Por las lagunas de Nayarit

Nayarit cuenta con tres lagunas de gran interés y dignas de visitarse: Santa María del Oro, San Pedro Lagunillas y Tepetiltic. La de Santa María del Oro es las más frecuentada por nayaritas y jaliscienses, debido a que sus tranquilas aguas permiten la natación y la práctica de deportes acuáticos y en verano recibe las corrientes de los cerros que la rodean y de un sinnúmero de arroyuelos en temporada de lluvias. Tiene una forma semicircular con dimensiones de 1.8 km de longitud y 1.3 km de ancho, con un perímetro de 2550 km, sus aguas son azules, con pendiente inclinada y profundidad variada.

Alrededor se ubican numerosos restaurantes que sirven el exquisito pescado blanco, así como lugares para acampar y hasta algunas cabañas con una magnífica vista de la laguna.

A seis kilómetros está el pueblo de Santa María del Oro, que durante la Colonia se incluía en la alcaldía mayor de las minas de Chamaltitlán, región que contaba en el siglo XVIII con tres pequeñas minas de oro y de donde en la actualidad se extraen todavía pequeñas cantidades de minerales no ferrosos.

El templo principal del poblado está dedicado al Señor de la Ascensión, es del siglo XVII, de estilo barroco y portada de tipo arabesco, aunque ésta ha sufrido modificaciones en el transcurso del tiempo.

Ya en la época independiente aparecieron haciendas fundadas por familias españolas; algunas como la Cofradía de Acuitapilco y San Leonel prácticamente han desaparecido; sin embargo, la hacienda de Mojarras sigue en pie y es un ejemplo de las de ese tiempo. Por cierto, cerca de ella se encuentra una espectacular cascada, el Jihuite, de tres crestas, una altura aproximada de 40 m y cuyo vaso receptor tiene un diámetro de 30 m; la vegetación característica es de selva subcaducifolia.

El municipio de Santa María del Oro, de clima húmedo caliente con lluvias en verano y atravesado por los ríos Grande Santiago, Zapotanito y Acuitapilco, cuenta con ricas tierras productoras de tabaco, cacahuate, café, caña, mango y aguacate, por sólo mencionar algunos cultivos. A 11 km está la laguna de Tepeltitic, a la cual se llega por una carretera de terracería en buenas condiciones rodeada de exuberante vegetación, sobre todo robles y encinos; la fauna se compone de zorrillos, mapaches, coyotes, patos barcinos y víboras de cascabel. Los lugareños se dedican a la pesca y la crianza de ganado.

La majestuosa belleza de la laguna y los verdes valles se puede apreciar durante todo el ascenso a la montaña; algunos visitantes hacen el recorrido a caballo por senderos estrechos que bajan hasta la laguna.

El pueblo de Tepeltitic tiene un pequeño y pintoresco malecón al borde de la laguna desde el que los lugareños contemplan los atardeceres entre los majestuosos cerros que a lo lejos delimitan con ella sus aguas muestran diferentes tonos de verde, y aunque no es muy profunda sí es ideal para practicar la natación; otros visitantes prefieren dedicarse a la pesca, la equitación y el campismo, entre otros. A la orilla de lalaguna hay un espacio de usos múltiples donde los lugareños practican sus deportes favoritos en un espléndido ambiente campirano. Tepetiltic cuenta con los servicios necesarios para recibir visitantes todos los días del año.

Se encuentra San Pedro lagunillas a 53 km de la ciudad de Tepic, comunicada por la carretera de cuota Chapalilla-Compostela. Se le ubica dentro de la provincia del Eje neovolcánico, caracterizada por una enorme masa de rocas volcánicas de varios tipos.

San Pedro lagunillas es una amplia cuenca cerrada, ocupada por el lago que se formó cuando la lava y otros materiales bloquearon el drenaje original. la laguna se localiza a un kilómetro de distancia de la población, conocida también con el mismo nombre, y tiene una longitudaproximada de tres km, 1.75 km de anchura y una profundidad promedio de 15 metros.

El arroyo de San Pedro Lagunillas contiene aguas permanentes que vierte a la laguna. Cerca de Ia comunidad hay además tres ojos de agua: El Artista y Presa Vieja, al norte del poblado y los cuales abastecen de agua al pueblo; el tercero es El Corral de Piedras, al oeste.

La orografía del lugar es muy accidentada. En la parte norte el terreno resulta montañoso, compuesto por sierras abruptas; en tanto al centro y al sur encontramos lomeríos suaves, mesetas, valles y llanos. En la zona montañosa la vegetación es predominantemente de roble, pino y encino, mientras en los alrededores existen cultivos, pastizales y matorrales. La fauna característica la constituyen venados, guajolotes, pumas, tigrillos, conejos, palomas y tejones.

El pueblo existe desde la época prehispánica y perteneció al antiguo Señorío de Xalisco. Fue nombrado Ximochoque, que en lengua náhuatl significa lugar de bules amargos. El gran Señorío de Xalisco tenía límites al norte con el río Santiago; al sur, mucho más allá de los límites actuales del estado; al oeste el Océano Pacífico, y al este, hasta lo que hoy es Santa María del Oro.

A su paso por Nayarit, algunas familias aztecas se quedaron y se establecieron en Tepetiltic, pero al escasear el alimento decidieron irse y formaron tres grupos, de los cuales uno se estableció en lo que hoy es San Pedro Lagunillas. Actualmente, la comunidad vive de la agricultura y la pesca; los pescadores salen temprano en las mañanas con canoas o pangas impulsadas por remos, con redes, chinchorros y anzuelos. Los hombres pescan charal, bagre, pez blanco, lobina negra y tilapia, entre otros peces.

Además de su hermosa laguna, San Pedro muestra otros interesantes atractivos como los árboles tiberintos únicos en América, así como tumbas de tiro, donde se han encontrado piezas arqueológicas que pasaron al Museo Regional de Tepic –templo colonial construido en el siglo XVII donde se venera al santo patrono del lugar, San Pedro Apóstol-, el cual cuenta con tres naves y lo sostienen diez columnas salomónicas muy elevadas en las que se reparten los arcos, y la Plaza de los Mártires frente al atrio del templo.

Aunque la localidad no cuenta con infraestructura hotelera. Algunas familias rentan cuartos sencillos y limpios a muy bajo precio. Si usted es de los que gustan de la naturaleza y los largos paseos campiranos, San Pedro Lagunillas es el lugar ideal.

Para degustar de la gastronomía local, a base, por supuesto, de pescado, existen algunos restaurantes típicos al pie de la laguna, muy concurridos los fines de semana sobre todo por la gente de Tepic.

A una veintena de kilómetros se levanta la ex hacienda Miravalle, fundada en la primera mitad del siglo XVI y que perteneciera a la encomienda de don Pedro Ruiz de Haro, en la que había varias minas de gran riqueza, la más importante de ellas la del Espíritu Santo, cuya mejor época transcurrió entre 1548 y 1562. Después de que Miravalle se estableciera como condado en 1640, don Alvarado Dávalos Bracamonte mandó reconstruir la hacienda, que de hecho resultó la más importante de la región entre los siglos XVI y finales del XVIII; de arquitectura sobria, con finos detalles ornamentales como los corredores con pilares de capitel dórico y las ventanas de finos trabajos de hierro forjado. Aún es posible distinguir las diferentes áreas de la hacienda: la cocina, bodegas, habitaciones, caballerizas, además de la bella capilla, cuya portada barroca data de finales del siglo XVII y principios del XVIII. En su próxima visita a Nayarit, no dude en hacer este atractivo circuito de lagunas de Nayarit, que puede –si lo desea- realizar en un solo día por la proximidad de las mismas a extraordinarios parajes naturales, buena comida, deportes acuáticos, natación, pesca, así como importantes vestigios coloniales.

SI USTED VA…

Desde Tepic tome la carretera 15 en dirección a Guadalajara y a sólo 40 km está la desviación hacia Santa María del Oro, La laguna se encuentra a menos de 10 kilómetros del cruce. Para ir a Tepeltitic se regresa por la carretera 15 y un par de km después está la desviación a la laguna. Por último, retomando la misma carretera a menos de 20 km se halla el desvío hacia Compostela y a 13 km se encuentra la laguna de San Pedro.

Fuente: México desconocido No. 322 / diciembre 2003

Nicolás Triedo