8 tips para visitar la Alameda Central
El primer parque de América con su mejorada imagen invitan a visitarla. Éstas son nuestras recomendaciones para que disfrutes al máximo de tu próximo paseo por este ícono de la capital.
1. Prepara tu cámara
La vas a necesitar.
2. Recorre la Alameda de día… ¡y de noche!
Abierto al público en 1592 por el hijo del entonces virrey don Luis de Velasco, el parque alcanzó su mayor esplendor en épocas de Porfirio Díaz, cuando el general mandó colocar -en el mismo lugar donde antes lucía el quisco de estilo morisco que hoy engalana la Alameda de Santa María La Ribera-, el monumento dedicado a Benito Juárez (el famoso Hemiciclo, por su forma de medio círculo).
Desde entonces, no se había hecho en la Alameda Central un trabajo de notable dedicación que devolviera a este espacio recreativo su encanto decimonónico y de principios del siglo XIX. Hoy, la Alameda luce fantásticos pisos de mármol que remplazaron a los desgastados andadores de concreto. Los jardines y jardineras han sido totalmente reforestados con nuevas plantas y árboles como jacarandas y álamos -los cuales recuerdan por qué el Central Park de Nueva York se inspiró en la Alameda para alcanzar su afamada imagen-. Mientras que, al anochecer, la nueva iluminación de los corredores y de las fuentes le otorga un nuevo rostro que invita a los transeúntes a deambular con seguridad. Además, se instalaron varias cámaras y existe vigilancia las 24 horas para confort de los visitantes.
3. Admira las esculturas y fuentes del parque
Completamente restauradas, no puedes dejar de contemplar las ocho esculturas y fuentes dispuestas en varios sectores de la Alameda. Las piezas conocidas como Las Américas, las Danaides, Neptuno, las Ninfas 1 y 2, Mercurio, la Primavera y Venus, correspondientes a la segunda mitad del siglo XIX, ahora muestran un tono negro mate (su color original) después de haber sido pulidas y reparadas en sus partes faltantes. Las fuentes, por su parte, se equiparon con nueva tecnología la cual genera chorros danzantes, así como con iluminación especial que resalta la belleza de éstas al caer la noche. Mismas también que durante el día los niños aprovechan para refrescarse y jugar con el agua.
4. Aprecia sus nuevas fuentes
Además de las ocho figuras restauradas, en cada esquina de este ícono de la Ciudad de México fueron instaladas cuatro nuevas fuentes; todas cuentan con iluminación LED de colores y tecnología que impulsa chorros ¡de hasta 20 metros de altura!
5. Pon especial atención en la fuente de La Primavera
Ésta es una de las ocho fuentes recuperadas. La identificarás de inmediato como una figura femenina sosteniendo un cántaro. Obsérvala desde su lado oeste y dirige tu vista hacia la Torre Latinoamericana, verás que la composición es ideal para tomarte una foto con estas excelentes obras de fondo.
6. Tómate una foto en el Hemiciclo a Juárez
Ubicado frente a la Avenida del mismo nombre, al sureste de la Alameda, este monumento recuperó su blancura original después de sendos trabajos de limpieza. Sus ornamentos de oro y bronce también brillan nuevamente después de ser pulidos arduamente a mano. Con orgullo se puede decir que el monumento luce casi igual que como cuando el presidente Díaz lo inauguró hace más de 100 años en el marco de las fiestas del Centenario de la Independencia de México.
7. Contempla la réplica del mural de Diego Rivera “Sueño de una tarde dominical en la Alameda”
Sobre la calle de Doctor Mora, hoy convertida en un agradable andador peatonal, fue colocada una réplica, en menor escala, del famoso mural hecho por el maestro Rivera en 1947 (el original mide alrededor de 74 metros cuadrados y está alojado en el museo cercano dedicado a resguardar la obra del muralista guanajuatense). Si eres curioso notarás cómo, de izquierda a derecha, en la pieza se descubren importantes personajes de la historia de México, todos deambulando por los corredores y espacios de este antiguo parque.
8. Disfruta de su original quiosco
Ubicado en el ala norte de la Alameda, sobre Avenida Hidalgo, goza de la sombra que proporciona esta estructura que data del siglo XIX y cuya figura no fue ajena a los trabajos de remodelación y reacondicionamiento del parque que hoy, luce como en su mejores años.
¿Tu ya visitaste Alameda Central de la Ciudad de México? ¿Qué te pareció su restauración?
¿Quieres escaparte a Ciudad de México? Descubre y planea aquí una experiencia inolvidable