Museo de Historia (Villahermosa)
Este museo está ubicado en la Casa de los Azulejos, llamada así porque, tanto en el exterior como en la planta alta interior, sus muros están totalmente recubiertos de azulejos.
La construcción fue propiedad de don José María Graham-McGregor, quien compartía con varias personas de gran arraigo económico, social y político, entre los años de 1889 y 1915, una de las zonas con mayor actividad comercial de Villahermosa. Vivían ahí los duques de Estrada, los Ferrer y el entonces gobernador de Campeche, don Arturo Shiels y Cárdenas. Además se establecieron en la manzana varios establecimientos como la farmacia Manuel Ponz y Ardil de la firma Ponz-Graham y Ferrer-Ponz, la empresa Juan Ferrer y Cía, la Casa Brazo Fuerte y la Fama Tabasqueña de Fortaleza y Cía., dedicadas estas dos últimas a la exportación e importación de productos nacionales y de las principales casas de Estados Unidos y Europa.
La Casa de los Azulejos es una bella expresión arquitectónica en donde se plasma marcos cubiertos de azulejos al estilo renacentista italiano o barroco español, pisos de mosaico y arcos con influencia gotizante y múdejar, pilastras ornamentales con capiteles corintios y barandales de fierro con bovedillas de tabique, elementos muy propios del momento y del avance industrial. Su fachada remata con una cenefa de azulejos con perfiles egipcios y en la planta alta un friso y una balastro que muestra 11 bellas esculturas antropomorfas de rasgos clásicos, restaurado por el gobierno del Estado y por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
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A partir del 8 de diciembre de 1985, este bello recinto acogió al Museo de Historia. El interior se compone de varios cuadros en donde se exponen planos de la construcción del edificio, así como varias piezas que representan la época prehispánica. Entre las más importantes están varias herramientas hechas a mano fabricadas en serpentina y jade de la cultura Olmeca y ladrillos de barro cocido con trazos y dibujos del periodo clásico tardío de la cultura maya. En la planta alta existen cinco salas: la primera exhibe dos mapas: uno muestra la ubicación geográfica del estado y el otro, su medio ambiente. Las salas dos y tres dan una amplia visión de la Europa durante los siglos XV y XVII. La historia verdadera de la Conquista a través de pergaminos, hojas de libros antiguos, láminas del lienzo de Tlaxcala y algunos pasajes del códice Florentino. En la cuarta hay ejemplos del fenómeno que afectaría a los puertos importantes: la piratería. Ahí se exhiben cañones, herraduras y anclas del siglo XVI que ponen de manifiesto la irrupción de los piratas en las costas de Yucatán y Ciudad del Carmen, convirtiéndolas en base de sus actividades.
En la quinta se exponen dos columnas: una de madera dorada de estilo barroco popular y la otra salomónica de madera policromada con cabezas de ángel, las cuales pertenecieron a los altares de una iglesia, además de un sillón frailero de madera de cedro blanco, respaldo y asiento de cuero clavetiado mexicano que data entre los años de 1522 y 1790, símbolos de la época colonial de Tabasco. Finalmente, en la planta baja del edificio posee exposiciones temporales.
Ubicación: 27 de Febrero y Juárez s/n.
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