10 bebidas mexicanas exóticas que tienes que probar
Prueba estas 10 bebidas mexicanas que se caracterizan por lo exótico de sus nombres e ingredientes, sin duda, son opciones deliciosas.
Deleita tu paladar con estas 10 bebidas mexicanas. Todas son excelentes opciones para probar deliciosas combinaciones exóticas, pero, ¡cuidado! que el alcohol en algunas de ellas no se siente y podrías terminar envuelto en sus efectos embriagantes.
10 bebidas mexicanas exóticas
Lágrimas de la Virgen
Se trata de una bebida típica de Guanajuato que acostumbra a beberse durante el Viernes de Dolores. Las lágrimas de la Virgen están hechas a base de siete ingredientes -los cuales representan los siete dolores que padeció la Virgen. Entre ellos está el betabel cocido, azúcar, jugo de lima, lechuga, plátano, manzana y naranja en rebanadas. Te recomendamos probar esta deliciosa bebida bien fría para que puedas refrescarte.
Heriberta
Esta es una bebida tradicional de Zacatecas. Debe su nombre a un profesor de Química originario de dicho estado: Heriberto Campos. La gente cuenta que en la década de los 60, un grupo de alumnos estaba organizando una fiesta. Su presupuesto era limitado, por lo tanto, le pidieron ayuda al profesor Campos. Como respuesta, este creó una bebida alcohólica agridulce que te embriaga rápidamente.
A partir de entonces, ese brebaje fue conocido como “Heriberta”. Está hecho a base de alcohol de 96 grados -también se puede hacer con mezcal o tequila-. Este se mezcla junto con ácido cítrico, ácido tartárico, saborizante artificial y un ingrediente secreto conocido como “el espíritu de Heriberto Campos”.
Tuba
Este delicioso elixir de color rosado, no es originario de México. Fue traído desde Filipinas durante el siglo XVI. En dicho año tuvo lugar un intercambio comercial y cultural entre México y aquel país insular. Nosotros les proporcionamos el chocolate y el maíz, mientras ellos nos dieron la tuba, la cual se convirtió en una bebida tradicional en el estado de Colima.
Esta bebida es extraída de las flores de la palma de coco. Para obtenerla, los expertos cortan los racimos de coco s antes de que las flores se abran. Después, se deja que el líquido goteé algunos días y se recoge lo acumulado por las mañanas.
La tuba se puede beber sola o acompañada con frutos secos como cacahuate y nuez o con frutas frescas tales como manzanas, jamaica y pepino.
Yolixpa
Este es un licor típico de Cuetzalán, Puebla. La palabra “yolixpa” significa “medicina del corazón” y hace referencia a que, originalmente, era utilizado para aliviar malestares respiratorios. Sin embargo, poco a poco se convirtió en una de las bebidas más tradicionales de ese estado.
Está hecho a base de aguardiente, agua purificada y de hierbas como ruda, hinojo, ajenjo, hojas de té de limón, albahaca, menta, salvia, tomillo, orégano y por supuesto, el maltantzin. Esta última planta es reconocida por ser útil para curar los sustos.
Coco loco oaxaqueño
El coco loco es un cóctel poco conocido proveniente del Caribe y que tiene su propia versión en Oaxaca. La original se prepara con vodka o ron. Sin embargo, en la versión mexicana esos licores por mezcal oaxaqueño. Este se acompaña con piezas de coco completas -es decir, el agua y la carne-. Te recomendamos tomarlo muy frío y poco a poco porque el grado de alcohol del mezcal suele ser muy alto.
Licor de capulín
Esta delicia es oriunda de Campeche y del Estado de México. Se trata de una bebida preparada con jugo de capulín, azúcar, agua y alcohol de 96 grados o aguardiente de caña.
Lo mejor de esta bebida es que puedes prepararla en casa de una manera muy sencilla. Primero, se ponen a hervir los capulines junto con agua hasta que la fruta se deshaga. No dejes de mover la mezcla. Posteriormente se baja el fuego y se añade el azúcar. Después se agrega el alcohol.
Por último, deja que la mezcla se enfríe y envasa. Para maximizar su sabor, espera a que pasen 24 horas por lo menos y ahora sí, ¡salud!
Saká o el pozol sagrado
Desde la época precolombina, el saká ha sido una de las bebidas sagradas más importantes para los mayas. Se servía como como ofrenda para el dios de la lluvia: Chaac. Actualmente se ha convertido en un brebaje típico de la península de Yucatán y de Quintana Roo.
Para su realización, se emplea maíz nixtamalizado medio cocido y agua. El saká se endulza con miel de abeja o azúcar. Cabe señalar que se prepara sobre todo en las distintas facetas de la actividad agrícola. Por ejemplo, durante la siembra, deshierbe y recolección. Esto se hace con el fin de obtener buenas y ricas cosechas.
Balché
Este brebaje yucateco, junto con el saká, es una de las bebidas mayas más sagradas. De hecho, el balché solo es consumido durante las ceremonias religiosas. Cabe señalar que, de acuerdo con el diccionario Motul, este líquido debe su nombre a Balché, dios del vino.
El balché es un vino que se prepara con la corteza de un árbol que posee el mismo nombre. Para darle vida a este delicioso elixir, lo primero es hervir la corteza y de esta forma, quitarle el sabor amargoso. Luego se pone a secar y después a hervir con agua. Se deja fermentar durante tres días y se le agrega azúcar y a veces aguardiente.
Guarapo
Esta bebida es tradicional en distintos países latinoamericanos. Entre ellos están Colombia y, por supuesto, México. Cabe señalar que, en nuestro país, el guarapo es considerado como la bebida de los pueblos chontales que habitan en Tabasco.
Este elixir es preparado por las comunidades -quienes tienen más de 100 años de experiencia-. Para hacerla, es necesario tener “guarapos” o cañas de azúcar. Con ayuda de trapiches, los expertos extraen el jugo de la caña para después ponerlo a hervir y dejar que se fermente durante algunos días. Cabe señalar que puede agregársele licor para que la fermentación sea más fuerte.
Chorote
El chorote es considerado el tipo de pozol más sabroso. Se trata de una de las bebidas más populares en el estado de Tabasco. Quizá sea por su exquisito sabor terroso o la frescura que nos otorga, pero el chorote es un verdadero elixir.
Este se prepara a base de un fermentado de masa de nixtamal y cacao molido. Para hacerlo, se tuesta el cacao y el maíz. Después se muelen y se mezclan con agua. Puede añadírsele azúcar al gusto y degustarse bien frío.