¿Sabías que en Coyoacán, Ciudad de México, existió una aldea teotihuacana?
Ubicada cerca de las avenidas Coyoacán y Universidad, esta aldea teotihuacana se asentó hace más de mil 700 años. Te contamos al respecto
Es difícil imaginar que en una alcaldía densamente poblada como Coyoacán, en la Ciudad de México, hayan sido encontrados los vestigios de una aldea teotihuacana. Y sin embargo, según el arqueólogo Alberto Mena Cruz, responsable de la excavación en la zona en 2018, así sucedió en 1977, cuando se preparaba el terreno donde sería construido el Centro Corporativo Bancomer.
La aldea teotihuacana como extensión de la gran ciudad
De acuerdo con los científicos, esta aldea fue una extensión de tipo habitacional de Teotihuacán, cuando esta ciudad se encontraba en su máximo apogeo, entre los años 250 y 650 de nuestra era; en las denominadas fases Tlamimilolpa y Xolalpan o periodo Clásico mesoamericano.
Recordemos que en su esplendor, Teotihuacán abarcó unos 22 kilómetros cuadrados de extensión, expandiéndose con mútiples centros provinciales, villas, recintos ceremoniales y aldeas; y una de éstas fue la ubicada en el pueblo de Xoco.
Como mencionamos anteriormente, en 1977 se llevó a cabo un salvamento arqueológico en la zona; desafortunadamente en ese año también fueron destruidos gran parte de los vestigios arqueológicos y sería hasta 2018 que arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) regresarían al espacio para retomar su estudio.
¿Qué se ha encontrado en el área?
En las diferentes fases de excavación se han hallado restos arquitectónicos de unidades habitacionales; también, círculos de piedra que tuvieron una función ritual o para contener el agua; diversos enseres cotidianos, desde cerámica hasta accesorios personales; y entre 30 y 60 entierros humanos.
Las inhumaciones en el área mostraron que los adultos fueron depositados envueltos en fardos y tenían entre 30 y 50 años al momento de morir. Igualmente se cree que contaban con ofrendas de acompañamiento formadas por cerámica y figurillas que fueron fragmentadas intencionalmente.
Por su parte, los niños fallecidos fueron dispuestos en posición fetal y no tenían ofrenda de ningún tipo. Las edades de los enterramientos corresponden a neonatos e infantes entre el primer año de vida y los siete años.
Asimismo, se sabe que la aldea fue teotihuacana porque la arquitectura de las viviendas es la misma de la gran ciudad de Teotihuacán con sus cantos rodados, recubrimiento de estuco y apisonado de tierra.
Finalmente, las labores arqueológicas en el predio de 45 mil m² ubicado en Universidad 1200 han requerido la remoción de grandes volúmenes de tierra donde también se ha encontrado evidencia de que tanto toltecas como aztecas habitaron el asentamiento posteriormente.
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