Para visitar con los niños
El Parque Morelos, un extenso sitio arbolado con asadores, juegos infantiles, go karts y un teatro guiñol. Entretiene a los niños un pequeño zoológico habitado por venados, avestruces y dromedarios. Hay lanchas flotando sobre un lago, risas y aire en demasía. El Parque de la Amistad posee como protagonista también un lago saturado de patos […]
El Parque Morelos, un extenso sitio arbolado con asadores, juegos infantiles, go karts y un teatro guiñol. Entretiene a los niños un pequeño zoológico habitado por venados, avestruces y dromedarios. Hay lanchas flotando sobre un lago, risas y aire en demasía.
El Parque de la Amistad posee como protagonista también un lago saturado de patos y lanchas de pedales. Aquí la gente viene a trotar o correr entre palmeras, entre eucaliptos. Y mientras unos andan en bicicleta, otros se divierten en los go karts o en el teatro al aire libre.
Por su parte, el Parque Teniente Guerrero está ubicado en el centro de la ciudad. Su existencia es una pausa con quiosco, palomas y bancas. Hay juegos infantiles, adema?s de puestos de dulces y globos. Y entre árboles se reúnen aquí jugadores de ajedrez, dispuestos como siempre a librar batallas imaginarias.
Mundo Divertido es un parque de nombre elocuente donde la cabeza da vueltas y el cuerpo sube y baja. Juegos mecánicos y de video, tiro al blanco, mesas de billar y un espacio dedicado a generar miedo por el puro placer de sentirlo forman parte de sus instalaciones. Los fines de semana hay música en vivo, también payasos.
El Museo El Trompo es otro de esos lugares pensados para ser disfrutados en familia. Su propósito es acercar a los niños a la ciencia y la tecnología, y para ello se vale de salas interactivas. Burbujas, células y huellas son temas ahí pensados, se hace música, se mueven brújulas, se mira la propia sombra y se investigan los planetas. El museo además cuenta con una sala de cine 3D y un audiorama donde no son extrañas las conferencias, los conciertos y los talleres de arte o robótica.
