¿Quién fue fray Juan de Zumárraga?
A fray Juan de Zumárraga le conocemos por haber sido el primer obispo y arzobispo de la ciudad de México y además por recibir de las manos de Juan Diego las “Rosas del Tepeyac”.
A fray Juan de Zumárraga le conocemos por haber sido el primer obispo y arzobispo de la ciudad de México y además por recibir de las manos de Juan Diego las “Rosas del Tepeyac”.
Este hecho por sí mismo sería suficiente para ocupar un lugar preponderante en la historia mexicana, pero qué más conocemos los mexicanos de este fraile perteneciente a la orden de San Francisco.
Nacido en 1468 en la villa de Durango, muy próxima a la ciudad de Bilbao, España, debió su designación a la amistad que le unía con el Emperador Carlos V, quien lo debió presionar para que abandonara el convento de Aranzazu y viajara a la Nueva España, junto con los oidores de la Primera Audiencia en agosto de 1528.
El doble cargo de Obispo y Protector de Indios le originó fuertes enemistades con encomenderos y conquistadores que presentaron 34 acusaciones en su contra lo que lo obligó a regresar a España a principios de 1532. Zumárraga probó su inocencia y regresó a México trayendo con él a numerosas familias de artesanos y seis monjas destinadas a ser maestras de mujeres indígenas.
De acuerdo con el primer virrey trabajó en el establecimiento de la imprenta en México y por su mandato se imprimió el primer libro en 1539.
Debido a su iniciativa se fundó el Colegio de Tlatelolco y consagró a Francisco Marroquín como primer Obispo de Guatemala. Era ya septuagenario cuando tuvo el proyecto de pasar a Filipinas y de ahí a China como misionero, pero el Papa le negó el permiso y a cambio se le otorgó el cargo de Inquisidor Apostólico. Con ese carácter mandó a quemar a un indígena tlaxcalteca que había efectuado sacrificios humanos, sentencia reprobada por España fundamentando que los indígenas estaban recién convertidos y no se les podía juzgar con igual severidad que a los españoles.
El 11 de febrero de 1546, a instancias del Emperador, el Papa Paulo III erigió el obispado de México en arzobispado dándole por sufragáneas la diócesis de Oaxaca, Tlaxcala, Guatemala y Ciudad Real, Chiapa de Corzo, Chiapas.
Fray Juan de Zumárraga murió el tres de junio de 1548 y sus restos se conservan en la cripta subterránea de la Catedral de México.