Ruta Museos zacatecanos: De Zacatecas a La Quemada

Los museos de Zacatecas

Además de pasear entre los edificios de cante­ra rosa de la ciudad de Zacatecas, hay que co­nocer sus numerosos museos. Entra al Museo Pedro Coronel, ubicado en un antiguo colegio jesuita. Ahí se exhibe la vasta colección de arte moderno y universal que atesoró el artista Pe­dro Coronel. En los pasillos cuelgan obras de Joan Miró y Pierre Bonnard. En las salas se mi­ran máscaras africanas, grabados de Francisco Goya, piezas prehispánicas.

El Museo de Arte Abstracto Manuel Fel­guérez se encuentra en un edificio del siglo xix que fue cárcel durante el xx. Este es el si­tio para admirar la obra del maestro Felguérez y sus contemporáneos. Lienzos firmados por Vicente Rojo, Lilia Carrillo y Fernando García Ponce adornan las paredes. Además hay once murales que en 1970 representaron a México en la Feria Mundial de Osaka, Japón.

Las ruinas de un convento franciscano, sir­ven para guardar las pinturas del otrora yerno de Diego Rivera. Se trata del Museo Rafael Co­ronel, donde verás también títeres de Rosete Aranda y, sobre todo, las infinitas máscaras, venidas de distintos rituales y pueblos, que Rafael logró reunir. Si vas al Museo Francisco Goitia, te encontrarás en una mansión de 1948 donde se concentran piezas de los artistas que tanto estima Zacatecas. Ahí están los ahorcados de Francisco Goitia y los grabados de Julio Ruelas, las abstracciones de Manuel Felgué­rez, los vivos colores de Pedro Coro­nel y los enérgicos personajes de su hermano Rafael.

El Museo Zacatecano se halla en el mismo inmueble donde alguna vez se acuñaron monedas de oro y plata. Sus salas concentran lo mismo retablos religiosos que la gente del si­glo xix solía guardar en sus hogares, que una extensa e interesante mues­tra de arte huichol.

Cómo Llegar
Juan de Tolosa, El Pípila, Genaro Go­dina, Fernando Villalpando, Dr. Ig­nacio del Hierro, Av. Hidalgo, Jesús González Ortega y Elías Amador son las calles principales para andar por estos museos.

Museo Regional de Guadalupe

Ninguna visita es tan obligada como la que debe hacerse al Museo Regio­nal de Guadalupe, ubicado a siete kilómetros de la ciudad de Zacate­ cas. El antiguo Colegio Apostólico de Propaganda Fide de Nuestra Señora de Guadalupe, fundado por los franciscanos en 1707, aloja hoy este museo de 27 salas. Su gran acervo está compuesto por alrededor de 800 obras y la museografía se divide en dos: los recintos históricos, donde habitaron los frailes, y una impresionante pinacoteca, integrada por las piezas de connotados artistas novohispanos.

El recorrido puede llevarte varias horas, así que ve con tiempo. No te pierdas los 26 óleos, atribuidos al artista Ignacio de Berbén, que narran la vida y milagros de San Francisco de Asís en el claustro bajo. Sube por la Escalera Regia, ornamentada con otras tres monumentales pinturas del siglo xViii, y luego camina por el corredor de Los Mártires de Japón, hasta llegar a la Biblioteca Conventual que hoy contiene 8,000 volúmenes.

En el claustro alto o de la Pasión de Cristo te esperan otras tantas pinturas de Berbén. Admira el coro del Templo de Guadalupe, con su sillería en madera de cedro tallada. Y continúa por las salas prestando atención a la obra de los grandes pintores de la Nueva España: Cristóbal de Villalpando, Juan Correa, Miguel Cabrera, Gabriel José de Ovalle, Antonio de Torres.

Cómo Llegar
De Zacatecas, dirígete al sur por la federal 45; después toma la desviación hacia el centro de Guadalupe por la vialidad Arroyo de la Plata que te llevará a este museo.

Los museos de Jerez

Antes de los españoles, de su fundación como villa en 1569, Jerez era la tierra que pisaban los indígenas huachichiles y zacatecos. Entonces como ahora se levantaba la Sierra de Cardos a lo lejos. Con el paso del tiempo, el pueblo má­gico se fue llenando de huertos frutales, tam­bién de edificios inspirados en lo que Europa tenía de gótico y mudéjar, y de poetas como Ramón López Velarde regalando orgullo con su oficio a los jerezanos.

Para recordarlo existe el Museo Interactivo Casa Ramón López Velarde. Estar aquí es en­trar al tiempo en que el escritor fue niño, cuan­do el siglo xix aún se sentía cerca, y las mu­jeres y la patria todavía no formaban parte de sus versos. Esta fue la sencilla casa que lo vio crecer, la misma que se convirtió en museo en 1951 cuando se celebraba el 30 aniversario de su muerte. Todo en este sitio recuerda sin tre­gua al gran López Velarde: antiguos muebles, fotos y manuscritos; la cocina y sus olores aca­nelados; un par de patios interiores y el pozo que al asomarse también suelta algo de poesía a los interesados.

Sobre la misma calle donde se encuentra el Santuario de Nuestra Señora de la Soledad, hogar de la patrona de los jerezanos, también hallarás el Centro de Tradición y Cultura Jere­zana. Dentro ha quedado guardado todo lo que a Jerez importa: su historia, mapas antiguos, grabados de sus principales edificios y las bio­grafías de aquellos jerezanos que son dignas de contarse. Las salas se dedican a mostrar al visitante la pasión del pueblo, ese mundo de caballos y trajes de charro. Se explican enton­ces los orígenes y la evolución de la charrería, y a la descripción se suman sables y lazos, sillas de montar, múltiples sombreros y espuelas de gran arte. El museo no se agota hasta no aden­trarse en la sala dedicada a la tauromaquia, con música de paso doble y un ruedo simulado.

A un costado del Teatro Hinojosa se escon­de el Museo Comunitario. En él se exhiben aquellas cosas que significan algo para la gente del pueblo. Piezas prehispánicas, instrumentos de carpintería, máquinas de cocer y lámparas de “sereno” conviven lo mismo con una máqui­na de escribir de 1906 que con el viejo radio y el tocadiscos que pertenecieron a Pedro Infante.

Cómo Llegar
De Guadalupe, sigue al noroeste por la federal 45, pasa la capital y continúa hacia el suroeste por la federal 54 hasta llegar a Malpaso. Ahí, desvíate a la derecha por la estatal 23 hasta el pueblo mágico.

Museo de Sitio de La Quemada

Alguna vez asociada con la mítica Chicomoztoc —el lugar de origen de los aztecas—, la antigua y abandona­da fortaleza de La Quemada es toda­vía un misterio para los arqueólogos. Su tiempo fue el tiempo de la cultura chalchihuites, la que llegó a exten­derse desde el norte de Guadalajara hasta el centro de Durango.

Existiendo mucho más al norte que Mesoamérica, esa cultura supo de riquezas y comercio gracias a los abundantes yacimientos de piedra verde debajo del caliche de la región. Y mientras el sitio de Altavista, dos­cientos kilómetros al norte, perdía el control de las rutas comerciales hacia el año 650 d.C., La Quemada —con todo y su incierto origen— co­menzaba entonces su auge cons­tructivo en el valle de Malpaso.

En el Museo de Sitio encontrarás una maqueta a escala que permite entender en conjunto la zona ar­queológica, mientras que en los vi­tro murales se descubren los ecosis­temas que a la región pertenecen. La museografía se completa con obje­tos de concha y ofrendas elaboradas con turquesa; sorprenden las piezas de cerámica decorada en distintos estilos, desde súchil y amaro hasta pseudo cloisonné.

Cómo Llegar
Desde Jerez, toma la estatal 23 has­ta Malpaso y continúa al sur por la federal 54. Luego de 50 km, gira a la izquierda y sigue 2 km más por un ca­mino de terracería.

Día 1. Zacatecas Al caminar por la avenida Hidalgo te encontrarás no solo con la imponente Catedral, también con el Teatro Calderón y el Mercado Jesús González Ortega. Ahí puedes comprar dulces y artesanías. Sube al Cerro de la Bufa en teleférico y una vez arriba visita el Museo Toma de Zacatecas, donde podrás aprender todo acerca del episodio revolucionario del que fue protagonista la ciudad. Si quieres conocer el origen de la capital del estado, visita la Mina El Edén. Estuvo en funcionamiento desde 1584 hasta 1960. Hoy se ofrecen recorridos por su interior, y ahí encontrarás el Museo de las Rocas y Minerales.

Día 2. Jerez Entra a conocer el Instituto Jerezano de Cultura, un edificio del siglo xix que servía de escuela para niñas. Fue construido por el maestro cantero Dámaso Muñetón, el mismo que hizo la torre norte de la Catedral de Zacatecas. Vale la pena visitar también el Panteón de Dolores. Sus tumbas, criptas, pórti- os, mausoleos y sarcófagos de cante- ra labrada parecen formar parte de un museo de arte funerario. Hay dos objetos artesanales que son famosos en Jerez: las arracadas de oro y plata, y los cintos piteados. Puedes buscar en joyerías y talabarterías unos y otros.

• En Guadalupe se halla también el Centro Platero Artesanal de Zacatecas, ubicado en el casco de la Ex Hacienda de Bernárdez. Ahí podrás adquirir infinidad de delicadas piezas de orfebrería.
• La Hacienda de Ciénega, a cinco kilómetros al norte de Jerez. Se tata de la finca que perteneció en el siglo xix a la familia Gordoa, una de las más influyentes entre los hacendados de Zacatecas.
• Ve a la Sierra de Cardos, un paisaje de la Sierra Madre Occidental lleno de riscos y columnas de piedra. En pleno bosque se localiza “El Manantial”, un centro ecoturístico con cabañas donde puedes pasar la noche.

DÓNDE DORMIR

Mesón de Jobito
Jardín Juárez 143, Centro; Zacatecas.
T. 01492 924 1722
mesondejobito.com.mx

DÓNDE COMER

Acrópolis
Av. Hidalgo esq. Rinconada de Catedral
T. 01492 922 11284

Los Dorados de Villa
Plazuela de García 1314, Centro; Zacatecas.
T. 01492 922 5722

MUSEOS

Museo Pedro Coronel
Plaza Santo Domingo s/n, Centro; Zacatecas.
T. 01492 922 8021

Museo de Arte Abstracto Manuel Felguérez
Colón s/n, Centro; Zacatecas.
T. 01492 924 3705

Museo Rafael Coronel
Callejón de San Francisco s/n, Centro; Zacatecas.
T. 01494 922 8116

Museo Francisco Goitia
General Enrique Estrada 102, Sierra de Álica; Zacatecas.
T. 01492 922 0211.

Museo Zacatecano
Dr. Hierro 301, Centro.
T. 01492 922 6580

Centro de Tradición y Cultura Jerezana
Santuario 51, Centro; Jerez.
T. 01494 947 3046

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