Morrales de jerga, el clásico mexicano que se popularizó entre los hippies
Los morrales de jerga se han vuelto uno de los accesorios clásicos del arte textil de México. Sin embargo, a pesar de ser tan comunes hoy en día, pocos conocen el inicio de su popularidad hace varias décadas.
Hoy en día es muy común vera a mujeres, hombres, jóvenes, adultos, llevar morrales de jerga. Y aunque se le suele relacionar con los hippies o los estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, esos no son más que estereotipos. Su historia es mucho más interesante de lo que aparenta este icónico accesorio mexicano.
Los morrales
Un morral es una bolsa para el guardar diferentes cosas. Es de forma cuadrangular, boca ancha y sostenida por un lazo. Y aunque es un accesorio muy común en otras latitudes del mundo, en México su origen se encuentra en los pueblos originarios y las comunidades campesinas del país.
En estos entornos, tienen un valor que va más allá de lo utilitario. Sirven para viajar, acompañar atuendos de fiesta (como una boda) o para cumplir con las labores diarias. También, son parte indispensable de la vestimenta típica de los pueblos nahuas, huicholes, otomíes, totonacos, tepehuas y huastecos, por mencionar algunos. Son un indicador de identidad. Estas bolsas son prueba del talento y dedicación de los artesanos mexicanos, quienes confeccionan estos objetos con técnicas ancestrales que requieren de habilidad y tiempo.
Los morrales de jerga
El morral de jerga se popularizó en la década de los setenta junto a la sudadera del mismo material. Esto se debió a que surfistas estadounidenses provenientes de California, cruzaban al lado mexicano, hacia Baja California, con el fin de practicar surf en sus playas. La necesidad de llevar bolsos para sus enseres así como de abrigarse en las frías noches costeras, llevó a estos turistas a adquirir los morrales y abrigos hechos de jerga en la zona. Los surfistas extranjeros llamaron a la chamarra the Baja sweater («el suéter de Baja»), Baja Hoodie, «Sudadera estilo Baja», Hippie Hoodie o «Poncho Baja».
El morral al formar parte del atuendo de estos curiosos americanos, se popularizó tanto en Estados Unidos como en México. Actualmente, la manufactura de los bolsos y sudaderas de jerga tienen diferentes sitios de proliferación. El principal de ellos se encuentra en Contla de Juan Cuamatzi, en el estado de Tlaxcala.
Elaboración del morral de jerga
El morral de jerga es elaborado a partir de un telar. Como primer paso, los artesanos van a comprar hilos de fibras recicladas de algodón, acrílico y poliéster. Después estos hilos lo enredan en un tubo que llaman “Julio”. El rollo resultante de hilo lo montan en el telar, para posteriormente empezar a tejer. Una vez que la tela sale, se dobla y se lleva a golpear para que obtenga una textura esponjosa.
De ahí el proceso que sigue es el tendido. Después se trazan las piezas del morral y se cortan. Se prosigue con la confección, donde por lo general se utilizan diferentes tipos de máquinas de coser para obtener el acabado final. Todo el proceso le lleva más de un día de arduo trabajo al artesano. La textura final del morral presenta un gran parecido con la tela conocida como jerga, un textil maquilado de manera industrial catalogado por su implementación en la limpieza. Por ello, la prenda también es conocida como “bolso de jerga”.
Aunque actualmente marcas reconocidas de ropa han intentado plagiar tanto la tela, como los motivos del tejido de los morrales y sudaderas jerga, se ha defendido a cabalidad el trabajo de los artesanos del país.
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