Plan de Texcoco: La Revolución Mexicana en 10 puntos
El Plan de Texcoco fue un llamado valiente a la acción en un momento crucial de la historia de México. Conoce más sobre él.
La Revolución Mexicana estuvo marcada por numerosos levantamientos y proclamaciones políticas. Entre estos, destaca el Plan de Texcoco, un audaz pronunciamiento que sacudió los cimientos del México de 1911.
¿Qué fue el Plan de Texcoco?
El Plan de Texcoco se proclamó el 23 de agosto de 1911 por Andrés Molina Enríquez, una figura influyente en la Revolución Mexicana.
Este pronunciamiento tenía como objetivo desconocer el gobierno del presidente interino Francisco León de la Barra y desafiar la autoridad de los gobiernos estatales y territoriales.
Molina Enríquez buscaba avivar la revolución y, al mismo tiempo, abordar la cuestión agraria que había planteado en su obra «Los grandes problemas nacionales.»
El Plan de Texcoco se basaba en diez puntos clave. Entre ellos, destacan la desconexión de la presidencia interina de León de la Barra, el establecimiento de un triunvirato provisional y transitorio, y la expropiación parcial de fincas rurales de gran extensión.
Estos fueron los 10 puntos que se establecieron con el plan:
- Desconocer la presidencia interina de León de la Barra
- Molina Enríquez asumiría las funciones del Poder Legislativo y del Poder Ejecutivo de forma provisional y transitorio.
- Formar un triunvirato o consejo que asumiría al gobierno de la nación, sus miembros posibles serían Emilio Vázquez Gómez, Manuel Bonilla, los generales Pascual Orozco, Emiliano Zapata, Camerino Mendoza, Rafael Tapia o el señor Paulino Martínez.
- En caso de morir alguno de los miembros, los restantes elegirían al tercero.
- En cada entidad se nombrarían comandantes militares adheridos al plan.
- En cada entidad los comandantes militares disolverían a los poderes legislativos y ejecutivos locales.
- Los comandantes militares acatarían las leyes dictadas provenientes del plan revolucionario de Texcoco.
- Molina Enríquez asumiría la responsabilidad para con la nación y las naciones extranjeras, siendo la revolución la que cuidaría la vida e intereses de los extranjeros residentes en México.
- Todas las leyes generales y locales seguirían vigentes hasta que fueran derogadas. Se convocaría a elecciones para renovar a los poderes legislativos y ejecutivos.
- Se dictarían las disposiciones necesarias para formar el Consejo, el cual proveería las necesidades del gobierno federal.
Antecedentes y aportaciones
El contexto histórico en el que surgió el Plan de Texcoco es fundamental para comprender su importancia.
La Revolución Mexicana ya estaba en marcha gracias al Plan de San Luis de Francisco I. Madero, y el presidente Porfirio Díaz había renunciado en 1911. El gobierno interino de León de la Barra y la falta de respuesta a las preocupaciones agrarias de Molina Enríquez fueron el caldo de cultivo para este pronunciamiento.
Aunque el Plan de Texcoco no logró sus objetivos y su líder terminó en la cárcel, su legado perduró. Este episodio contribuyó a resaltar la cuestión agraria como un tema crucial en la Revolución Mexicana, un tema que más tarde sería abordado en el Plan de Ayala de Emiliano Zapata.
Además, Andrés Molina Enríquez desempeñó un papel significativo en la redacción del artículo 27 de la Constitución de 1917, que regulaba la tenencia de la tierra y los recursos nacionales.
Aunque el Plan no tuvo éxito inmediato, su impacto perduró en la memoria de la Revolución Mexicana y en la evolución de las políticas agrarias del país. Un recordatorio de que incluso los momentos aparentemente fallidos pueden tener un profundo impacto en la historia.