Cuando ‘El Indio’ Fernández y Chavela Vargas se iban a fulminar mutuamente
Chavela Vargas recordaba con mucho desagrado a Emilio 'El Indio' Fernández, sobre todo por este evento en el cual, por poco, ambos terminan muertos.
El paso del tiempo solo ha hecho que salgan a la luz cada vez más historias de los grandes personajes de la época de oro del cine mexicano. Lo comentamos porque no tiene mucho que se supo que Emilio ‘El Indio’ Fernández y Chavela Vargas estuvieron a nada de matarse a balazos mutuamente.
Es casi por todos conocido que el aclamado director cinematográfico tenía una hermosa casa de piedra en Coyoacán, misma que tenía el mote de La Fortaleza, en donde el también actor realizó numerosas fiestas de las que se desprendieron decenas de anécdotas.
El día en que todo iba a terminar en tragedia
A una de esas cuantiosas convivencias asistió Chavela Vargas acompañada de la actriz María Elena Marqués, ambas invitadas por Emilio a fin de platicar para que las dos participaran en su próxima película.
Las bebidas empezaron a circular entre todas y todos los invitados, lo mismo la comida, posteriormente empezaron las risas y con ellas las canciones a voz y guitarra, en fin, que de buenas a primeras el dueño de la casa de piedra abrió la ventana que daba hacia un pequeño estanque al exterior.
Emilio mató a unos inocentes patos
Después de hacer eso tomó su pistola para con ella dispararles a los patos que nadaban plácidamente en el cuerpo de agua. Mató a varias de esas aves ante la mirada de terror de los asistentes.
— “¿Pero por qué hiciste eso?”—, le reclamó Chavela Vargas a ‘El Indio’.
— “Por p#%o5”—, contestó él.
Chavela Vargas, que para esos años ya admitía su preferencia por las personas de su mismo sexo, se sintió naturalmente aludida. Pero la cosa no quedó ahí. El director de cine le apuntó con su arma a la cantante.
Chavela Vargas pide una pistola al cantinero de Emilio
Ella empezó a maquinar matar a Emilio en ese instante, así que pidió a la actriz María Elena Márquez que escapara como pudiera de la casa, tal vez por una ventana.
Con la sangre caliente, valga el lugar común, Chavela fue hasta donde se encontraba el cantinero-mayordomo de Emilio y le pidió una de las armas de su patrón. El empleado rechazó la petición, le dijo que no le daría ninguna pistola porque ella sí era capaz de matar ahí mismo a ‘El Indio’.
«No vale la pena echarme encima una muerte tan estupida»
“Tienes razón”, contestó Chavela Vargas al cantinero, para luego agregar: “(Emilio) no vale ni siquiera la bala que usaría para matarlo y mucho menos vale la pena echarme una muerte encima tan estúpida”.
En entrevistas posteriores la cantante calificaría a ‘El Indio’ como un personaje desagradable que, en su opinión, nunca hizo buen cine, sino solo postales.