Sábado

8:30 hrs. Decidimos ir a conocer la famosa Sierra de Los Cardos, cadena montañosa localizada a escasos 20 kilómetros hacia el poniente de Jerez y considerada como uno de los lugares más bellos de todo Zacatecas.

Tomamos el camino hacia Fresnillo y, al llegar al entronque Jerez-Fresnillo seguimos hacia El Cargadero por un camino asfaltado, aunque con un poco de baches, por lo que hay que conducir con cuidado. Ya casi para llegar, se acaba el pavimento y hay que cruzar una pequeña ranchería llamada Parral de las Huertas, con un camino bastante abrupto.

La Sierra de Los Cardos está constituida por formaciones geológicas irregulares. Resulta bastante apropiada para practicar el campismo, la bicicleta de montaña, la escalada en roca, el rapel y prácticamente cualquier deporte extremo.

Si se visita la zona en época de lluvias, hay que tener un poco más de precaución, pues sobre el camino se deben cruzar dos o tres arroyos que pueden causar algún inconveniente, pero nada de peligro en realidad.

14:30 hrs. Una vez que disfrutamos plenamente de esta maravilla natural emprendimos el regreso hacia la ciudad, directamente hasta el restaurante Juana Gallo, uno de los de mayor tradición en Jerez, ubicado sobre la calle Del Santuario. Ofrece platillos típicos como el popular asado de boda y la brocheta jerezana, acompañadas con un delicioso mezcal de la región de Huitzila.

Al salir del restaurante, caminamos sobre el costado norte del Jardín Rafael Páez, y nos topamos con el famoso Portal Inguanzo (1797), en el exterior de lo que fuera una casa habitación que ahora funciona como una cafetería-nevería, por lo que aprovechamos para comprar un helado. Al salir, fuimos por la calle del Santuario hasta llegar al Palacio Municipal, que se aloja en lo que fuera una de las casas consistoriales que se edificaron entre los años de 1730 y 1745. El edificio municipal posee una hermosa fachada barroca en cantera. Fue remodelado hacia las últimas décadas del siglo XX, pero conservó la pulcritud de su portada original. Al interior, el Palacio Municipal está conformado por un patio central delimitado por una arquería con arcos de medio punto en dos plantas y cuenta con dos escalinatas. La principal se localiza sobre el pasillo oriental del conjunto y una secundaria sobre su costado sur, en cuyo descanso nos recibe una pintura con el retrato de Francisco García Salinas, forjador del actual estado de Zacatecas y a quien se le debe la segunda parte del nombre de la ciudad de Jerez. Casi a un costado del Palacio Municipal, caminando hacia el sur, está lo que se conoce como la Casa del Campesino, construcción del siglo XVIII que fuera sede de las organizaciones campesinas de Jerez y que en la actualidad tiene diversos usos.

17:00 hrs. A pocos pasos, en la misma dirección, llegamos hasta el templo del Santuario de Nuestra Señora de la Soledad (1805), cimentada en lo que fuera una capilla de un hospital de indios. Se dice que su constructor se inspiró en la catedral de Santiago de Compostela. El estilo del edificio es mayormente neoclásico, aunque se alcanzan a observar algunas reminiscencias barrocas en la entrada principal del atrio. En el interior sobresale su retablo principal dedicado a la Virgen de la Soledad, y también llama la atención el excelente trabajo de tallado en madera de los confesionarios y del púlpito.

Exactamente frente al Santuario está el Edificio de la Torre, construido en el terreno que don Pantaleón de la Torre cediera para que allí se promoviera la educación y la cultura (1894). El estilo arquitectónico se puede ubicar dentro del románico y mozárabe mudéjar. En la actualidad alberga la Casa de la Cultura de Jerez y la Biblioteca Pública Municipal.

18:00 hrs. Después de admirar el edificio de la Torre, nos encaminamos por la calle del Reloj hasta llegar al Jardín Hidalgo, es así como nos encontramos con el bellísimo teatro de la ciudad, de estilo mozárabe con arcos de medio punto, ventanas y barandales en los que aparecen las clásicas combinaciones de cinco y tres, elocuente simbolismo para quien logra entenderlo. El interior es de estilo rústico, con sillería de madera con respaldo alto y su planta tiene forma de herradura, con un gran escenario bajo un arco de medio punto realizado magistralmente en cantera. Se dice que llegó a funcionar como cuartel general durante la Revolución, además de haberse habilitado también como sala cinematográfica, auditorio para reuniones sociales y como biblioteca y escuela pública.

20:00 hrs. Aprovechamos la noche para regresar al Teatro Hinojosa a ver un espectáculo de danza folclórica que presentan los alumnos del Instituto Superior de Educación Artística Calmecac, lo que nos dio la oportunidad de ver el interior del recinto como en sus mejores épocas.

21:30 hrs. Cenamos en La Cofradía (Constitución 2) y luego fuimos al bar Ozono.

DOMINGO

9:00 hrs. Con el ánimo repuesto después del nutritivo desayuno, iniciamos el recorrido en el Museo Regional de Arte e Historia, ubicado en una de las salas exteriores del Teatro Hinojosa. Seguimos con la excursión en el Andador Artesanal, a un costado del Edificio de la Torre, donde hay todo tipo de artesanías y productos típicos, como botines de charro y sombreros de ala ancha, además de los tradicionales cintos pitiados, que con tanto garbo usan los caballeros de esta región del país.

Así, caminando por este andador llegamos hasta el Portal de las Palomas y la Plaza Tacuba. Bajo el amparo del portal se localiza uno de los bares de mayor tradición y abolengo de Jerez, el bar Tizoc, así como una tienda bazar de antigüedades y artesanías. Al salir del portal está la Plaza Tacuba, cuyo trazo se efectuó desde la fundación misma de la villa de Jerez.

13:00 hrs. Fuimos por fin a visitar la Casa Museo Ramón López Velarde, localizada en el número 33 de la calle homónima del poeta jerezano. Entrar es como transportarse al siglo XIX, muestra algunos muebles originales, así como objetos personales del insigne personaje: fotografías familiares, copias de los manuscritos de Suave Patria, considerada como su obra maestra por muchos, y que fuera compuesta en 1921 con motivo del primer centenario de la consumación de la Independencia.

Con el ánimo exaltado por tan ilustrativa visita, continuamos caminando por la calle de H. Colegio Militar hasta llegar a la Capilla de Nuestra Señora de los Dolores, construida a principios del siglo XIX.

14:00 hrs. Al seguir nuestro camino nos topamos con un edificio con gran cantidad de arcos de medio punto en dos de sus caras y que es el actual mercado, aquí pudimos comprar, desde frutas y verduras hasta artesanías y comida a buenos precios. Por último tomamos la calle San Luis hasta llegar nuevamente al Jardín Rafael Páez, donde dimos por terminado el recorrido por esta ciudad que transcurre sus días en medio del trabajo, la paz, tranquilidad y hospitalidad de su gente.

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Federico Vargas Somoza