sin intereses”.
Chacala es un ejemplo de cómo se puede involucrar a la comunidad en un proyecto turístico además de construir una infraestructura.
En este bello paraje de la costa nayarita tendrá varias opciones para pernoctar: ya sea en las viviendas de la comunidad, si quiere involucrarse un poquito más con las familias del lugar; en el Mar de Jade antes mencionado o en La Casa del Agua, en el extremo sur de la playa y cuya arquitectura se integra perfectamente a los desniveles del terreno.
Desde este lugar se tienen soberbias vistas del mar entre palmeras, higueras y otros árboles tropicales. Por todo lo anterior recomendamos ampliamente este pequeño paraíso, un lugar tranquilo para descansar y saborear exquisitos mariscos y pescados.
Petroglifos de ”Altavista”
En Chacala es posible observar interesantes petroglifos que nos hablan de sus antiguos habitantes. De hecho, a pocos minutos de aquí exactamente a diez kilómetros, están los petroglifos de ”Altavista”, impresionante conjunto de grabados en piedra en medio de la espesa selva y a orillas de un arroyo. Son voces de antiguos testimonios, de cientos de años de tradiciones mitológicas elaboradas por los primigenios pobladores de la región, hermosas expresiones abstractas y simbólicas, que fueron talladas con piedras sólidas y punzantes. Sorprende el buen estado en que se conserva la mayoría de los petroglifos.
Su mayor importancia radica hoy en que son un elemento más para desentrañar el misterio de la cosmogonía y el sistema de creencias de los antiguos pobladores.
Los expertos coinciden en que éstos tiene más de mil años de antigüedad.
Cómo llegar a Chacala
Saliendo de Tepic tome la carretera federal núm. 200 con dirección a Compostela, una vez aquí seguir hacia Las Varas, unos 37 km, y a nueve kilómetros al oeste, por un camino pavimentado, encontrará la playa de Chacala, con casi un kilómetro de largo y 40 m de ancho; tiene un oleaje moderado, arena de color dorado y fina textura.
