¿Quiénes fueron las mujeres muralistas en México que hicieron historia y nadie te contó?
La historia del muralismo mexicano no está completa sin ellas. Las mujeres muralistas en México también narraron los sueños y las heridas de un país en transformación.
Las mujeres muralistas en México también pintaron historia, aunque durante décadas sus nombres permanecieron en las sombras de los grandes maestros del muralismo.
Mientras Diego Rivera, Siqueiros y Orozco acaparaban la atención de críticos e instituciones, muchas mujeres ya alzaban la voz —brocha en mano— desde los muros del país. Contra todos los obstáculos, ellas también transformaron el arte público en el siglo XX.
El andamio también fue suyo
Durante los años dorados del muralismo, ser mujer y artista significaba nadar contracorriente. A pesar del machismo dominante en el ámbito artístico y del poco respaldo institucional, varias artistas lograron colarse en el movimiento más importante del arte moderno mexicano. Lo hicieron desde el compromiso social, el activismo político y una profunda sensibilidad estética que dejó huella.
Aurora Reyes, por ejemplo, no solo fue la primera muralista de México, también fue una figura comprometida con la lucha magisterial y los derechos de las mujeres. En su mural Atentado a las maestras rurales, pintado en 1936, denunció la violencia contra las educadoras rurales en una época en la que nadie hablaba del tema.
Extranjeras que encontraron su voz en México
México no solo fue cuna del muralismo; también se convirtió en refugio para artistas extranjeras que encontraron en sus muros la libertad que sus países les negaban.
Tal fue el caso de las hermanas Marion y Grace Greenwood, originarias de Nueva York, quienes llegaron a Michoacán en los años treinta y pintaron obras como Hombre y máquina y La minería, esta última en el Mercado Abelardo L. Rodríguez de la Ciudad de México.
También destaca la obra de Valetta Swann, artista inglesa que encontró inspiración en las comunidades rurales mexicanas. Con murales como Sinfonía cósmica y Las delicias, dejó claro que el muralismo femenino podía tener un estilo propio y profundamente emotivo.
Varias muralistas comenzaron como asistentes de los llamados tres grandes. Rina Lazo trabajó con Diego Rivera en el mural Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central. Sin embargo, más tarde, Lazo firmaría sus propias obras, como La gloriosa victoria en Guatemala y El pueblo en demanda de salud en el Hospital La Raza.
Mujeres muralistas que debes conocer
Aurora Reyes (1908–1985)
- Origen: Chihuahua, México.
- Trayectoria: Fue la primera mujer muralista de México. Estudió en la Academia de San Carlos y fue autodidacta. Su obra denunció la violencia, la desigualdad y defendió los derechos de las mujeres trabajadoras.
- Obra destacada: Atentado a las maestras rurales (1936), en el Centro Escolar Revolución, CDMX.
Rina Lazo (1923–2019)
- Origen: Guatemala.
- Trayectoria: Llegó a México becada para estudiar en La Esmeralda. Fue asistente de Diego Rivera y después desarrolló su propio estilo. Su obra combina ciencia, política y cosmovisión mesoamericana.
- Obras destacadas: El agua, origen de la vida (Chapultepec), La gloriosa victoria (Guatemala).
Elena Huerta (1908–1997)
- Origen: Coahuila, México.
- Trayectoria: Realizó el mural más grande hecho por una mujer en México. Su obra está profundamente ligada al discurso revolucionario y campesino.
- Obra destacada: Murales en la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (Saltillo).
Electa Arenal (1935–1969)
- Origen: México.
- Trayectoria: Hija de Elena Huerta. Trabajó con Siqueiros en el Polyforum y con Diego Rivera en Ciudad Universitaria. Llevó su arte a Cuba, donde se involucró en la Revolución.
- Obras destacadas: Canto a la Revolución, Infancia y Maternidad (Cuba).
Marion Greenwood (1909–1970)
- Origen: Nueva York, EE. UU.
- Trayectoria: Se formó en París y Nueva York. Aprendió la técnica del fresco en México y colaboró con su hermana Grace. Su obra retrata el trabajo, la industria y el pueblo mexicano.
- Obras destacadas: Mercado en Taxco, La industrialización del campo (CDMX).
Grace Greenwood (1905–1979)
- Origen: Nueva York, EE. UU.
- Trayectoria: Hermana y colaboradora de Marion. Pintó por encargo en Morelia y CDMX, enfocándose en la lucha obrera y el papel de la mujer trabajadora.
- Obra destacada: La minería, en el Mercado Abelardo L. Rodríguez (CDMX).
Valetta Swann (1904–1973)
- Origen: Inglaterra.
- Trayectoria: Se instaló en México y desarrolló obra mural, pictórica y escultórica. Se centró en temas rurales y la vida cotidiana de las mujeres.
- Obras destacadas: Sinfonía cósmica, Las delicias (Museo Nacional de Antropología).
Fanny Rabel (1922–2008)
- Origen: Polonia, nacionalizada mexicana.
- Trayectoria: Estudió en La Esmeralda y fue discípula de Rivera, Siqueiros y Kahlo. Su arte es más introspectivo y emotivo que político.
- Obras destacadas: Alfabetización (1952), Sobrevivencia de un pueblo por su espíritu (1957).
El arte de resistencia de las mujeres muralistas
A pesar del olvido histórico, las mujeres muralistas no se detuvieron. Pintaron escuelas, estadios, hospitales y mercados, siempre fieles a una visión comprometida con los sectores marginados. Sus murales hablaron de lucha obrera, educación, desigualdad, libertad de expresión y la vida cotidiana de las mujeres.
Hoy, revisar sus trayectorias no solo es un acto de justicia, también es una invitación a replantear cómo se cuenta la historia del arte en México. Ellas también fueron protagonistas, aunque muchas veces sin reflectores, sin museos que compraran sus obras o sin becas que garantizaran su sustento.