Comunidades oaxaqueñas regresan al trueque en sus mercados
Comunidades de Oaxaca reviven el trueque. Con ello se busca desplazar la merma y la especulación sobre los productos de la tierra.
Antes los objetos se intercambiaban de forma directa uno por otro. Sin embargo, actualmente es el dinero lo que nos permite intercambiar nuestro trabajo o mercancía por otros bienes o servicios. Empero, nada nos impide realizar otras formas alternativas de comercio, como lo es el trueque.
A diferencia de la compraventa, el trueque no requiere la mediación de una moneda. Aunque se ha utilizado en distintas sociedades, ninguna investigación ha confirmado que haya sido la forma de intercambio exclusiva de una sociedad.
El trueque posee grandes ventajas, pero también contrariedades como la dificultad de calcular equivalencias, de transporte y de selección de bienes. Sin embargo, su impulso puede ayudar a comercios más justos, tanto en el intercambio de mercancía como de retribución de la fuerza de trabajo.
Por ello, la artesana Aurora Bazán, fundadora de una moneda alternativa conocida como Tumin, impulsa un mercado de trueque en el Parque Juárez de Tlacolula, Oaxaca.
El trueque, un antídoto contra la especulación
La artesana busca rememorar aquella época en que las propiedades privadas poseían cercos menos rigurosos y en el que los intercambios de mercancías se hacían entre vecinos, mano a mano. La intención de Aurora es que los jóvenes comprendan que el dinero no lo es todo, que sin él se puede hacer una infinidad de cosas.
Por otra parte, Aurora agradece que las comunidades de Teotilán, de donde es originaria, y Zaachila aún tengan este hábito. Actualmente ambas comunidades dedican un día al mes para el trueque. En cuanto a Tlacolula, los domingos realizan ventas de forma habitual, pero cuando cae la tarde comienza el intercambio entre locatarios. Frutas por semillas, ropa por maíz… todo se aprovecha. Lo comunitario prevalece sobre la especulación y se reducen significativamente las mermas.
Sobre la actividad, Aurora Bazán piensa que lo importante es el amor por el otro y la posibilidad de ayudarlo. Comentó:
«El intercambio nos une: no lo vemos como una carga, lo vemos como una alternativa de vida”.
