El Reloj Otomano de la CDMX, un símbolo de la amistad entre otomanos y mexicanos
En el cruce de Bolivar y Venustiano Carranza, yace el Reloj Otomano, un símbolo de amistad entre México, Turquía y Líbano. Conoce su bella historia.
En el cruce de las calle Bolívar y Venustiano Carranza del Centro Histórico de la Ciudad de México existe un monumento que conmemora la amistad de México con el Imperio Otomano, una nación que pereció. Se trata del Reloj Otomano, que con sus bellos azulejos y arcos nos recuerda lo distintos, y a la vez cercanos, que los pueblos pueden ser.
Gran parte de la población otomana que migró a México lo hizo durante los albores del Porfiriato. Principalmente se trató de judíos sefardíes, aunque también migraron turcos musulmanes, sirios y, principalmente, libaneses maronitas. Los estados destino de la población otomana fue Ciudad de México, Puebla, Veracruz, Yucatán y Tamaulipas, donde se establecieron redes de solidaridad entre amigos y familiares, lo que permitió que dichas poblaciones prosperaran.
El Reloj Otomano, signo de amistad en el Centenario y Bicentenario de la Independencia de México
Gracias a los actos de hospitalidad promovidos desde el gobierno de Porfirio Díaz, en 1910 el gobierno turco decidió enviar el Reloj Otomano como signo de amistad y como regalo por los festejos del Centenario de la Independencia de México. Aunque en 1922 cayó el Imperio Otomano, el Reloj Otomano continuó siendo un símbolo de amistad entre las poblaciones que lo conformaban. Por ello, en 2010 el Reloj Otomano fue restaurado por los gobiernos de Turquía y Líbano, con el fin de conmemorar el centenario de su entrega y el Bicentenario de la Independencia de México.
Entre las particularidades del Reloj Otomano se encuentra que toca la campana cada quince minutos y posee cuatro caras, dos que marcan la hora con números árabes y dos con números arábigos (occidentales). Bajo los relojes se encuentra cuatro arcos de estilo mudéjar recubiertos por mosaicos de múltiples colores. En la parte superior rematan tres campanas y tres escudos nacionales: una media luna para Turquía, un cedro para Líbano y el águila devorando una serpiente para México.
