Xipe Tótec, el dios que alimentó a la humanidad con su piel
Xipe Tótec, uno de los cuatro Tezcatlipocas, es el dios que se desprendió de su piel para ofrecerla como alimento a la humanidad.
“Yo soy la mata tierna del maíz, desde tus montañas te viene a ver tu dios, mi vida se refrescará y el hombre nuevo se fortalece. Nació el que manda en la guerra”. Fragmento del himno a Xipe Tótec
Xipe Tótec, el dios del regeneración del maíz y de la guerra
Xipe Tótec, “Nuestro señor el desollado” es el dios de la regeneración del maíz y de la guerra; de la primavera y la nueva vegetación, por tal motivo, se le considera como un dios de la fertilidad, además, es patrono de los orfebres.
También conocido como Tlatlauhqui Tezcatlipoca -Tezclatlipoca Rojo-, es hijo de la primera pareja divina , Ometecuhtli y Omecihuatl – Señor y Señora de la dualidad-, hermano de Huitzilopochtli -Tezcatlipoca azul-, Quetzalcóatl -Tezcatlipoca blanco- y Tezcatlipoca negro, los cuatro son creadores del universo según los aztecas.
Según Fray Bernardino de Sahagún los aztecas representaban a este dios vistiendo una piel teñida de amarillo, la cual pertenecía a un guerrero que se sacrificó rindiendo culto a Xipe Tótec, en el rostro lleva pintadas 3 líneas rojas, hechas con pintura facial de codorniz, una corona de forma cónica, en la mano lleva un chimalli o escudo y viste una falda de hojas de zapote.
La leyenda dice que Xipe Tótec se autosacrificó en beneficio de la humanidad, sacándose los ojos y desollándose en vida para alimentar a las personas con su piel.
De acuerdo con el autor Javier González en su el libro Xipe Tótec, guerra y regeneración del maíz en la religión mexica, que esta leyenda es una metáfora, pues el desollamiento se refiere al quitarle el totomoxtle -hojas- a la mazorca.
Tlacaxipehualiztli, la fiesta de Xipe Tótec
En marzo se realizaba la fiesta a Xipe Tótec, llamada Tlacaxipehualiztli -desollamiento de hombres-, duraba 20 días, en esta ceremonia se efectuaba un ritual de sacrificios, en donde los sacerdotes les sacaban el corazón a sus victimas -guerreros capturados en combate- y las desollaban, posteriormente las pintaban de amarillo, las llamadas teocuitlaquemitl – vestiduras doradas- y se vestían con estas.
En la ceremonia se le ofrendaban al dios las mejores mazorcas, así como los guerreros más valerosos y distinguidos para sacrificio, esto para obtener buena cosecha.
Estaba completamente prohibido hacer nixtamalización durante los sacrificios, pues es como se simbolizaba el desollamiento de Xipe Tótec, ya que con este proceso se le quita la piel a los granos de maíz.
En la fiesta de este dios se consumía carne humana junto con el maíz, pues el cuerpo desmembrado hacía alusión a los granos de este sagrado alimento, se tenía la creencia que los hombres fueron hechos de maíz, este acto de canibalismo sólo era efectuado por los sacerdotes durante el ritual, es el antecedente prehispánico del pozole, según nos narra Javier González.
Xipe Tótec es, la renovación en la naturaleza y en el ser humano, es el desprendimiento del pecado para alcanzar la purificación.
