Pet friendly: de pata de perro por Mazunte

Esta vez llegamos a nuestro destino más pronto de lo que pensaba, mi mamá humana manejó poco más de 1 hora por la carretera costera 200 hasta llegar a otro paradisiaco destino: Mazunte.

Este Pueblo Mágico de pescadores nos recibió con un clima caluroso, el sonido del oleaje que rompía a la orilla de la playa y un cielo despejado que por la tarde se fue tornando en un naranja intenso para disfrutar de un mágico atardecer.

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Hotel Cocolia, una experiencia restauradora 

La tarde había caído y ya nos esperaba Adriana Morales, gerente general del hotel Cocolia, donde pasamos tres noches de ensueño en uno de sus nueve bungalows privados que ofrecen una imponente vista al Océano Pacífico en todo su esplendor. 

Desde el primer momento que llegué me sentí especial con el gran recibimiento que nos dio Adriana y su perrita La Negra; entre apapachos, lengüetazos y ladridos pude disfrutar libremente olfateando esta zona semivirgen, rodeada de cactus, árboles nativos y una diversidad de plantas de la región. Me divertí tanto que hasta olvidé uno de mis juguetes enterrados en la jungla salvaje.

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Este hotel completamente pet friendly parece casi secreto, está rodeado de una exuberante vegetación y enclavado en la zona más alta de Mermejita. Se ubica a solo un kilómetro del pueblo y de la playa y el camino para llegar es de terracería montañosa, con subidas y bajadas pronunciadas. 

Aquí pude desconectarme de mis “problemas perrunos”, al mirar claramente un cielo completamente estrellado por las noches, y despertar cada mañana con el mantra del sonido de las olas golpeando la orilla de la playa, junto con el canto de diversas especies de aves como loros y chachalacas, que acompañan la salida del sol en cada amanecer. 

Comida orgánica y local

Por las mañanas pude disfrutar con mi mamá humana de un delicioso desayuno orgánico con vista al mar en el restaurante del Hotel Cacao. Aquí conocí a la chef Leticia, quien dijo que solo utiliza ingredientes orgánicos de producción local.

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El menú incluye una variedad de jugos frescos, batidos detox, pan de grano entero hecho en casa, panecillos dulces y fruta fresca. Para el almuerzo y la cena, se puede disfrutar de recetas tradicionales mexicanas, así como de opciones vegetarianas.

Mazunte, Pueblo Mágico

Después del abundante desayuno, decidimos bajar al pueblo para recorrer sus pintorescas calles. Atado a mi correa, pude dar un agradable paseo por las calles de este lugar, me sentí en un ambiente rústico bohemio, lleno de magia y folclor, con construcciones hechas con materiales orgánicos: hoja de palma natural, madera y adobe.

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En la avenida principal Paseo de Mazunte pude observar numerosas tiendas de artesanías locales, así como prendas de hilado que dan identidad a esta comunidad; mientras que por las noches pude percibir una variedad exquisita de diversos aromas provenientes de los restaurantes que ofrecen comida típica oaxaqueña y deliciosos antojitos mexicanos.

Una empanada de sabor

Por la noche, mi mamá y yo fuimos al restaurante La Empanada, donde conocimos a Rafa, propietario de este lugar pet frriendly; me recibió con otro platón de agua refrescante que me bebí mientras mi mamá saboreaba una deliciosa pizza con su amigo Julien.

La pizza de este lugar es deliciosa, de masa delgadita y crujiente, está de pelos. También se puede disfrutar de pastas, enchiladas, papás horneadas, ensaladas, sushi y mariscos frescos.

Casa Mermejita

Repuestos y renovados, al día siguiente tomé mi correa y con mi mamá nos lanzamos a conocer playa Mermejita. Pero antes del recreo, visitamos Casa Mermejita, donde nos recibieron con una deliciosa comida. 

Desde este lugar pude disfrutar de una imponente vista que se extendía por todo el litoral de la Playa Mermejita. En este hotel pet friendly, que está sobre una hermosa loma frente al mar, pude recorrer sus habitaciones con todo tipo de diseños geométricos: ovalados, cuadrados, y triangulares.

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Está rodeado de fauna tropical y vegetal, un lugar ideal también para relajarse en un alojamiento que ofrece una paz natural y bellos rincones dedicados al arte plástico, como instalaciones, pintura y esculturas hechas por artistas internacionales.

Playa Mermejita

Con la energía a todo lo que da, bajé corriendo de la loma hasta llegar a Playa Mermejita. Esta playa está de pelos también, aunque mi humana no me dejó nadar como yo quería porque el oleaje es intenso y golpea fuertemente sobre la orilla, pude correr libremente sobre esta playa casi virgen que se extiende por un kilómetro. 

Quede asombrado al sentir mis patitas sobre la playa tan suave, con diferentes tipos de aleación de arena que provocaban diversas tonalidades de negros brillantes debido a los minerales de la zona.  Aquí le dijeron a mi mamá que se puede observar tortugas que llegan a poner sus huevos en los meses de julio a diciembre.

Liberamos tortugas

Después del paseo por la playa, mi mamá ató mi correa y regresamos por Camino a Mermejita hasta llegar a Playa Rinconcito. Aquí liberamos tortugas de la especie golfina y pude observar cómo estos pequeños animalitos eran arrastrados por las olas del mar una y otra vez en su intento por entrar al mundo marino.

Camilo, de la Cooperativa Escobilla, que se dedica a la protección de huevos y su conservación, platicó a mi mamá que los habitantes de Mazunte promueven la protección de la tortuga después de tomar conciencia de la importancia de este animal para el medio ambiente. 

También nos recomendó visitar el Centro Mexicano de la Tortuga que alberga 7 de las 8 especies de tortuga marina.

Punta Cometa, atardeceres imperdibles

Concluimos nuestra visita en Mazunte observando una increíble puesta de sol desde el cerro sagrado de Punta Cometa. Para llegar aquí primero tuve que subir por un camino boscoso que conecta con playa Rinconcito; otro camino es subir por camino a Playa Mermejita.

Durante el camino pude andar libremente y junto al risco de la colina disfruté del oleaje que golpea contra los numerosos acantilados que bordean el precipicio. Finalmente, me senté con mi mamá y nos despedimos de este paradisiaco lugar con una imponente vista de 180º al Océano Pacífico. 

Datos de interés:

• 57 km de distancia entre Huatulco y Mazunte
• La vía más rápida es por la carretera federal 200
• No hay casetas de cuota 

Elodie Casteilla y César González