Centro SCOP, un edificio con murales impresionantes en riesgo de colapsar

A inicios de la década de 1960, el arquitecto Carlos Lazo comenzó a proyectar la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP) del Gobierno Federal. Cuando se dirigió a los artistas que plasmarían los murales de la parte exterior, les pidió que lo hicieran pensando en “una obra que perdure”.

“Evitemos lo temporal y lo anecdótico”, añadió. “Busquen símbolos que sean positivos y eternos”. Todo ello fue tomado en cuenta por Juan O’Gorman, José Chávez Morado, Francisco Zúñiga y Rodrigo Arenas Betancourt, quienes estaban entre los artistas que inmortalizarían su obra en el SCOP, hoy Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

La técnica utilizada por los muralistas para dar vida a los murales fue el mosaico; mientras que la temática se centró en los medios de transporte desde la época prehispánica, hasta el siglo XX.

Los murales de la SCOP son los siguientes:

Juan O’Gorman:

• Canto a la Patria
• Independencia y Progreso
• Los Libertadores

José Chávez Morado:

• Los Mayas
• Conquista y Libertad
• Los Aztecas

Por mandato del presidente Adolfo Ruíz Cortines, la sede comenzó a construirse en 1953 en el cruce de Xola y el Eje Central Lázaro Cárdenas. Con ello, la Secretaría de comunicaciones y Obras Públicas fue la primera en dejar los edificios del Centro Histórico.

Lamentablemente, esta joya arquitectónica modernista ha sido devastado por dos sismos de gran magnitud, así como por las calamidades de la burocracia mexicana. La primera catástrofe que dañó al SCOP fue el terremoto de 1985, cuya magnitud de 8 grados destruyó tres de los pisos superiores del edificio, mismos que nunca se reconstruyeron.

El segundo golpe de muerte al SCOP vino en 2017, cuando un segundo terremoto dañó aún más las estructuras y dejó inclinado una de las torres. Debido a ello, la ahora Secretaría de Comunicaciones y Transportes desalojo el edificio para garantizar la seguridad de sus 2,500 empleados.

¿Patrimonio artístico por desaparecer?

Desde 2017 los edificios de la SCOP han permanecido vacíos. Los rumores sobre su demolición han suscitado diversas opiniones, principalmente los que demandan que se conserve el patrimonio artístico. De acuerdo con algunos especialistas, una de las ventajas de los murales es que están incrustados en paneles, mismos que se pueden desmontar.

Durante el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto, la idea de trasladar los murales al Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México fue tomada en serio. Pocos meses después del catastrófico sismo de 2017, algunos de los murales fueron retirados. El Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que se enfoca en temas de preservación, publicó una carta abierta criticando la decisión. Extraer los murales del lugar “alteraría el complejo de manera negativa”, decía la carta. “Todos los documentos regulatorios y éticos que gobiernan el patrimonio lo desaconsejan expresamente”.

Sin embargo, con el inicio de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador y la cancelación del Nuevo Aeropuerto, la decisión dio un giro.

“El Centro SCOP ha sido un icono de la ciudad”, dijo Jiménez Espriú, actual secretario de Comunicaciones y transportes. “Es un monumento, no sólo un edificio”, añadió. Asimismo, explicó que el SCOP será recuperado para ser un Centro Cultural, lo cual por supuesto, implica una difícil tarea.

 “Lo primero que tenemos que hacer es retirar los murales, quién sabe cuánto durará o costará eso, luego conservarlos y almacenarlos, para después pasar a examinar los edificios. Probablemente tendríamos que demoler parte de ellos y reestructurar otras partes, luego tendríamos que rehacer los cimientos… No puedo decir cuánto tiempo llevaría ni cuánto costaría”.

Agregó el titular de la Secretaría de comunicaciones y transportes en 2019.

Fuente: Carolina A. Mirada, “Los Angeles Times”.

Rodrigo Osegueda Filósofo por formación. Contempla el alma e imaginación de México.