¿Ya conoces Calakmul?
Esta antigua capital del Mundo Maya y fantástica Reserva de la Biosfera, localizada en Campeche, acaba de ser reconocida como Patrimonio Mixto de la Humanidad por la UNESCO. ¡Descúbrela!
Entre tanto verde, de pronto salta una mancha café. Para descifrar lo que es hay que quedarse quietos, aguzar los oídos, enfocar la mirada: ¡se trata de un mono araña que recorre la biósfera de Calakmul brincando sobre las copas de los árboles! Es un instante tan frágil que si te toma desprevenido, nunca te enteras que pasó.
Para llegar a este momento fue necesario un viaje de 290 km desde Campeche capital. Aunque salimos temprano, a las 7:00 de la mañana, ganamos dos horas de sueño, ventaja que no tienen quienes planean ir y volver el mismo día, ya que se recomienda comenzar la travesía a las 5:00 hrs.
El centro urbano maya de Calakmul es uno de los más grandes que se han descubierto y fue nombrado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, por lo que es una parada imperdible, pero conocer los otros asentamientos dan al visitante una visión más completa.
Le siguen en importancia Becán, ciudad rodeada por un foso único en el área maya que refiere a la actividad bélica que se vivía. También está Xpujil, al que se puede llegar caminando desde la cabecera municipal homónima, Chicanná, Río Bec, Hormiguero, Balamkú, Nadzcaan y Altamira, pero éste se encuentra en excavaciones y no está abierto al público.
Todo a pulmón
Además, la biosfera de Calakmul por sí sola es un gran atractivo. Es el segundo pulmón de América y la reserva tropical más grande de México. Alberga a alrededor de 86 especies de mamíferos, se encuentran presentes cinco de los seis felinos que existen en México (jaguar, puma, ocelote, tigrillo y leoncillo), y se han hecho 73 registros de orquídeas, esas delicadas flores que nunca había visto de manera silvestre y que en su hábitat natural lucen más guerreras, menos frágiles.
La biosfera es un eslabón ecológico entre los bosques húmedos del Petén guatemalteco, la región lacandona de Chiapas y la región norte y caribe de la península de Yucatán. La lluvia que cae aquí se filtra en el suelo y nutre los cenotes de los estados vecinos.
Dormir en la selva
No es un lugar silencioso, pero los sonidos que se escuchan nada tienen qué ver con el ruido al que estoy acostumbrada: oigo el viento moviendo los árboles, el cantar de los pájaros, algunos grillos. El Hotel Puerta Calakmul se localiza en el Km 98 de la carretera Escárcega–Chetumal (186). Sus 15 cabañas están dispersas por la selva y diseñadas para mantener el contacto con la naturaleza sin perder el lujo. No tienen cristales, pero sí mosquiteros; son de madera, están equipadas con amenidades orgánicas y las camas están recubiertas con sábanas de 250 hilos. Algunas cuentan con una terraza que invita a abrir un buen libro (o incluso uno malo, con ese panorama, la lectura es lo de menos). Tiene mirador y alberca. Dispone de agua caliente y luz eléctrica, pero el teléfono, televisión y conexión a Internet sólo están accesibles en un salón especial. Está a una hora de Calakmul y de Becán, Chicanná y Xpujil. La biosfera se encuentra a 15 minutos, por lo que se puede hacer senderismo.
Con un concepto muy similar está también el Hotel Chicanná Ecovillage, ubicado en el Km 144 de la carretera Escárcega-Chetumal, desde donde se puede llegar caminando a Chicanná y Becán. La diferencia es que además de habitaciones tipo cabaña, rodeado por la selva, con restaurante y alberca, este hotel tiene prácticas ecológicas: usan energía solar, tratan las aguas residuales y colocaron cisternas debajo de las habitaciones para hacerlas más frescas y evitar el aire acondicionado. Venden unos box-lunch para los que salen a expedicionar la biosfera y las zonas arqueológicas, ya que ahí no hay establecimientos ni de comida ni de agua.
El Hotel Debliz Xpujil es una opción más económica, se ubica en el Km 153 de la carretera Escárcega-Chetumal. Tienen habitaciones sencillas y suites equipadas con televisión, aire acondicionado, agua caliente y en el lobby hay Internet inalámbrico. Cuenta con alberca y cancha de basquetbol, además de un sendero interpretativo. Uno de los grandes atractivos de este lugar es que, previa solicitud, aceptan mascotas.
El Hotel Calakmul es uno de los más antiguos de la zona, se ubica en Avenida Calakmul, dentro de la cabecera municipal. Es un lugar modesto, pero limpio. Cuenta con habitaciones con televisión, agua caliente y aire acondicionado. Tiene además cabañas con baño compartido que son muy económicas. Los jardines se antojan para refrescar una tarde. A decir de Pedro, uno de los empleados, las plantas crecen sin necesidad de cuidados especiales, lo que les da ese toque selvático.
Para disfrutarlo en todo su esplendor, Calakmul es un municipio que no hay que recorrer con prisa, por eso lo mejor es elegir un hotel acorde a nosotros y explorar hasta sus más recónditos lugares.
Sus moradores
Viven en la reserva jaguares, ocelotes, tigrillos, monos araña, osos hormigueros, águilas y tapires.
Imprescindibles
– Levantarse en la madrugada para recorrer la biosfera y observar a los animales que salen a comer.
– Poner a prueba la condición física y subirse a las pirámides de Calakmul. Desde ahí da la impresión que se está rodeado de un vasto mar verde.
– Probar los camarones con coco al mango en el restaurante La Biosfera, dentro del Hotel Chicanná Ecovillage.
– Disfrutar, en lugar de padecer, que ni en los sitios arqueológicos ni en la biosfera hay señal para teléfono celular.
– Ver el atardecer desde la terraza de las cabañas del Hotel Puerta Calakmul.
– Pedirle a uno de los empleados del Hotel Calakmul un retoño de las plantas que crecen en maceta en los jardines del hotel.
Cómo disfrutar más
– Llevar ropa cómoda.
– Usar gorra y protector solar tanto en la biosfera como en las zonas arqueológicas.
– Los mejores meses para visitar la zona son de noviembre a febrero, porque no hace tanto calor ni humedad.
– Los baños en la zona arqueológica de Calakmul son composteros, hay que entrar sin prejuicios, ya que son muy ecológicos.
– Programar la cámara fotográfica con una velocidad alta para captar a los animales que aparecen en el camino sin que sus tomas resulten movidas.
Qué llevar
– Ni en la biosfera ni en las zonas arqueológicas hay establecimientos de comida, por lo que es recomendable llevar suficiente líquido y alimento.
– Disponer de una bolsa o mochila para guardar la basura generada, ya que hay pocos cestos de basura.
– Unos binoculares.
– Un teleobjetivo.
– Al salir de Campeche se puede comprar comida para desayunar en el camino, eso ahorrará tiempo.
– Si se visita en época de calor, llevar ropa lo más fresca posible y bebidas con electrolitos para evitar deshidratación.
Cómo llegar
Saliendo de Campeche capital, se debe tomar la carretera federal 180 que lleva a Champotón. A la salida de la cabecera municipal de Champotón, se toma la carretera federal 261 hasta Escárcega, después se toma la carretera federal 186 a Chetumal, esta vía llega hasta Xpujil, la cabecera municipal, o directamente a la zona arqueológica de Calakmul, para ir ahí hay que llegar a la población de Conhuás y tomar la brecha.
Contactos
Hotel Puerta Calakmul
Km 98 de la carretera Escárcega-Chetumal.
Tel. 01 (998) 892 2624.
www.puertacalakmul.com.mx
Hotel Chicanná Ecovillage
Km 144 de la carretera Escárcega-Chetumal.
Tels. 01 (981) 811 9191 y 01 800 560 8612.
www.chicannaecovillageresort.com
Hotel Debliz Xpujil
Km 153 de la carretera Escárcega-Chetumal.
Tels. 01 (981) 815 2222 y 815 2227.
www.hoteldebliz.com.mx
Hotel Calakmul
Av. Calakmul s/n entre Xpujil y Balamkú, Aviación.
Tel. 01 (983) 871 6029.
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