La Catedral de Monterrey
¿Has estado en Monterrey? Quizá otras bellezas arquitectónicas han distraído tu atención. Aquí te contamos sobre la joya que es la catedral de Monterrey.
En medio de las grandes dificultades que rodearon la fundación de Monterrey hace cuatrocientos años, se inició la construcción de la Catedral de Monterrey hacia 1626, y no fue sino hasta 1800 cuando se concluyeron las obras de la portada de estilo barroco y el primer cuerpo de la torre.
La hermosa Catedral de Monterrey se comenzó a construir en 1770 y en su mayor parte fue concluido en 1889; por esa larga historia arquitectónica combina el estilo barroco del siglo XVIII y el neoclásico decimonónico.
En su interior destacan los bellos murales del presbiterio realizados durante el siglo XX por el pintor duranguense Ángel Zárraga(1886-1946) que hacen referencia a pasajes evangélicos y a la presencia franciscana en la región.
Realizados entre 1942 y 1946, estos murales destacan por su originalidad, y el colorido que alcanzan crea un ambiente de transparencia que renuncia a los contrastes y que nos habla de un pintor de gran sensibilidad y talento.
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Descripción de la catedral de Monterrey
La sobriedad de su diseño, el color de la cantera y la altura de su torre de tres cuerpos impresionan al visitante, que encuentra en esos trazos la biografía de una región agreste dominada por la voluntad de sus pobladores. La visita resulta sumamente interesante si se tiene en cuenta la calidad y la belleza de las pinturas que guarda la sacristía, todas ellas realizadas durante el periodo colonial, así como de las estanterías y los sitiales de maderas finas de la sala capitular y el enorme óleo de las Ánimas pintado en 1767.
Es también muy bella la capilla del sagrario, donde destaca el frontal de plata repujada, obra anónima del siglo XVIII.
¿Dónde está?
En la Macroplaza de Monterrey, Nuevo León.
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