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El campismo: una alternativa de convivencia familiar

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La actividad cotidiana de las grandes urbes en los tiempos modernos expone a sus habitantes al estrés y a una cada vez menor convivencia en el núcleo familiar. Además, las grandes distancias, el tráfico, la contaminación y la economía son factores que han afectado notablemente la calidad de vida de los moradores de las ciudades; en consecuencia, surge la necesidad de buscar válvulas de escape, las cuales deben ajustarse -para cubrir su objetivo- a las condiciones y a la capacidad real económica de cada familia. En este sentido, el campismo representa una alternativa ideal de esparcimiento físico y mental.

Esta actividad, conocida en nuestro país desde hace muchos años, incrementa día a día sus simpatizantes, quienes ven en ella una excelente oportunidad para estar en familia y en contacto con la naturaleza. Los fines de semana se huye de la rutina, en todos los sentidos (actividades, alimentación, horarios, vestido), para ir en busca de la comunicación con los hijos y los amigos, alejados del tráfico, del ruido y de la contaminación, así como de los medios masivos de comunicación, con el objetivo de encontrar el descanso físico y mental anhelado en relación íntima con el medio ambiente.

El campismo familiar en México se realiza bajo tres modalidades: la familia que sola decide ir a la búsqueda de emociones (no recomendables dadas las condiciones de inseguridad actuales); el grupo de familias amigas que se reúnen de vez en cuando para alguna excursión; y el grupo especializado formalmente establecido que fomenta la práctica del campismo.

La Asociación Mexicana de AcampadoresA.C.(AMAAC), creada hace 24 años por iniciativa del Melitón Cross Lecanda, es una asociación civil, no lucrativa, que busca y fomenta la convivencia de los diferentes miembros de la familia mexicana con personas que comparten el gusto por el campo. Esta actividad turística puede realizarse con cierta frecuencia y a un costo inferior al de otros centros recreativos y vacacionales.

Cada fin de semana es frecuente observar en las carreteras cercanas al Distrito Federal una o más caravanas organizadas por esta agrupación, con destino a diferentes lugares, previamente explorados, como bosques, balnearios, centros turísticos ytrailer parks. Por otro lado, resulta todo un espectáculo apreciar el avance de estas filas de vehículos que transitan por distintas autopistas y caminos. Asimismo, esta manera de transportarse brinda a los participantes los beneficios de viajar acompañados, y permite resolver cualquier eventualidad que pudiera presentarse en el camino.

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Cuando se llega al sitio escogido para el campamento, se dispone una colocación adecuada de los equipos con el fin de garantizar la seguridad.

A partir de este momento aquel que prefiere descansar tiene la oportunidad de hacerlo, el fanático de los deportes encontrará con quién practicarlos; el amante de las emociones fuertes podrá participar en excursiones especializadas como el descenso en ríos, y los interesados en la cultura encontrarán en los campamentos culturales una alternativa para enriquecer su acervo.

Así, con un mínimo de 52 campamentos al año, las posibilidades de salir de l rutina citadina son muchas. Y qué decir de los periodos vacacionales en los cuales las limitaciones económicas impiden muchas veces su disfrute. Esta agrupación ofrece campamentos a los grandes centros turísticos del país, ¿usted algún día ha imaginado acampar en Acapulco, pagando por toda la familia menos de cien pesos diarios, en una zona cerca de la playa, rodeado de mar y laguna? Pues esto no es un sueño, este escenario existe y es una de las muchas realidades al alcance de cualquier familia. También puede conocer y visitar parajes inimaginables en nuestro territorio, accesibles bajo esta modalidad de turismo. Muchas de esa información aparece en el directorio de lugares y paradores editado porAMAAC.

Esta agrupación no sólo recibe a expertos en campismo, sino también ofrece asesoría técnica para la selección, compra, mantenimiento y reparación de equipo, así como capacitación en métodos y técnicas de campismo a todas las familias que deciden iniciarse en la práctica de este emocionante deporte.

En un agradable ambiente familiar y con fundamento en las tradiciones mexicanas, se organizan campamentos en fechas especiales como son el día del niño, el día de la madre, el día del padre, el día del joven, preposadas, rosca de reyes y el tradicional aniversario de la Asociación que reúne habitualmente a más de cien familias.

La Asociación Mexicana de Acampadores ofrece a todos los integrantes de las familias la posibilidad de interactuar con otras personas que, bajo un interés común, buscan compañía y nuevos amigos para intercambiar experiencias. Además, representa la mejor de las escuelas para todos los niños mexicanos, quienes con la práctica del campismo reciben enseñanzas en contacto íntimo con la naturaleza y tienen vivencias que los niños de las ciudades pocas veces experimentan.

EN COMUNIÓN CON LA NATURALEZA

Texto: Carlos A. García Mora

Vivir ignorando a la naturaleza es vivir sin sabe dónde estamos ni quiénes somos. El disfrute de las bellezas naturales no es otra cosa que la contemplación de la verdad más deslumbrante. Majestuosas montañas; serranías y extensos valles salpicados de florestas, algunos de los cuales guardan venerables reliquias; plácidas lagunas; arroyuelos cristalinos, ríos y cascadas impetuosas; fantásticas grutas, son rasgos de la fisonomía de nuestra materia, para que la conozcamos y la amemos con un amor consciente y para ofrecer esos bellos sitios como campo de estudio y de distracción a propios y extraños, sabios naturalistas o simples amantes de la naturaleza.

«Viajad y os distraeréis». Esto prescribe, en un hermoso poema de Juan de Dios Peza, poeta mexicano, un médico a su paciente llamado Garrick, quien padecía despleen, un constante malhumor e indiferencia a la vida.

Decía el incansable viajero José Natividad Rosales, también escritor mexicano: «Viajar es volver a nacer cada mañana en la esquina de una calle desconocida, en una ciudad de rumboso nombre».

En ciertos momentos, viajar y acampar es sentir la sensación de volver a ser niño. Un niño aprendiendo palabras y costumbres nuevas, preguntando por esto y por aquello, en fin, un niño envuelto en la incertidumbre, con un ansia enorme de aprender y conocer.

De diferente manera, por diversas razones y en distintas épocas, los que conocen las satisfacciones y la cultura que dan los viajes, invitan, con el solo hecho de relatar o descubrir sus experiencias, a viajar a los seres que por alguna razón «creen» no poder hacerlo.

Es preciso comentar que tanto los antiguos como los modernos turistas, excursionistas, acampadores o exploradores han encontrado en la práctica de viajar -según su búsqueda- el remedio para algunas enfermedades; cultura, amistades y efectos; la paz espiritual que su religión o su conciencia les dicta, en fina, han satisfecho sus anhelos.

El campismo representa una alternativa idea de recreación física y mental. Nace y se conoce en nuestro país en los años veinte, practicándose a través de diversos clubes y asociaciones, no obstante, el desarrollo de esta modalidad turística y deportiva que presenta grandes ventajas para su ejercicio, ha sido más bien débil. La falta de desarrollo del campismo se ha debido fundamentalmente a la escasa difusión de las ventajas que presenta la práctica de los mismos.

Si usted, desea vivir estas experiencias, no se prive de ello, ya que nunca como ahora ha sido tan fácil obtenerlas, pues para cuidarle, orientarles, servirle y acompañarle en el viaje, se han creado dependencias encargadas de fomentar el turismo. Además existe una red de servicios que facilita estas prácticas.

Cuando salgamos al campo hagámoslo con la intención de disfrutar al máximo las maravillas que los ofrece; desarrollemos actividades que nos hagan más placentera la estancia y otras que nos permitan descubrir los más recónditos secretos de la naturaleza.

autor Conoce México, sus tradiciones y costumbres, pueblos mágicos, zonas arqueológicas, playas y hasta la comida mexicana.
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