Tiburón mako: torpedo con dientes
Te contamos todo sobre el tiburón mako, uno de los pelágicos que navega en mares mexicanos.
El tiburón mako (Isurus oxyrinchus) es uno de los tiburones pelágicos más conocidos. Su apariencia es la de un tiburón agresivo, con grandes ojos negros y una mandíbula repleta de grandes dientes cónicos y puntiagudos que sobresalen del hocico.
Características del tiburón mako
El tiburón mako pertenece a la misma familia del gran tiburón blanco, lo cual es evidente, ya que se parece a uno, pero de menor tamaño. Su cuerpo es fuerte, robusto y muy hidrodinámico, un mako adulto suele medir entre 3 y 4 metros con hasta 200 kg de peso.
¿Dónde podemos encontrarlo?
Si bien es cierto que su distribución es muy amplia, existen 5 lugares en el planeta en donde su congregación es mayor: Ciudad del Cabo (Sudáfrica), San Diego (Estados Unidos), Rhode Island (Estados Unidos), Islas Azores (Portugal) y Baja California (México); así es, México se encuentra entre uno de los mejores lugares del mundo para observar a este espectacular animal.
Su principal virtud: velocidad pura
Recientemente se comprobó que es el animal más rápido del océano, ya que puede alcanzar los 124 km/h, velocidad incluso mayor que la del pez vela y que la del guepardo; en efecto, en el reino animal solo hay ciertas aves más veloces que él.
Su secreto radica en su perfecta hidrodinámica, cuya potente masa muscular se triplica gracias a que regulan su propia temperatura y una aleta caudal en forma de media luna que le permite arrancar muy rápido; podríamos decir que tienen turbo incluido.
En busca del tiburón mako
Como amante de la naturaleza, en 2015 decidí buscar a uno de los grandes tiburones que me faltaba admirar y fotografiar: el potente tiburón mako. La primera experiencia fue frustrante porque pasé tres días completos en altamar en San Diego y no tuvimos ni cerca un tiburón.
Un par de años después, debido a que se empezó a tener noticias de que en Los Cabos existían buenas oportunidades para observarlo, decidí intentarlo y, al segundo día, ¡apareció uno!
Me sentí entusiasmado y a los pocos segundos que entré al agua, el tiburón se atoró en el cabo de seguridad; pobre animal, lo liberamos y se fue velozmente muy asustado. A principios de este año volví a Los Cabos y otra vez fueron tres días de frustración, así es la naturaleza.
Buceo libre con tiburón mako
Dado mi anhelo de interactuar con ellos, decidí regresar a finales de marzo, la cual es la mejor temporada para verlos.
Para ello recomiendo intentarlo con el primer operador que se dio a la tarea de identificar lugares en donde se puede nadar con estos tiburones: cabosharkdive, empresa encabezada por el biólogo Jacob Brunetti, pionero de esta actividad, italiano de nacimiento, con amplia experiencia a nivel mundial en buceo con tiburones y que ha desarrollado una técnica de chumming (término utilizado en el manejo de carnada) eficaz para atraer tiburones de forma segura.
Al segundo día de actividad comenzamos a tirar carnada al mar, atada de varios cabos y haciendo un rastro de sangre y vísceras, con la esperanza de que un tiburón lo siguiera y al final del camino nos encontrara a nosotros.
Por fin, después de dos horas de espera, se escuchó el grito: “¡tiburón!”, para mi alegría era un mako, así que a entrar al agua rápidamente sin hacer mucho ruido con la intención de no asustarlo.
Se tiene la idea que esta especie es peligrosa para el ser humano, que a buzos y náufragos flotando en el agua, les nadan en círculos y terminan atacándolos. Falso. Lo que realmente pasa es que, si se está mucho tiempo con ellos, se interesan en nosotros y pueden llegar a dar una mordida exploratoria para ver si somos parte de su dieta, lo que en definitiva no es así.
En cuanto entré al agua, pude darme cuenta de lo imponente que es el tiburón mako. Nada tranquilamente hasta que decide morder la carnada, entonces me di cuenta de su velocidad y potencia. Sus ojos negro profundo y sus dientes afilados que salían de sus mandíbulas me provocaron un gran respeto; en ningún momento sentí que me estuviera cazando, pero no es una especie que invite a interactuar de cerca.
Tuve la fortuna de estar observándolo por una hora, dando vueltas, comiendo, explorándonos, incluso en una ocasión pude acariciarlo, lo cual, a diferencia de otras especies, no le agradó en lo más mínimo, por lo que coleteó con gran fuerza y se alejó de mí en fracción de segundos. Me llamó la atención que el animal es puro músculo, sumamente fuerte y poderoso.
¿Especie amenazada?
Al ser un animal que habita en mar abierto, resulta muy difícil estimar el número de especímenes que existen. Sin embargo, la Unión Mundial para la Naturaleza (IUCN) lo incluyó en su lista roja de especies amenazadas, debido a que al habitar en aguas poco vigiladas son una presa ideal para los pescadores que buscan tiburones por sus aletas, para el famoso y poco entendible platillo asiático de sopa de aleta de tiburón.
Reconozcamos la labor que realiza Jacob y su equipo, ya que han enseñado a pescadores que un tiburón vivo vale mucho más que uno muerto; además, el costo de la actividad de nado con tiburones es bastante accesible, atrayendo desde buzos experimentados hasta personas que nunca han visto a un tiburón. A través de su labor se crea conciencia en cientos de personas de lo vital de los tiburones en el ecosistema marino.
Es muy triste darse cuenta de que hace 20 años ver tiburones mako en México y otros países era realmente sencillo; hoy en día es muy difícil, requiere mucho trabajo y mucha suerte.
Misión cumplida
Después de tantas horas e intentos, todo valió la pena porque logré el objetivo: fotografiar y sobre todo convivir e interactuar con el robusto, veloz, enigmático e intenso tiburón mako.
Agradezco a la vida por esta oportunidad y gracias a cabosharkdive, a Jacob, a Benjamín y al Cata por ayudarme a cumplir un gran sueño.
Me siento optimista de que cada vez más personas interactúen con ellos, de que se pase la voz de que son animales hermosos, que no corremos riesgo y de que pronto en nuestros mares existan más y más tiburones mako.
Quizá te interese leer:
Jorge de la Madrid Amante de la naturaleza, en especial de los grandes depredadores y muy en particular de los tiburones, su Nick name “Shark Diver”.