Letanía y cantos para pedir posada
"Entre santos peregrinos, peregrinos..." Conoce la letanía y cantos completos para pedir posada. ¡A cargar los peregrinos!
Te presentamos la letra completa de la letanía y cantos para pedir posada. Las fiestas navideñas ya están aquí y no hay nada mejor que acompañarlas cantando !Disfruta de estas fiestas en compañía de tus familiares, amigos y vecinos!
¡Ya empezaron las posas y la letanía de los peregrinos no puede faltar en las fiestas. Conoce la letanía y cantos para pedir posada completos y pasa una velada perfecta con las tradiciones navideñas más bonitas y antiguas de nuestro país.
En México, la letanía para pedir posada y otros cantos característicos de estas celebraciones existen desde que en 1587 el religioso agustino fray Diego de San Soria, prior del convento de San Agustín Acolman, en el actual Estado de México, solicitó (y obtuvo) una bula del entonces Papa Sixto V para celebrar anualmente, en esa sede y otras del Virreinato, misas de aguinaldo que recordaran el peregrinar de José y María desde el día 16 y hasta el 24 de diciembre.
«En el nombre del cielo»: Letanía para las posadas
Peregrinos
En nombre del cielo
pedimos posada,
pues no puede andar
mi esposa amada.
Anfitriones
Aquí no es mesón
sigan adelante
yo no debo abrir
no sea algún tunante.
Peregrinos
No seas inhumano
tennos caridad,
el Dios de los cielos
te lo premiará.
Anfitriones
Ya se pueden ir
y no molestar,
porque si me enfado
os voy a apalear.
Peregrinos
Venimos rendidos
desde Nazareth
Yo soy carpintero
de nombre José.
Anfitriones
No me importa el nombre,
déjenme dormir,
pues que yo les digo
que no hemos de abrir.
Peregrinos
Posada te pide
amado casero,
por sólo una noche
la reina del cielo.
Anfitriones
Pues si es una reina
quien lo solicita
¿cómo es que de noche
anda tan solita?
Peregrinos
Mi esposa es María
es reina del cielo,
y madre va ser
del Divino Verbo.
Anfitriones
¿Eres tú José?
¿Tu esposa es María?
Entren, peregrinos,
no los conocía.
Peregrinos
Dios pague señores
vuestra caridad,
y que os colme el cielo
de felicidad.
Anfitriones
¡Dichosa la casa
que alberga este día
a la virgen pura,
la hermosa María!
Cuando abran la puerta todos cantan
Entren santos peregrinos, peregrinos,
reciban este rincón
que aunque es pobre la morada, la morada,
os la doy de corazón.
Al final, los peregrinos agradecen diciendo
Mil gracias os damos
que en esta ocasión
posada nos disteis
con leal corazón.
Pedimos al cielo
que esta caridad
os premie colmándoos
de felicidad.