Mariachis y otros músicos apoyan a voluntarios con música
La música mexicana ha funcionado como una ayuda más en centros de acopio, refugios y en los lugares en donde aún se mueven escombros.
La música tiene el gran poder de influir en nuestros estados de ánimo, es por eso que nos ayuda a motivarnos, a sentirnos mejor y nos regresa a un estado de paz. Un estudio de la Universidad de Florida señala que la música activa más partes del cerebro que cualquier otro estímulo humano y regula el nivel de hormonas relacionadas con el estrés, es por ello que en estos momentos los mexicanos necesitamos de la música más que en cualquier otro momento.
Durante estos días escuchamos a cientos de rescatistas entonar el famoso “Cielito lindo” como un himno para impulsar y motivar a todas las manos que se encontraban ayudando en las calles de Bolivar y Chimalpopoca.
También días después del sismo ocurrido el pasado 19 de septiembre los mariachis de Garibaldi reactivaron sus actividades intercambiando canciones por víveres, un acto que tuvo una gran respuesta y que sirvió para reunir una gran cantidad de ayuda para los damnificados de todo el país.
Piel chinita en Parque México con los mariachis. Tengo ganas de llorar. pic.twitter.com/Yxem02tIEb
¡Descubre el México Auténtico a través de nuestro podcast!— a í d a (@aida_secura) 24 de septiembre de 2017
En otro momento un grupo de mariachis cambió su sombrero por cascos y se acercó al Parque España y el Parque México en donde interpretaron junto con todos los voluntarios que ahí laboran temas como El Viajero o México lindo y querido un momento que emocionó a todos los que se encontraban en el lugar.
Otro grupo de músicos mexicanos encabezados por el flautista Horacio Franco y los guitarristas César Lara y a Matthew Rohde, ofrecieron sus notas musicales a todos los que ofrecieron sus manos para ayudar en la Casa refugio Citlaltépetl, en donde además se guardó un minuto de silencio con el puño en alto en memoria de las víctimas por el sismo.
La música también ayudó a todos aquellos que se quedaron sin un lugar para dormir porque sus edificios resultaron dañados, fue así que en el albergue del deportivo Benito Juárez, Magali Luna tocó el violín para desestresar a varios niños que dibujaban y jugaban en el lugar. Así como ella, varios héroes anónimos han compartido sus notas para que las sonrisas en lis pequeños no paren.
No soy mucho de compartir ésto, pero quiero que vean en este vídeo que me pasaron toda la alegría que una acción pequeña puede causar. pic.twitter.com/KWFV9Xeyvl
— Diego Udhsj (@DiegoUdhsj) 23 de septiembre de 2017
La música nos ha mantenido fuertes y nos ha dado energía para seguir adelante. Gracias a todos los que ofrecen su música en estos momentos en el que el país más que nunca necesita cantar y encontrar la paz.