Mujeres masonas, más de 130 años de presencia en México
La historia de la masonería femenina en México no ha sido fácil, sobre todo porque se pretendía que solo los hombres pudieran pertenecer a las logias.
Aunque muchos creen que la sociedad masónica es una organización exclusiva para hombres, la realidad es que en México existe una agrupación de este tipo solo para mujeres. Y han ido tan en serio que las mujeres masonas tienen más de 130 años en nuestro país.
La primera logia masónica femenina en territorio nacional, al menos reconocida de forma oficial, se fundó en 1890, llevando el nombre de María Alarcón de Mateos No. 27. Un año después surgió la logia Josefa C. de Cantón. Operaron en el D.F. y Tamaulipas, respectivamente. Pero ambas fueron disueltas en 1897, por presiones de las logias masculinas.
Las logias de mujeres masonas en el DF
Cuarenta años después se crearon otras logias de mujeres masonas: Emancipación dogmática No. 1, Alm libre No. 2 e Izquierdas No. 3. Todas ellas tenían su sede en el D.F., sin embargo también desaparecieron.
Décadas después, Magdalena Sánchez de Alzaga, integrante de una logia mixta, fue quien decidió fundar una organización de esta corriente solo para el género femenino, bajo el llamado Rito Escocés Antiguo y Aceptado.
La Gran Logia Unidad Femenina
Fue así como nació la Gran Logia Unida Femenina Alma Mexicana en 1935, siendo la que más años ha acumulado en territorio nacional. Con respecto a las logias conservadoras masculinas, no siempre han aceptado la rama femenil, pero si han generado agrupaciones paramasónicas destinadas a las mujeres esposas o hijas de masones.
Como dato curioso, debemos decir que se cree que la corregidora Josefa Ortíz de Domínguez también perteneció a los masones, lo cual no se puede afirmar, porque si en la actualidad la pertenencia a esta asociación es discreta, antes era en verdad secreta.
¿Qué es una mujer masona?
La masonería o francmasonería se define a sí misma como una institución de carácter filosófico, filantrópico e iniciático. Nació en Europa a finales del siglo XVII, aparentemente entre los círculos intelectuales y políticos de la ilustración. Sin embargo, mitológicamente la masonería rastrea su origen en los gremios de constructores de las catedrales medievales. De forma más aventurada, algunos consideran que la masonería nació durante la construcción del templo de Salomón.
Los grupos masónicos a su vez están conformados por logias, cofradías o hermandades formadas por un número mínimo de maestros. Por su parte, la vida de las logias gira en torno a símbolos arquitectónicos que son análogos a distintos niveles de comprensión filosófica y moral.
A su vez, las pequeñas cofradías suelen suscribirse a otras más grandes, a las que llaman Gran Logia. En el interior, las cofradías suelen agruparse en torno a un rito, pese que existen grandes logias que agrupan más de uno.
Originalmente las logias masónicas estuvieron compuestas por sociedades exclusivamente varoniles, consecuencia de distintas creencias metafísicas. Sin embargo, actualmente existen grupos exclusivamente femeninos o mixtos, pese que no siempre son reconocidos por las logias más conservadoras.
Al ser una sociedad iniciática, la masonería se compone de diversos rituales tradicionales cuyo objetivo es producir un cambio de consciencia en las aspirantes a pertenecer a una logia, los cuales son denominados como profanas.
Después del escrutinio de la aspirante, la profana pasará por una serie de rituales con los ojos vendados, en los cuales se compromete con la institución y juramenta ante un la Venerable Maestra (lidereza de la logia), luego de lo cual se transforma en una aprendiz de masonería. Posteriormente podrá aspirar a los dos grados básicos subsecuentes de compañera y maestra.
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