Burger boy, nostalgia ochentera por una Brontodoble
Si fuiste niño setentero u ochentero, recordarás con alegría cuando tus papás te llevaron al Burger boy. Te contamos qué pasó con este restaurante.
Hoy en día disfrutar una hamburguesa con papas no tiene nada de especial, las cadenas de comida rápida están en todas partes. Sin embargo, en la década de los setenta y ochenta, las cosas eran muy diferentes y no había nada remotamente parecido a Burger boy.
Recordemos que en esos tiempos, México mantenía sus fronteras cerradas y las cadenas norteamericanas de fast food no podían entrar al país. Fue entonces que dos empresarios puertorriqueños y uno cubano, vislumbraron una atractiva oportunidad de negocio en replicar este exitoso concepto y crearon Burger boy en 1968.
Lanzamiento
Burger boy inició con 4 restaurantes en diferentes puntos de la Ciudad de México y a pesar de que el servicio no era rápido ni los precios económicos; su propuesta despertó furor entre los niños.
Tras el gran éxito del concepto, en 1974 Maseca adquirió la cadena de restaurantes y Burger Boy llegó a contar con unas 50 sucursales en diferentes partes del país, aunque la mayoría ubicadas en lo que fue el Distrito Federal.
Mercadotecnia nunca vista, el éxito de Burger boy
Visitar este restaurante era toda una experiencia porque no había nada igual. Ofrecían en su menú hamburguesas con temática prehistórica: la unifante, con una carne, tenía el trazo de un mamut; la brontodoble se inspiraba en un brontosaurio; y por último, la dinotriple, con 3 carnes, era la figura de un dinosaurio.
Además, “inspirados” en la Cajita Feliz de McDonald’s, regalaban juguetes y los inolvidables locopopotes en forma de espiral.
Por último, se apoyaron en una poderosa campaña de publicidad que incluyó comerciales de televisión con Salma Hayek, Paco Stanley y Chabelo. Y promocionaban sus productos usando la voz de Jorge Arvizu, el “Tata”, fácilmente reconocible por los niños de la época ya que sonaba en las caricaturas como Don Gato y su pandilla.
Extinción de Burger boy
Era el año de 1985 cuando McDonald’s abrió su primera sucursal en el pedregal de la Ciudad de México marcando así, el inicio de la extinción de Burger Boy. En los siguientes años, este titán de la comida rápida, con 30 años de experiencia y millones de hamburguesas vendidas en el mundo, inauguró varias sucursales en las principales ciudades del país, donde las personas hacían largas filas para poder comprar una Cajita feliz.
En la década de los 90, con el Tratado de Libre Comercio recién firmado, otras cadenas de comida rápida llegaron al país, como Arby´s y Burguer King, profundizando la crisis de Burger boy.
A pesar de una reestructuración en la empresa, remodelación de sucursales y rediseño de su menú en 1994, la desaparición del restaurante era inminente. Sucedió dos años después, en 1996, cuando Maseca vendió todas sus sucursales a la empresa norteamericana Whataburguer.
Desde ese año, solo nos quedó el dulce recuerdo de lo que vivimos en el Burger boy.
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