Ignacio Cumplido, notable personaje del México decimonónico - México Desconocido
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Arte y Artesanías

Ignacio Cumplido, notable personaje del México decimonónico

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Don Ignacio Cumplido nació en 1811 en la ciudad de Guadalajara, cuando aún existía el reino de la Nueva Galicia, y México se encontraba en los finales de la época virreinal; apenas un año antes, don Miguel Hidalgo y Costilla había iniciado la revolución de independencia de México.

EL HOMBRE Y SU TIEMPO

Don Ignacio Cumplido nació en 1811 en la ciudad de Guadalajara, cuando aún existía el reino de la Nueva Galicia, y México se encontraba en los finales de la época virreinal; apenas un año antes, don Miguel Hidalgo y Costilla había iniciado la revolución de independencia de México.

Desde edad temprana don Ignacio Cumplido se trasladó a la Ciudad de México donde se interesó por las artes tipográficas, siendo ésta actividad la que le distinguiría durante el resto de su vida.

Uno de sus primeros empleos lo desempeñó en el viejo Museo Nacional, dirigido entonces por don Isidro Icaza, dedicándose al cuidado de la compilación de Historia Natural, compuesta principalmente por colecciones de rocas y minerales, fetos y animales disecados, etc. Pero, indudablemente, el trabajo de impresor ejercía en él un embrujo imposible de olvidar, y por ello dejó la vetusta institución académica, y en 1829 se convirtió en el flamante director de la imprenta que editaba El Correo de la Federación, vocero principal de uno de los grupos liberales de gran actividad en aquella época.

Posteriormente, tuvo a su cargo la impresión de otro periódico, El Fénix de la Libertad, donde escribieron los más notables personajes que postulaban ideas democráticas. y fue en esta publicación donde nuestro impresor tapatío se distinguió por su entrega al trabajo, característica que le distinguiría a lo largo de toda su trayectoria.

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Las primeras décadas del México independiente se identificaron por la feroz lucha que establecieron los liberales y los conservadores, grupos políticos que habían nacido bajo la égida de las logias masónicas. Los primeros buscaban esencialmente la República Federal y sus contrarios, el centralismo y la continuidad de los privilegios de los antiguos grupos de poder del mundo colonial. Estos últimos eran la Iglesia Católica, los terratenientes y los dueños de minas. Fue en ese mundo de guerras fratricidas, de venganzas políticas y de locuaces dictadores, donde Ignacio Cumplido vivió y desarrolló con gran habilidad su arte tipográfico, y al ser él un individuo de ideas liberales sirvió a su causa, obviamente, en el campo editorial.

En 1840, el señor Cumplido se integró a la administración pública, siendo entonces nombrado Superintendente de las cárceles. Este cargo fue en aquel momento como una paradoja pues hacía poco que él había sufrido prisión, de manera injusta, en la célebre cárcel de la ex Acordada. La razón de su encarcelamiento fue el haberse encargado de la publicación de la carta que escribió Gutiérrez Estrada sobre el tema de la monarquía.

En 1842, Cumplido fue electo Diputado en el Congreso y, posteriormente, obtuvo el cargo de Senador. Siempre se distinguió por su postura liberal y por ser defensor de las causas de los humildes y de los desvalidos. Todos sus biógrafos destacan su generosa actitud al ceder sus dietas económicas como Diputado y como Senador a favor de los establecimientos de beneficencia.

Fue tal su sentido filantrópico, que de su peculio fundó en su propia casa un colegio de impresores para jóvenes huérfanos, carentes de fortuna, y se dice, en ese hogar él los trataba como si fueran miembros de su familia. Ahí, bajo su dirección, aprendían el antiguo arte de la publicación y la tipografía.

Otra de las facetas notables del señor Cumplido, fue su patriótica participación en la defensa de nuestra ciudad durante la infausta guerra que en 1847 desató los Estados Unidos contra México. Nuestro personaje se ofreció voluntariamente al jefe del batallón de la Guardia Nacional, siéndole otorgado el grado de capitán. En este cargo se desempeñó con la puntualidad y eficacia que le distinguieron en todas sus labores.

IGNACIO CUMPLIDO, EDITOR DE EL SIGLO XIX

Uno de los periódico más longevos que ha tenido México, fue sin duda El Siglo XIX, pues tuvo éste un duración de 56 años. Fundado por Ignacio Cumplido el 7 de octubre de 1841, en él colaboraron los intelectuales y pensadores más notables de aquella época; sus temas comprendieron tanto la política como la literatura y la ciencia. En sus páginas se escribió la historia de ese periodo. Su último número esta fechado el 15 de octubre de 1896.

Este periódico, en un principio sólo tenía en la primera plana su título con un diseño de gran sobriedad poco más tarde, el arte de Cumplido afloró en la publicación, y fue entonces cuando utilizó un grabado donde se aprecian nuestros volcanes, detrás de los cuales nace el sol con radiantes rayos y una cartelera donde podemos leer Bellas Artes, Progreso, Unión, Comercio, Industria.

El Siglo XIX, con posterioridad, tuvo varios directores renombrados como José Ma. Vigil, notable historiador y bibliógrafo que fue también en su tiempo Director de la Biblioteca Nacional; Francisco Zarco, gran literato, siendo el último el licenciado Luis Pamba. En las páginas de este periódico destacan los nombres de Luis de la Rosa, Guillermo Prieto, Manuel Payno, Ignacio Ramírez, José T. Cuéllar y muchos otros miembros destacados del partido liberal.

IGNACIO CUMPLIDO, ARTISTA TIPOGRÁFICO

Desde sus primeros acercamientos al arte de la tipografía, introducida en México al tiempo de su independencia, nuestro personaje se interesó por elevar la calidad de la obra que salía de las prensas. Tal fue su empeño que con algunos ahorros reunidos con gran esfuerzo, viajó a los Estados Unidos con el propósito de adquirir la más moderna maquinaria. Pero ocurrió que Veracruz, el único puerto de entrada a los buques comerciales, en aquel entonces se encontraba bloqueado por la armada francesa que reclamaba absurdas deudas a nuestro país; por ello, el cargamento donde venía la maquinaria de Cumplido, fue desembarcado en Nueva Orleans, perdiéndose ahí para siempre.

Venciendo este y otros obstáculos, Ignacio Cumplido, reunió nuevamente los recursos que le permitieron sacar a la luz, -con una alta calidad artística, publicaciones tan afamadas como: El Mosaico Mexicano, colección que comprendió de 1836 a 1842; El Museo Mexicano; la Miscelánea Pintoresca de Amenidades Curiosas e Instructivas que se publicó de 1843 a 1845; La Ilustración Mexicana, el Álbum Mexicano, etc. Destaca particularmente El Presente Amistoso para las Señoritas Mexicanas, editado por primera vez en 1847; este hermoso libro tiene orladas las páginas y, se enriqueció con seis láminas grabadas en acero con encantadoras imágenes femeninas. En 1850 publicó una nueva versión de El Presente Amistoso con nuevos grabados, cuyas placas originales fueron importadas de Europa y en 1851, realizó la tercera y última versión de tan singular publicación. Especialmente en estas obras, apreciamos el delicado arte de integrar elegantes portadas, en donde la gama de colores, incluye los dorados. Centenares de publicaciones salieron de las prensas de Cumplido, de las cuales Ramiro Villaseñor y Villaseñor ha hecho una puntual enumeración. Es así como por su genial obra se enaltece la figura de este impresor tapatío; en su amplia bibliografía apreciamos su labor de difusión en torno a obra de los principales liberales, ya que se encargó de sacar a la luz los trabajos fundamentales de Carlos María de Bustamante, de José Ma. Iglesias, de Luis de la Rosa, así como dictámenes, ordenanzas y numerosos documentos de carácter político y económico que emitían los gobiernos de los estados y las Cámaras de Diputados y Senadores.

De manera curiosa y por demás lamentable, este hombre genial y gran mexicano de ideas y corazón, cuyo deceso ocurrió en la Ciudad de México el 30 de noviembre de 1887, apenas y ha merecido el reconocimiento de los estudiosos del periodismo, del arte tipográfico y del diseño editorial.

Como bien se ha dicho, ni en México ni en Guadalajara se ha dedicado una calle para recordar el nombre y la obra de este notable impresor decimonónico.

Fuente: México en el Tiempo No. 29 marzo-abril 1999

autor Conoce México, sus tradiciones y costumbres, pueblos mágicos, zonas arqueológicas, playas y hasta la comida mexicana.
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