El zanate, el bellísimo pájaro que parece un cuervo y fue introducido por Ahuizotl
Los zanates no son cuervos y tampoco son originarios del Valle de México. Su introducción premeditada fue ordenada por el Tlatoani Ahuizotl, quien amaba estas aves.
El zante mexicano, cuyo nombre científico es Quiscalus mexicanu es un ave paseriforme perteneciente a la familia de los Icteridae. Aunque popularmente la gente suele llamarlos cuervos o confundirlos con ellos, el zanate es una especie totalmente ajena.
Los zanates son aves con dimorfismo sexual. Los machos poseen un plumaje negro, iridiscente y brillante; llegan a medir hasta 43 cm y pesan cerca de 230 gramos. Por su parte, las hembras miden cerca de 33 cm, pesan 125 gramos en promedio y poseen un plumaje café opaco.
Entre sus características se encuentra el ser aves muy inteligentes, capaces de recordar lugares, personas y hacer maniobras complejas como abrir empaques para buscar comida. El canto de los zanates es una mezcla de varios ruidos estridentes. Son animales territoriales y defienden sus nidos con agresividad; cuando perciben un posible agresor, suelen emitir un canto de alarma para llamar a otros individuos. También, los machos poseen un canto espacial de cortejo, el cual acompañan con un baile frente a la hembra.
El zanate fue introducido intencionalmente al Valle de México
Aunque en la actualidad el zanate es un ave muy común en el Valle de México, esto no siempre fue así. La distribución original del zanate abarca desde el Estados Unidos hasta Sudamérica, sin embargo, el hábitat estaba acotado a las zonas costeras.
La introducción del zanate (teotzanatl en náhuatl) al Valle de México se debe a la decisión del Tlatoani Ahuizotl, octavo gobernante de Tenochtitlán, quien debido a su gusto por las aves, decidió introducir el ave en la ciudad. Ahuizotl gobernó del 1486 al 1502 y el proceso de introducción contó por lo menos de tres etapas:
- Captura en la Región del Golfo (Cuextla y Totonacapan, según Sahagún), transporte y liberación de los zanates en Tlatelolco y Tenochtitlán.
- Alimentación de los zanates.
- Protección contra su caza.
La introducción de los zanates fue un proceso corto, el cual probablemente terminó durante el gobierno de Ahuizotl o de su sucesor, Moctezuma; tras ello la protección de la especie terminó. Hacia 1577, los zanates ya habían expandido su hábitat cerca de 20 leguas.
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