El multiverso de Chava Flores; un recuento de los personajes de sus canciones
Durante cuatro décadas, Chava Flores describió lo trágico y cómico de los mexicanos a través de una serie de personajes ficticios que se parecen muchísimo a la realidad
La guapa a la que le va como en feria con los hombres, el gandul que vive de las ganancias de una sirvienta y el albañil embelesado con la trucada belleza del retrato de una joven, son parte de un sin fin de personajes que el cronista y músico Chava Flores usó para retratar a la sociedad mexicana de 1960 a 1990.
Todos estos personajes de Chava Flores forman parte de lo que hoy llamaríamos “el multiverso de Chava Flores”. Nombramos algunos de ellos a continuación:
Chava Flores y sus personajes femeninos
Céfira
Cada vez menos, pero todavía en pocos pueblos de México, solteros y solteras dan vueltas por el kiosco para echarse miradas, coquetearse y volverse novios. A Cefira, una muchacha de un pueblo, la llevan sus padres al parque para que por fin consiga marido y deje de ser carga para los padres. La canción que describe esto se llama Vamonos al parque Céfira.
Espergencia
Ella no tuvo fiesta de 15 años, por lo que, para cumplirle el sueño, se lo festejaron hasta que cumplió los 30. Pero el retraso de 15 años en el festejo no evitó que tuviera chambelanes y damas de honor. La jocosa melodía se llama Los quince años de Espergencia.
Chava Flores y sus hombres del pueblo
Fidel el albañil
Dentro de la canción titulada El retrato de Manuela, Chava Flores describe cómo un joven dedicado a la construcción, queda todavía más enamorado de Manuela, una sirvienta, cuando ésta le regala un retrato, seguramente en blanco y negro, en donde ella se ve divina gracias a los ángulos y retoques que aplicó el retratista. Gracias a la foto ambos se casaron, “el retrato es pa’ tus ojos y el original pa’ ti”, dice la melodía.
Cleto, el fufuy
Un día a Cleto le movieron el andamio cayendo sin remedio al suelo; el accidente lo terminó matando. Pero para ser honestos ni su viuda, de nombre Luchita, lamentó el fallecimiento de su marido, pero eso sí, le echó muchas ganas a la lloradera a la hora del velorio, el cual se convirtió en un festejo lleno de café con piquete, juegos de azar y albures. La canción donde todo esto se describe lleva por título Cerró sus ojitos Cleto.
Chava Flores y sus personajes con precaria economía
La Bartola
Todavía algunas familias usan la expresión “a esa le hacen como a la Bartola” cuando se refieren a una ama de casa a la cual el marido le da muy pocos pesos para el gasto diario. La Bartola aparece en la canción Peso sobre peso, en donde la desdichada mujer, con solo dos pesos, tiene que pagar renta, luz, teléfono, alimentos y el alipús (alcohol) del marido, una tragedia que Chava Flores denuncia con mucha gracia.
Tacho, el novio
La canción de Chava Flores en la que este personaje sale lleva por nombre La boda de la vecindad. Narra la historia de una pareja que está a punto de casarse; Tacho, el novio, hace corajes porque el traje le quedó chico, pero no hubo de otra más que vestirse con él para su boda, la cual se realizó en una vecindad, misma que engalanaron quitando tendederos y ropa de asolear. Hubo mole y pulque en el banquete.
Personajes por demás jocosos en la música de Chava Flores
Herculano
La canción trata sobre un hombre al que le avergüenza su nombre y por tal motivo va con el juez para que se lo quite. Todo resulta en una historia muy graciosa llena de humillación y albures, todo para que al final Herculano termine por cambiarse el nombre a Profundo, tristemente el burlón del juez desde el primer momento comienza a llamarlo “Profundillo”. Herculano se llama esta pieza.
Cheto
Se trata de un infante que nació feo como pocos, por lo que de inmediato llamó la atención de la prensa, quienes tomaron muchas fotos del papá y de la mamá. El niño “cara de chinche” nació el mero día del terremoto de 1957. La canción en la que aparecer sale este infortunado bebé es El bautizo de Cheto.
Los interesados de Chava Flores
El Gato Viudo
Pues no propiamente la canción habla de un gato, sino de un hombre quien alguna vez gozó las mieles de tener una novia sirvienta quien le daba dinero y cosas del mandado para que pudiera vivir y pasarla bien. Pero una vez que la mujer murió, se quedó solo y llorando por las noches. La canción se llama así: El Gato Viudo. Y es que vulgarmente a las mujeres dedicadas a la limpieza en México se les dice “gatas”. Lo demás se puede deducir.
La Interesada
Ella es una mujer de la cual no se sabe si en verdad es interesada o realmente es su novio el que no quiere hacer el más mínimo esfuerzo de darle algo para no correr el riesgo de que se fuera, no se deslumbrara, no se ahogara o no se le fuera con otro. Se llama La Interesada y escucharla son risas garantizadas.