Hallazgos arqueológicos en el 2020
Te compartimos un listado con los hallazgos arqueológicos más impactantes de este 2020.
Sin duda, este 2020 ha sido un año especial y difícil. Muchas de las actividades que todos disfrutamos se vieron afectadas por la pandemia. A pesar de todo esto, el 2020 a sido un año bastante activo para la arqueología mexicana. Muchos hallazgos nos impresionaron y cambiaron por completo la forma en la que entendíamos la historia.
Temazcal prehispánico en la Merced
El 21 de enero nos sorprendió con un maravilloso descubrimiento en el barrio de La Merced. La calle de Talavera fue testigo del hallazgo de los restos de un temazcal prehispánico.
También se encontraron estructuras arquitectónicas de una curtiduría, la cual funcionó en el último siglo novohispano. Así como los vestigios de una vivienda perteneciente a la nobleza indígena. Este descubrimiento arqueológico permitió ubicar con precisión el lugar en donde estuvo el barrio de Temazcaltitlan. Según el Mapa de Sigüenza, la Crónica Mexicáyotl y el Códice Aubin, este barrio es uno de los más antiguos de Tenochtitlan.
Hallazgo de 119 cráneos en el Centro Histórico
Otro de los descubrimientos más sorprendentes del año se volvió a vivir en el Centro Histórico de la Ciudad de México el 11 de diciembre. Esta vez la calle República de Guatemala fue el punto en donde se localizaron 119 cráneos humanos. Estos formaban parte del Huei Tzompantli de Tenochtitlan dedicado a Huitzilopochtli.
Más de 200 mamuts en la Base Aérea de Santa Lucía
El 21 de mayo fueron descubiertos los restos de al menos 60 mamuts. El trabajo arqueológico en la zona de la base aérea de Santa Lucía, en el Estado de México, comenzó desde abril del 2019. A lo largo del proyecto, se han hallado los restos de más de 200 mamuts.
Los esqueletos fueron encontrados en zonas donde estará la futura Torre de Control del Aeropuerto y en lo que serán las pistas. Este descubrimiento es sin duda el mayor yacimiento de mamuts encontrado en la historia de la arqueología en México.
Naufragio de nave inglesa en Banco Chinchorro
La arqueología subacuática dio mucho de que hablar este año. El 2 de junio se conoció la noticia de que arqueólogos subacuáticos localizaron los vestigios de un naufragio. Hace más de 200 años una nave inglesa naufragó en aguas de Quintana Roo, específicamente en el área natural protegida Banco Chinchorro.
Los arqueólogos subacuáticos han lanzado múltiples hipótesis sobre lo ocurrido con la nave inglesa. Se cree que los tripulantes de aquella embarcación hicieron un último esfuerzo para evitar la catástrofe. Esto se infiere debido a que se encontró un ancla integrada al sistema coralino.
Descubrimiento de la Aguada Fénix
El 3 de junio se dio a conocer la noticia del hallazgo de la “Aguada Fénix”. Se trata de una construcción monumental hallada en Tabasco. Este descubrimiento se convirtió en la clave para explicar la caída de los olmecas y su relación con los mayas. La construcción data de unos 3.000 años de antigüedad. Convirtiéndose así en la más antigua y más grande de la que se tenga registro en la civilización maya.
Evidencia humana de 30,000 años de antigüedad en la Cueva del Chiquihuite
El 22 de julio se dio a conocer un impresionante hallazgo en la revista científica Nature. La investigación fue encabezada por la Universidad Autónoma de Zacatecas.
La cueva en donde se realizaron las investigaciones es conocida como Cueva del Chiquihuite. En ella se hallaron herramientas de lítica, huesos animales, restos de plantas y ADN ambiental. Los resultados de los análisis de laboratorio sugieren que la cueva fue ocupada por personas hace aproximadamente entre 30,000 y 13,000 años. Este hallazgo señala que el poblamiento de América del Norte fue más antiguo de lo que se suponía.
“La Unión” el barco que transportó esclavos mayas
A 1.6 siglos de su hundimiento, el 15 de septiembre, especialistas mexicanos identificaron al barco de vapor “La Unión”. Se trata del primer barco usado para el tráfico de esclavos mayas. Los restos de la nave fueron hallados a 3.7 kilómetros de Sisal.
Después de tres años de investigación, los especialistas determinaron que entre 1855 y 1861, la nave llevó a Cuba un promedio mensual de 25 y 30 esclavos mayas.
