Juguetes mexicanos de madera, un clásico que no se olvida
Los juguetes mexicanos de madera no son sólo bellas decoraciones, sino también una gran ayuda para desarrollar la creatividad y otras habilidades.
En un mundo en el que los videojuegos han suplido la interacción entre niños, los juguetes mexicanos de madera representan una oportunidad para incentivar la creatividad y la convivencia.
Y es que, además de ser coloridos y hechos por manos mexicanas, permiten que la imaginación vuele.
Por ello, aquí te presentamos algunas de las opciones más representativas para que regales juguetes mexicanos durante el próximo Día de Reyes.
7 juguetes mexicanos artesanales de madera
1.Balero
Según se cuenta, el origen de este juguete nos remonta a los mayas, pues ellos tenían un juguete parecido. El juego también consistía en embonar las dos piezas: el barril y el palo. Sin embargo, los mayas utilizaban un cráneo humano en lugar de un barril.
Otra versión señala que en realidad su origen es francés y que surgió a finales del siglo XVI.
Sin importar su origen, eel balero llegó a ser uno de los juguetes mexicanos más odiados y al mismo tiempo uno de los más queridos. La razón se debe a que si no le atinabas, el barril te caía sobre la mano. Al ser de madera, ya te imaginarás que el dolor no era minúsculo.
Asimismo, el balero es un juguete de prueba y error, por lo que si algo se necesita y se desarrolla durante su ejecución es la paciencia.
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2. Trenecitos y camiones
Además de ser visualmente muy bonitos –por lo que son perfectos para decorar–, los camioncitos y trenecitos permiten que vuele la imaginación de los niños. Ya sea porque juegan a las carreritas con sus compañeros de juego o porque es fácil imaginar un sin fin de historias con ellos.
Otra ventaja de estos juguetes es que son fáciles de llevar. Además, su precio no es muy elevado y tiene un valor simbólico por estar hecho por nuestros artesanos.
3. Títeres
Si la posibilidad de crear historias con los camiones de madera es grande, la posibilidad de hacerlo con títeres es aún mayor. Por ello, este es quizá el juguete mexicano que más incentiva la creatividad en chicos y grandes.
Con ellos se pueden montar obras de teatro caseras o simplemente dejar que la imaginación fluya e inventar historias sin que se tengan que presentar a ningún público.
Los títeres tradicionales son los que llevan ajuares mexicanos, aunque también los hay de personajes televisivos importantes, de películas, series, entre muchos más.
4. Matraca
Aunque ahora su uso es más común en eventos deportivos y fiestas, las matracas todavía son consideradas como un juguete mexicano bastante tradicional. Sin embargo, en realidad son un tipo de instrumento musical.
Éste consiste en un cuerpo o tablero de madera que posee martilletes móviles, los cuales se encargan de golpear el cuerpo y producir el sonido. Cabe señalar que su nombre proviene del árabe hârraqa o hârraq.
Se cuenta que en un inicio era utilizado durante las ceremonias religiosas o incluso para silenciar a aquellas personas que se resistían a dejar de hablar.
5. Yo-yo
El yo-yo, yoyó o yoyo, es un juguete conformado por discos de madera con una ranura en el centro que permite que se enrolle un cordón. Aunque suena simple, hacerlo bien requiere de cierta destreza.
Una vez dominado el movimiento básico de desenrollar hacia abajo y enrollar hacia arriba, se puede comenzar a subir el nivel de dificultad del juego.
Dicha dificultad está determinada por los trucos conocidos como «suertes». Estos trucos tienen nombres bastante divertidos como el perrito, el dormilón o el columpio.
6. Trompo
Otro de los juguetes con los que seguramente nuestros padres y abuelos disfrutaron de horas de diversión fue con el trompo. Jugarlo requiere bastante destreza y también tolerancia a la frustración, pues como dicen «sólo la práctica hacía al maestro».
Y aunque también podemos encontrarlos de plásticos, los trompos de madera no pierden vigencia. Son visualmente muy atractivos y están tallados con mucho cuidado, por lo que su valor simbólico se incrementa.
La forma de jugar con el trompo es enrollar la cuerda a su alrededor y después lanzarlo hacia el suelo o en contra de otro trompo para hacerlo bailar. Aquel trompo que se mantenga más tiempo girando será el vencedor indiscutible.
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7. Pirinola
Aunque también suele estar hecha de plástico, la pirinola original es de madera. La forma de jugar con ella es entre varios participantes y ofreciendo algo. No tiene que ser dinero, pueden ser dulces u otros objetos.
El chiste es hacer girar la pirinola para que, dependiendo de la suerte que nos acompañe, perdamos o ganemos objetos de valor o simbólicos. Cada jugador se turnará para girar el cuerpo robusto de la pirinola y para aceptar su suerte.
