Ruta Colonial de Nayarit: De Tepic a Ixtlán del Río

Tepic

El aire colonial de esta capital, le­vantada sobre restos prehispánicos, descansa en su centro: en el Templo y Ex Convento de la Cruz de Zaca­te, una construcción franciscana del siglo xvi. La milagrosa cruz adorada en la iglesia está hecha, al parecer, de un arbusto que nunca se seca. Cami­na por la Plaza de Armas —donde no puede faltar una estatua de bronce del querido poeta nayarita, Amado Nervo— y admira el estilo neogótico de la Catedral de la Purísima Con­cepción. A poca distancia encontra­rás el Palacio de Gobierno.

Algunas casonas virreinales fue­ron convertidas en museos, como el Museo Regional de Nayarit y la Casa Museo Juan Escutia. Ambos se ubican en mansiones del siglo xviii. El primero está dedicado a las distintas culturas nayaritas y sus ves­tigios arqueológicos; mientras que el segundo es la casa natal de ese héroe que participó en la Batalla de Chapultepec. Asómate también al Museo Amado Nervo para conocer el rincón donde fue niño el escritor modernista.

Tu recorrido por la ciudad bien puede terminar en la antigua Fábrica Textil de Bellavista. Fue edificada en 1841 como réplica de un edificio fa­bril de Gante, Bélgica. Dentro hay un museo con maquinaria, documentos y fotografías de esos días en que la manta, la mezclilla y el algodón eran aquí hilados. No te vayas sin ver la postal escénica formada por la Sierra Madre y la costa del Pacífico.

Cómo llegar
De Guadalajara, dirígete al noroeste por la autopista 15. Quizá te den ganas de iniciar la ruta al revés.

Santa María del Oro

Los recuerdos de un destino próspero gracias a la minería, marcan el trazo de Santa María del Oro, un poblado nayarita que gira en torno al Templo del Señor de la Ascención. Hace siglos, de lo es­condido de la tierra se sacaba oro. Para recordar ese glorioso pasado, quedan la Mina de Acuita­pilco y el casco de la antigua Hacienda de San José de Mojarras, además de numerosas capillas en derredor.

Pero quizá lo que más identidad ha dado a Santa María del Oro yace en un cráter volcá­nico de la Sierra Madre Occidental y es su laguna. La apariencia de este cuerpo de agua cambia por momen­tos del azul al verde, e invita a disfru­tarse de múltiples maneras: ya sea en velero, pescando o con la práctica de deportes acuáticos. Si te interesa pasar aquí un buen rato, considera que alrededor hay villas y cabañas.

Cómo llegar
De Tepic, dirígete al sur por la autopis­ta 15. En Arroyo del Colgado toma ha­cia el este por la carretera estatal que te lleva directo a Santa María del Oro.

Jala

Jala es el pueblo mágico de irregulares calles y casonas virreinales que pasa sus días al resguardo del Volcán Cebo­ruco. Si se observa desde la cumbre del gigante, puede verse a lo lejos la Basí­lica Lateranense de Nuestra Señora de la Asunción, esa donde se mezclan el rosa, verde y amarillo de la cantera. A un lado se halla la Capilla de San Francisco, con la Virgen de la Purísima Concepción portando, en vez de coro­na, un penacho.

Aquí pondrás a prueba tu condi­ción física en cualquiera de las ac­tividades desarrolladas en torno al volcán, o siguiendo el sendero que marca el Cerro de la Cruz. Si vienes entre junio y septiembre, puedes acercarte a la Cascada El Salto para admirar su espectacular caída de 30 metros de altura. Cómo llegar De Santa María del Oro, regresa a la autopista 15; sigue por esa vía al sur hasta llegar a Jala.

Ahuacatlán

Uno de los senderos del Camino Real que unían Guadalajara con el puerto de San Blas pasaba por este pequeño pueblo del sur. Entre sus joyas más preciadas se cuenta el reloj que remata el Templo de San Francisco de Asís, donado por el otrora presidente Álvaro Obregón. Los paisajes alrededor y los balnearios que delimitan la zona, son la excusa perfecta para hacer largas caminatas entre bosques de pino y roble.

Cómo llegar
De Jala, atraviesa la autopista 15 por la carretera estatal s/n, vía que te conecta con esta parada.

Ixtlán del Río

Los amantes de la arqueología encontrarán en y alrededor del poblado de Ixtlán del Río numerosos motivos para detenerse. Uno de ellos es el Museo de Antropología, que concentra figuras antropomorfas, piezas de obsidiana y todo aquello que se fraguó en el clásico 300-900 d.C. Otro motivo son los cercanos petrograbados de El Terrero, Sayulapa y El Veladero. Ve también a conocer la zona arqueológica de Ixtlán del Río, popularmente llamada Los Toriles. En este antiguo centro cívico-religioso te esperan el Edificio de los Relieves, característico por su escalinata y sus petrograbados empotrados; y la Pirámide de Quetzalcóatl, un adoratorio circular —de las pocas construcciones así que existen en Mesoamérica—. En las excavaciones de exploración de la pirámide se encontraron fragmentos de esculturas en piedra y figurillas de barro planas de reminiscencias toltecas. Para verlas, acude al sitio que las resguarda: el Museo Regional de Ixtlán.

Cómo llegar
De Ahuacatlán, dirígete al este por la federal 15 hasta que llegues a Ixtlán del Río.

Itinerario

Día 1. Tepic
Conoce los petroglifos que hay en los pueblos de Cachimín de Jauja y Pochotitán; y aprende un poco más sobre el asentamiento indígena de Tepique. Si vas con niños, visita los balnearios o parques acuáticos que hay en la zona. No te pierdas el manantial de Agua Caliente ni aquellos otros de Bella Vista, tampoco la cascada El Salto.

Día 2. Jala
Mientras caminas por las calles de este pueblo mágico, haz una parada en el Mercado Municipal, donde la sinergia de sabores va a llamar tu atención: desde las rosquetas, gorditas de maíz encaneladas y bizcotelas, hasta el colado de atole o el delicioso atole blanco de maíz. Dedica tiempo para conocer lo que las manos crean: equipales, huaraches y sillas de montar.

No te pierdas

• Sigue la Ruta del Café que organiza la operadora Nayarit Adventures alrededor de una finca cafetalera en La Yerba.
• Haz un paseo en turibús por los emblemá­ticos lugares de Tepic.
• Pregunta en la oficina de turismo de Jala por los recorridos a caballo en el pueblo y hacia el volcán.
• Armoniza tu espíritu con una visita a los curanderos del pueblo mágico de Jala.

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