Ka’anche’, los huertos caseros mayas
Ka'anche' en español significa hortaliza en alto. Es una tradición maya que está desapareciendo y que bien puede ser una estrategia de huerto casero si tu espacio lo permite.
El ka’anche’ forma parte de los huertos de traspatio en las comunidades mayas de Yucatán. Se trata de una tradición agrícola que se ha ido perdiendo pero que resulta una herramienta muy eficaz para sembrar, cosechar y consumir verduras, hierbas y frutas frescas, saludables y a un bajo costo, incluso cuando sean productos fuera de temporada.
¿Qué es un ka’anche’?
De acuerdo con El manual del huerto casero:
«Se llama huertos familiares al lugar en que la familia produce animales y cultivos de hortalizas, frutales, forrajeros, medicinales e incluso maderables, destinados al consumo directo del hogar, ya sea en el patio, en el jardín, o cualquier terreno que pueda ser atendido y está bajo la vigilancia directa de los interesados».
Massan Lugo
El ka’anche’ es una especie de cama en alto que se usa para sembrar diferentes variedades de plantas; se trata de una de las técnicas hortícolas más antiguas de la cultura maya y de mayor tradición familiar. Esta técnica procura el crecimiento de los frutos, pero también de las aves y los animales de patio que generalmente crecían entre las familias mayas del suereste mexicano.
Quizá la asociación con el estrato social bajo, ya que era una práctica común entre los más pobres, quienes echaban mano de este utensilio para cosechar productos de autoconsumo sin permitir que la crianza de ganado lastimara las frutas y verduras y aprovechando los residuos como abono.
El círculo virtuoso
Visto desde una perspectiva ecológica y de conciencia, esta práctica resulta súper benéfica para evitar generar basura, ya que el abono de los animales ayuda al abono del ka’anche’ y éste protege las verduras y las frutas. Así, las familias podrán beneficiarse de la naturaleza en un equilibrio y a menor costo que el de consumo, que generalmente produce basura.
Esta noción de reutilizar, reciclar y de emplear el residuo cambia la conciencia de la cultura de consumo que compra y desecha sin enterarse adónde va a parar lo que tira. Este tipo de visión está dañando seriamente los entornos y crea círculos viciosos donde abunda el plástico y la idea poco responsable sobre lo que comemos, desechamos, utilizamos.
Ciertamente, aquí te contamos cómo crear el tuyo si cuentas con las condiciones; sin embargo, podrás improvisar para crear un huerto por más pequeño para conectar con este momento primigenio en el que el ser humano estuvo en contacto con el autoconsumo y el origen de los alimentos. Ser testigo de este fenómeno natural nos hace más concientes de nuestro lugar en el mundo.
¿Cómo hacer un ka’anche’?
Materiales
- Madera (ja’abín, boom, xktinchè, silil, bejucos y bajareques)
- Tierra (roja o k’aankab pero es preferible la negra boxlu’um
- Abono (estiercol de cerdo, bovino, gallinas o aserrín, cáscara de huevo, ceniza)
- Relleno de cama: (hojas de plátano, pinchas, zacate, bolsas de rafia)
En su tesina, Jorge Antonio Ceh Dzul refiere:
El Ka’ anché’ es fabricado con maderas y horcones que se utilizan como banca-che’ (es el sostén de todas las maderas) y bajareques para el ta’asche’ (especie de cama que se utiliza como piso que es la que almacena la tierra). El banca-che’ debe ser de madera dura porque es la base del ka’ anche’ ya que es el sostén. El material del piso puede ser de hojas de plátano, pencas, etc, en la actualidad se utilizan las bolsas de rafia, ya que esto tiene la función de tapar los orificios que dejan los bajareques antes de rellenar el ka’anche’.
El relleno se realiza de preferencia de tierra negra del monte, que se revuelve con ceniza y se abona con estiércol de los animales hasta alcanzar de espesor de 20 a 25 cm.
El tamaño detente de las necesidades de la familia:
- 2 m de largo x 80 cm x 1 m de ancho y de 1 o 1.5 altura para facilitar el riego
- 1 año de vigencia
Qué se siembra
- Cilantro
- Rábano
- Cebolla roja
- Ixil
- Criolla
- Chile
- Tomate