La bella moneda mexicana que China copió para convertirla en su moneda oficial: 8 Reales
Por 400 años la moneda de 8 Reales fabricada en México obtuvo gran prestigio en diferentes partes del mundo, incluyendo China, razón por la que ese país la copió, duplicó y distribuyó entre la población.
De todas las monedas que han surgido en la historia de México, me atrevo a decir que la más importante es la de 8 Reales Mexicana, y a lo largo de este texto me esforzaré para convencerlos de ello. Mientras tanto colocaré aquí un dato sobre esta pieza de plata que casi nadie tiene presente: esta legendaria moneda de 8 Reales Mexicana se convirtió en, nada más y nada menos, que en la moneda oficial de China. Sí, con ella los habitantes de esa nación compraban bienes y servicios.
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¿Cómo ocurrió esto?
Antes de pasar al punto en cuestión debo informarles que en una plaza de ciudad de Jinggangshan, provincia oriental china de Jiangxi, se erige una enorme réplica de la moneda en cuestión, con una esplendorosa águila republicana al frente y arriba de ella una leyenda que llena de orgullo a los connacionales que viven o visitan aquel país: “República Mexicana”.
Dicho monumento se levantó en este punto de China porque fue precisamente en aquella ciudad en donde el país que vio nacer al Mao Zedong, estableció su primera Casa de Moneda manejada por el Ejército Rojo bajo la dirección del Partido Comunista Chino, era el año de 1928.
Fue en ésta, la primera Casa de Moneda China, en donde los acuñadores chinos copiaron, reprodujeron, multiplicaron y dispersaron entre la población la moneda de 8 Reales Mexicana. No encontré un documento que indique si acaso los chinos tuvieron que solicitar algún permiso por uso de diseño a la Real Casa de Moneda mexicana, pero intuyo que no.
Para darle una especie de personalización, los integrantes del Ejército Rojo que trabajaban fabricando la citada moneda, colocaron en el ala derecha del águila mexicana el caractér “gong” que quiere decir “obreros, campesinos y soldados”, fue el toque comunista.
Seguir la pista de la moneda de 8 Reales
Una vez explicado esto nos iremos unos años más atrás para explicar por qué llegaron a esto los chinos. En 1535 la Real Casa de Moneda empezó a acuñar la moneda de 8 Reales en la Ciudad de México, primero con la cabeza de los reyes españoles, y en años posteriores con el águila de México.
Era una época en la que la plata mexicana se extraía a raudales de las diferentes minas, especialmente de Zacatecas, cosa que les habría permitido a españoles y mexicanos crear una moneda de 8 Reales con una pureza de plata superior a la de otros países, (en otras latitudes se hacían piezas de plata pero con mayor cantidad de cobre u otros metales por lo que el valor real disminuía) con el tiempo se convirtió en garantía auténtico valor para personas de gran parte del planeta.
Los capitanes de buques norteamericanos emplearon la moneda de 8 Reales para comprar esclavos en las costas occidentales de África y para adquirir el té de China y llevarlo a los Estados Unidos, indica el investigador John McMaster en un extraordinario estudio titulado Aventuras Asiáticas del Peso Mexicano.
McMaster explica que la moneda de 8 Reales se utilizaba en todas las islas del Pacífico y a lo largo de la costa de Asia, desde Siberia hasta Bombay. Con dicha pieza también se compraron bibliotecas y colecciones asiáticas de arte que sirvieron para enriquecer acervos tan importantes como el de las universidades de Boston y Harvard, en resumen a la moneda de 8 Reales se les conoce como la primer y más importante divisa mundial, mérito que ostentó por cuatro siglos.
Y, como dijeran los publicistas, la moneda de 8 Reales ya estaba en el top of mind como moneda de excelente valor para los habitantes de gran parte del globo, incluyendo los chinos quienes tenían confianza en dicha moneda mexicanas durante el periodo tardío de la dinastía Qing y el régimen de Kuomintang, se explica en un reportaje de la agencia de noticias Xinhua, así decidieron copiarla en su primera Casa de Moneda fundada en 1928.
Como anécdota se cuenta que en alguna ocasión Mao Zedong pidió a los acuñadores que no falsificaran ni disminuyeran la pureza de la plata en su moneda de 8 Reales, a fin de que la gente no perdiera su confianza en ella.
Por eso no estaría nada mal ir a buscar en los baules y demás cachivaches de los abuelos para saber si a caso no guardaron por ahí una de estas históricas y valiosas monedas.