Gustavo Baz: el gran médico y revolucionario mexiquense

El 31 de enero de 1894 nació Gustavo Baz. Tuvo como profesión la medicina, pero además de destacar en su disciplina, tuvo un papel importante en la Revolución Mexicana y el gobierno del Estado de México.
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En nuestra cotidianidad vemos una infinidad de nombres de diferentes personajes en avenidas y calles. Sin embargo, pocas veces sabemos quienes son. En el Estado de México, uno de aquellos destacados actores de la historia nacional, fue Gustavo Baz. Nacido el 31 de enero de 1894 en el municipio de Tlalnepantla, además de ser un destacado médico, tuvo un papel fundamental en la Revolución Mexicana y en el gobierno mexiquense. Desde allí, se encargó de fundar instituciones públicas importantes para el país y su entidad natal.

Nacimiento y formación
Gustavo Baz Prada nació el 31 de enero de 1894, en el municipio de Tlalnepantla, Estado de México. Desde joven tuvo el privilegio de recibir una esmerada instrucción. Inició su educación en el Liceo Fournier de la Ciudad de México, pero con la muerte de su progenitor, su familia se mudó a Guadalupe, Zacatecas. Allí continuó con su educación primaria. Después seguiría en la Escuela Normal de Guadalajara, Jalisco y finalmente terminaría su bachillerato en el Instituto Científico y Literario de Toluca.
Para 1913, el Colegio Médico Militar le concedió una beca para sus estudios universitarios. Con el grado de sargento, ingresó a la carrera de medicina, en la Escuela Nacional de Medicina de la Universidad Nacional de México, actualmente la UNAM.

Gustavo Baz en la Revolución Mexicana
Sin embargo, tras el golpe militar de Victoriano Huerta contra el gobierno de Francisco I. Madero, se incorporó a las fuerzas revolucionarias que se sublevaron contra el veleidoso general. Esto lo hizo abandonar por un tiempo sus estudios. Estuvo en las filas del zapatista Vicente Navarro en la Sierra de la Cueva, en el Ajusco. Allí se desempeñó como médico de campaña. También le brindó la oportunidad de volverse amigo de destacados revolucionarios como Luis Cabrera, Alfredo Robles Domínguez y Hermenegildo Ríos.
En 1915 fue tomada la ciudad de Toluca por el ejército zapatista. Allí con tan solo 21 años de edad, fue nombrado gobernador provisional del Estado de México. Durante casi un año, se encargó de reorganizar la administración y los cursos escolares. También implementó una nueva estructura en el Instituto Científico y Literario. Además emitió billetes (hechos de cartón ante la falta de papel moneda), a fin de sufragar los gastos de su administración. Por último y muy importante, repartió tierras a los campesinos, siguiendo las directrices de Emiliano Zapata.
Sin embargo, el general carrancista Pablo González se impuso militarmente en la región hacia 1916. Baz renunció a su cargo y dejó el grado de general brigadier para retomar sus estudios. Es así que en 1920 finalmente se titularía como médico al realizar la primera sutura vascular en el laboratorio de fisiología de la Escuela de Medicina.

Carrera médica y política
Después de concluir su carrera, en la década de los años veinte realizó posgrados en las más destacadas universidades de Europa y Estados Unidos (como Harvard y La Sorbona). En 1935 fue elegido director de la Facultad de Medicina de la UNAM, de la Escuela Médico Militar y presidente de la Academia Nacional de Medicina. En estos cargos pudo implementar el servicio social de los estudiantes de medicina. Este consistió, desde aquél entonces, en brindar atención médica durante un año en los lugares más lejanos y encarecidos del país. En 1938 fue designado rector de la Universidad Nacional Autónoma de México. Durante su gestión ordenó y reorganizó las dependencias administrativas de la institución.
Manuel Ávila Camacho, presidente de México, lo designó Secretario de Salubridad y Asistencia en 1940. Esto fue muy relevante, ya que en el cargo, Gustavo Baz llevó a cabo una amplia construcción de hospitales en el país, algo jamás antes visto. Los proyectos más relevantes fueron el Centro Médico Nacional y los institutos de Cardiología y Nutrición, así como el Hospital Infantil. También en ese año, la UNAM lo nombró Doctor honoris causa.

Gobernador del Estado de México
Hacia 1957, fue postulado y posteriormente electo gobernador del Estado de México. Al frente del gobierno de su entidad natal, implementó una planificación de proyectos que le permitieron dar un fuerte impulso a la salud y la educación. Bajo su mandato, se construyó la Ciudad Universitaria de Toluca. También promovió la autonomía municipal, poniendo el ejemplo con el apoyo que brindó a la creación del municipio de Nezahualcóyotl. Su administración finalizó en 1963.
Ya en los años setenta y ochenta, sería elegido senador de la República. Tras una dilatada carrera médica y política, fallecería el 12 de octubre de 1987, en la capital del país.

Legado de Gustavo Baz
Actualmente, en honor de Gustavo Baz, diferentes hospitales, instituciones y vialidades llevan su nombre. Los ejemplos más renombrados son el Hospital General Gustavo Baz Prada, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Nezahualcóyotl y la Avenida Doctor Gustavo Baz, en Tlalnepantla. De hecho, el municipio natal del destacado médico, lleva su apellido como parte de su nombre oficial: Tlalnepantla de Baz.

Sin embargo, siempre lo más relevante del legado del doctor Baz, será la implementación del ideario social de la Revolución en el estado mexicano. Y es que es innegable que desde sus posiciones de poder gubernamental, gestionó e hizo realidad el acceso a la salud y la educación, de forma gratuita y amplia para los más desfavorecidos. Con ello, el régimen político emanado de la lucha armada no solo se consolidó, sino logró instaurar la faceta social de nuestro país. Su talento profesional y sus ideales revolucionarios se volvieron acciones políticas efectivas.

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