Así es el árbol de jícara, ideal para tomar mezcal o bañarte
¿Te vas a bañar a jicarazos? Te contamos sobre el árbol de jícara, así como de sus propiedades medicinales y gastronómicas.
¿Conoces la jícara? Un pequeño tazón hecho con un fruto que ha servido durante generaciones como plato, vaso para brindar o simplemente como un balde de agua. Su origen está en el árbol Crescentia cujete, el cual crece en gran parte del continente americano.
Este árbol, que en en su face madura puede llegar a medir hasta 5 metros de alto, está formado por ramas y tronco escaso que abren en un una copa abundante. Su tronco es color gris y es ligeramente escamoso, mientras que sus flores son ligeramente verdes y blancas.
Desde la época precolombina, los frutos de este árbol han servido para hacer artesanías y recipientes, ya que el fruto esférico posee una cáscara leñosa que permite que al ser cortado en dos, se formen tazones.
La jícara, un recipiente natural con propiedades medicinales
Gracias a su abundante follaje, el árbol de jícara también es utilizado con fines ornamentales. Sin embargo, su principal uso está en sus frutos y semillas, los cuales también han servido para hacer instrumentos musicales como el güiro. Además, estos elementos también sirven para producir aceite y azúcar. En el país de El Salvador, cierta variante también se utiliza para hacer horchata. Sin embargo, en México, el fruto es principalmente utilizado como jícara. En estos tazones se sirve el tradicional pozol y el chocolate. Las versiones más pequeñas sirven como un vasos para beber mezcal o aguardiente. Sin embargo, su uso no se limita, también ha funcionado como bandeja para bañarse a “jicarazos” o como plato para servir pozole u otros platillos típicos.
El árbol de jícara es muy generoso, pues también posee propiedades medicinales. Si se toma como té ayuda a tratar diarrea, resfriados, asma, gripa y enfermedades de la uretra.
