¡Asombrosa! Ya puedes visitar la Gran Ofrenda del Zócalo de la Ciudad de México
¡Visita la Gran Ofrenda del Zócalo inspirada en las culturas originarias! Conoce el calendario de actividades para este 1 y 2 de noviembre.
¡La Gran Ofrenda del Zócalo de la Ciudad de México ya está abierta al público! Se trata de un gran altar, cuyas primeras tres partes están inspiradas en representaciones y la cosmovisión de los pueblos originarios de México, según lo comunicado por la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México. En cuanto al cuarto cuadrante, se trata de sietes nichos dedicados a la conmemoración de los 500 años de la caída de México-Tenochnititlán y las interpretaciones de los señoríos de la antigua cuenca.
“Han venido artesanos de distintas zonas de la República: de Yucatán, de Chiapas, Oaxaca y Puebla, entre otras, que han llegado para representar sus ofrendas y en el caso de las de la Ciudad de México, las de los pueblos nahuatlacas, fueron hechas por la comunidad de PILARES (Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes) y de Faros (Fábricas de Artes y Oficios) de la capital, y rinden homenaje a nuestro pasado”, señaló Vannesa Bohórquez López, secretaria de Cultura de la Ciudad de México.
La Gran Ofrenda se erigió en coordinación de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y la Secretaría de Cultura capitalina, y está inspirada en los cuatro cuadrantes trazados por el Códice Mendoza. En total, la representación se compone de 27 ofrendas, cada una de ellas de entre 3.5 y 5 metros de diámetro y cruces diagonales de coloridos diseños fueron realizados por artistas de Huamantla.
Representaciones de los pueblos originarios en la Gran Ofrenda
La representación del códice que plasma la fundación de México-Tenochtitlan rinde homenaje a los señoríos: Matlatzincas, Tepaneca, Tlalhuicas, Malinalca, Acolhuas, Xochimilcas, Chalcas y Mexicas. Cada uno de los altares está compuesto por símbolos en papel picado y barro, y en cuyos nichos se colocaron murales de manta que resaltan los glifos y elementos característicos y endémicos de cada zona. También se colocaron elementos propios de dichas culturas originarias, como lo son caracoles, máscaras de barro, flores y estandartes.
Además de ofrendas inspiradas en las culturas originarias de la Ciudad de México, los visitantes también podrán observar obras de otros pueblos originarios del país, como lo son a ofrenda tradicional del estado de Morelos, un Calpulli Amalinalitzin del barrio se Caltongo, Xochimilco; un Altar de Muertos de Santiago de Anaya, pueblo otomí del Valle del Mezquital, Hidalgo; una Ofrenda de la región de La Montaña del estado de Guerrero y un Altar mazateco de San Pedro Ixcatlán, Oaxaca, entre otras.
Entre las actividades, el domingo 31 de octubre la gente pudo rendir homenaje a sus difuntos víctimas del COVID-19. Se trató de la proyección de fotografías en el prisma «Memoria Digital» que se colocó en la plancha del Zócalo. Fue una iniciativa que impulsaron la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y la Secretaría de Cultura capitalina.
Para el 1 y 2 de noviembre las actividades continúan en el Zócalo
El lunes 1 de noviembre, la Plaza de la Constitución será el escenario para la actuación de Jóvenes Orquestas, Ensamble de Cámara Quincunx, Cuarteto Dos Siglos, Los Originales, Los Molotes, Carmen Ruiz y María Reyna. Mientras que el martes 2 se presentarán Jorge Vadillo, Orquesta Juvenil de la Ciudad de México, Coro de la Ciudad de México, Son Rompe Pera, Jennifer Sierra y Coro Cuicacalli Comunitaria.
La diversión no termina ahí, ya que también se instaló “Ciudad Mictlán. Postales del Inframundo”, que consta de 16 estructuras que permiten a los visitantes tomarse fotos e interactuar con su rostro, una propuesta realizada por la Dirección de Desarrollo Cultural Comunitario, en conjunto con Innovación Cultural de la Secretaría de Cultura capitalina. La postales están compuestas por un sincretismo cultural entre las figuras del catrín y la catrina, y los cinco mensajeros del inframundo prehispánico que venían del Mictlán o Xilbabá y fungían como emisarios entre los regentes del submundo y los vivos. Las estructuras postales también interactúan con los nueve niveles del Mictlán o “Lugar de los muertos” para entender el recorrido por el cual el alma llegaba al descanso final.
