Imágenes de Cristo en Guanajuato
Éstas son las tres imágenes de Cristo más conocidas de Guanajuato, estado de México que se caracteriza por su religiosidad.
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Esto dio lugar al levantamiento de majestuosos conventos e iglesias en los que se colocaron infinidad de Representaciones de santos, vírgenes y, sobre todo, de Jesús crucificado, imágenes a las que los indígenas estaban obligados a rendirles culto, con el fin de que se olvidaran de sus antiguas deldades. De todas estas imágenes, la figura central fue Cristo, pues es el pilar de la r eligión católica; es por ello que en cualquier iglesia que visitemos es común encontrar más de una imagen de Jesús: crucificado, en el santo sepulcro, en la columna, etcétera.
REPRESENTACIONES DE JESÚS
Debemos hacer especial énfasis en que ningún cronista, a través de la historia, supo en realidad cómo fue Jesús, cuál era su estatura o cómo se veía caminando por entre las polvorosas calles de Galilea y de Judea. Seguramente por esto se tienen tantas y tan diferentes Representaciones de Jesús y de su Pasión. Así, la mayoría de los artistas que ha plasmado alguna vez una imagen de Jesús o realizado una descripción de su persona se toma la libertad para escoger entre una mano delicada levantada al bendecir y otra de una toscamente esbozada; de entre un rostro amable y de ojos gentiles y otro apaslonado y de ojos fulgurantes. Asimismo, pueden elegir una figura ágil y delgada o una fuerte y poderosa. Lo que sí sabemos a ciencia cierta es que nadie le de su época dibujó su retrato y, mucho menos, esculpió sus facciones, ya que las imágenes estaban prohibidas por la ley judía de ese tiempo. Ninguna de las personas que lo conocieron jamás lo describieron y, de hecho, ni una palabra sobre Jesús fue escrita durante su vida, por lo que podría decirse que casi todo lo que sabemos de su vida viene de la crónica de cuatro hombres inspirados a quienes se les ocurrió escribir sobre Jesús y su Pasión mucho tiempo después de su muerte, basando sus escritos en lo que llegaron a escuchar y a conocer de él. A estos hombres los conocemos como Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Y aunque ellos escribieron en griego, el idioma de Jesús fue, seguramente, el arameo, el lenguaje nativo de su pueblo. Cada uno de estos cronistas narró la historia en forma muy diferente, pero todas, una vez unidas, formaron la narrativa épica más influyente de todos los tiempos: la Biblia.
LOS CRISTOS DE GUANAJUATO
Con la llegada de los primeros misioneros se inició la labor evangelizadora en nuestro país. En el Bajío guanajuatense, región conocida por su marcada religiosidad, abundan los santuarios y, por tanto, las imágenes de Cristo, muchas de las cuales sólo forman parte del conjunto del templo pero, en algunos casos, la imagen de un Cristo atrae a miles de peregrinos que acuden a pedir un milagro o agradecer uno ya otorgado.
Dentro de los Cristos más frecuentados por sus dotes milagrosas podemos mencionar al famoso Cristo Rey del cerro del Cubilete, que año con año recibe a miles de peregrinos de todos los rincones del mundo, especialmente el 21 de noviembre, fecha en que se celebra la fiesta principal del Cristo Rey. Localizado en lo alto del cerro mencionado, la imagen del Cristo mide 20 metros de altura y pesa 80 tone ladas y descansa sobre una moderna basílica en forma de globo terráqueo, cuyo interior está sobr lamente decorado con una enorme corona de espinas en bronce circundando la parte alta del templo interior.
Otro Cristo que atrae a muchos peregrinos es el Señor de Villaseca, venerado en la iglesia del Mineral de Cata, también en la ciudad de Guanajuato. Cuenta la leyenda que el Señor de Villaseca está laborado de madera de un árbol originario de Venezuela conocido como colorín o patol.
Durante el jueves y viernes santos, la ciudad de Salamanca se convierte en un río humano que acude a venerar al Señor del Hospital, en el templo del mismo nombre. Este Cristo tiene la particularidad de que es negro y, según se dice, fue laborado en Pátzcuaro, Michoacán. Esta imagen representa al Cristo muerto en la cruz y con el rostro muy caído hacia su costado derecho; la imagen mide 1.80 metros de alto y pesa alrededor de 13 kilos.
Aunque estos tres Cristos son los más visitados en la región guanajuatense, en todas las iglesias o capillas del estado se localizan imágenes del Jesús crucificado elaboradas en diversos materiales, que van desde la caña de maíz hasta la cantera y, actualmente, el yeso. Muchas de éstas son imágenes llenas de bondad y ternura, pero algunas, por lo dramático de su gesto, inspiran temor más que paz y tranquilidad. Este último tipo de Representaciones se destaca por el carácter de mártir y por lo sanguinario de su elaboración de casi todos los Cristos de la columna, en donde aparece flagelado y, en algunos casos, es representado con la espalda totalmente descarnada.
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