Los misterios del «trenazo de Puente Moreno», tragedia ferroviaria en México
Ese día 234 pasajeros dejaron este mundo, tras el extraño descarrilamiento de este tren. ¿Sabotaje o accidente?
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El 4 de octubre de 1972, se registró la segunda tragedia ferroviaria más grande de la historia de México. Los periódicos de entonces le llamaron “el trenazo de Puente Moreno”, por ocurrir a pocos kilómetros de la ciudad de Saltillo, dejando un saldo de 234 personas fallecidas, además de mil 11 heridos.
Sin embargo, a más de 50 años de ocurrido este suceso, aún quedan en el panorama muchos misterios. Para empezar existen versiones encontradas sobre el origen del incidente. Esto porque en la búsqueda de culpables, la PGR de aquel entonces, manifestó sin dudar que el trenazo había ocurrido porque los miembros de la tripulación estaban borrachos.
La tripulación iba ebria y en compañía de mujeres
Por eso Melchor Sánchez, el maquinista; Jesús Rocha, conductor; Ignacio González, fogonero y el garrotero Juan Picón, fueron acusados de homicidio colectivo y daños a las vías de comunicación.
Luego se agregó que todos estos individuos , además de ir bebidos, iban conviviendo con mujeres de la “vida galante”, quienes provenían de una carpa de Real de Catorce, de donde salió el tren, cargado de pasajeros que en su mayoría venían de una peregrinación.
Un tren viejo a 120 kilómetros por hora
Todo esto, en suma, habría derivado en que el maquinista condujera el tren a 120 kilómetros por hora, el doble de la velocidad permitida, haciendo que se descarrilara en la pendiente del tramo Puente Moreno.
Pero las autoridades luego empezaron a caer en contradicciones, incluso en documentos, pues mientras las declaraciones firmadas por los tripulantes aceptaban que venían ebrios, la realidad es que en los exámenes médicos se afirmaba que ninguno de ellos traía gota alguna de alcohol en la sangre.
Mentiras y contradicciones en el «trenazo de Puente Moreno»
Tampoco hubo registro de las supuestas mujeres que acompañaban a los tripulantes entre los muertos o heridos, ni tampoco un reporte sobre la velocidad que registraron los instrumentos, así que la versión acerca de que el tren descarriló por ir a 120 kilómetros por hora quedó en entredicho.
El tema empeoró cuando se argumentó, primero por los abogados de los acusados, y después por los informes periciales, que existía la posibilidad de que el accidente se hubiera debido a un sabotaje.
Dudas de sabotaje y una pugna entre sindicatos
Éste se habría derivado de una pugna entre el Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM) y el Movimiento Sindicalista Ferrocarrilero (MSF), el primero señalado de tener grupos de choque y el segundo por tener una visión comunista para dirigir a la paraestatal.
Pero como ha pasado con otras tragedias, ésta pasó a ser un tema secundario, para luego pasar al archivo y después al olvido. A pesar de las muertes nunca se supo quién o qué fue lo que realmente causó la tragedia.
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