Justo Sierra, biografía del fundador de la Universidad Nacional de México
Justo Sierra fue una de las figuras más completas del México moderno: escritor, periodista, político y fundador de la Universidad Nacional de México en 1910
Justo Sierra fue un destacado académico, abogado, historiador y novelista yucateco que destacó por sus aportaciones a la educación de México. Conoce su historia y el legado que dejo en el país, a continuación.
Justo Sierra, biografía
Justo Sierra Méndez nace en 1848 en Campeche, hijo de Justo Sierra O’Reilly, abogado, novelista e historiador; y de Concepción Méndez Echazarreta, hija de un destacado político yucateco.
Luego de la muerte de su padre en 1861, se traslada a la Ciudad de México donde estudia en el Colegio de San Ildefonso y se recibe de abogado en 1871. A la par del estudio de las leyes, desarrolla su vocación literaria, publicando ensayos, obras de teatro, novelas y poesía.
Naturalmente, Justo Sierra se incorpora a los círculos literarios de la época y participa en las tertulias -muy en boga- con personajes de la vida cultural del país como Ignacio Manuel Altamirano y Guillermo Prieto. También publica en revistas y periódicos, lo que le brinda gran prestigio.
La carrera política de Justo Sierra
- Fundador y director del periódico La Libertad de 1878 a 1880.
- Diputado del Congreso de la Unión en dos ocasiones, de 1881 a 1884; y de 1884 a 1894.
- Miembro de la Academia Mexicana de la Lengua en 1887. Posteriormente funge como presidente de esta.
- Ministro y Presidente de la Suprema Corte de Justicia de 1894 a 1900.
- Secretario de Instrucción Pública y Bellas Artes de México, de 1905 a 1911, en el Porfiriato.
- Ministro de México en España por el gobierno de Francisco I. Madero, en 1912.
Justo Sierra, Maestro de América
Considerado un libre pensador, desde la enseñanza y desde el servicio público concibe un proyecto educativo nacional y busca formas de difundir la cultura y la ciencia en México, pues cree que solo así es posible formar el alma nacional. Por esta labor es conocido como Maestro de América.
Su visión se inspira en las ideas del positivismo, que se opone a aquellas interpretaciones religiosas del mundo, sin sustento en datos o constataciones empíricas; y aboga por el bien colectivo sobre el interés individual, siempre desde una perspectiva científica, basada en fundamentos técnicos.
Por muchos años es maestro de la Escuela Nacional Preparatoria, donde imparte la cátedra de Historia y publica la que es considerada su obra fundamental: Evolución política del pueblo mexicano (1900-1902); un libro de texto que contribuye a la formación política de varias generaciones.
Legado de Justo Sierra en la educación pública de México
Como Secretario de Instrucción Pública y Bellas Artes durante la presidencia de Porfirio Díaz, Justo Sierra refunda la Universidad Nacional de México, que después se transformaría en la Universidad Nacional Autónoma de México, el 22 de septiembre de 1910, dentro del marco de los festejos del centenario de la Independencia de México.
Además:
- Establece el primer Sistema laico de Instrucción Pública en México.
- Promueve la unificación lingüística del país.
- Brinda de autonomía a los jardines de niños.
- Impulsa el reconocimiento del magisterio en el nivel superior.
- Establece un sistema de becas para los alumnos más aventajados.
- Difunde las bellas artes y la ciencia.
Justo Sierra muere en España el 13 de septiembre de 1912 a los 64 años, de un aneurisma y su cadáver es repatriado a México. De sus funerales, el periódico El País publica que:
No se guarda memoria en Méjico de funerales más suntuosos, más solemnes, más sentidos que los funerales del maestro Justo Sierra…”.