Gutierritos, ¿el antecedente de los Godínez?
La telenovela Gutierritos, transmitida en vivo, en 1958, fue un fenómeno cultural tan grande en México, que a ciertos hombres se les decía Gutierritos
Producida en nuestro país por el talentoso chileno Valentín Pimstein para Telesistema Mexicano, el antecedente de Televisa, la telenovela Gutierritos no solo fue un éxito rotundo; también se convirtió en documento histórico de nuestra televisión y fenómeno sociológico.
En primer lugar, la telenovela, estelarizada por Rafael Banquells, Mauricio Garcés y María Teresa Rivas, sigue la vida de Ángel Gutiérrez, un oficinista de origen humilde pero trabajador; quien capítulo tras capítulo, es despreciado por su esposa, hijos y compañeros de oficina.
Sin embargo, un día decide escribir sus memorias de forma anónima y para su sorpresa, se convierten en éxito de ventas, cambiándole la vida.
Gutierritos, precursor de las grandes producciones
En la década de los cincuenta, la televisión comercial tenía pocos años de existencia, y el género telenovelero era incipiente. No obstante, en 1958, con el éxito arrollador de Gutierritos, se empiezan a destinar grandes presupuestos para producir telenovelas, que décadas más tarde darían una gran reputación a nuestro país.
Cabe señalar que la telenovela de 1958 se transmitió en vivo y como no había cintas de video para grabarla, se perdió en el tiempo. Por ello, en 1965, Pimstein convocó nuevamente a todos los actores para regrabarla y fue así como quedó para la posteridad.
Además, como en esa época no había mediciones de audiencias, se supo que fue un rotundo éxito porque la venta de televisores se disparó en esos años.
El fenómeno sociológico
Probablemente Gutierritos tuvo tanto éxito porque se atrevió a intercambiar los roles de la clásica historia rosa: el personaje oprimido no era la mujer, sino el hombre, en un franco desafío al machismo de la época.
Asimismo, fue un acontecimiento social porque el término se asimiló en el habla coloquial para designar como Gutierritos a los hombres débiles de carácter por un lado; y por el otro, a los oficinistas de origen humilde, serviciales y trabajadores.
Finalmente una reflexión: ¿se puede equiparar el Gutierritos con el Godínez actual? Sí, en cuanto a que ambos son oficinistas, pero parece que el Godínez de nuestros tiempos tiene otra madera.