La princesa purépecha que se rebeló contra su novio para evitar la conquista española
Eréndira fue una princesa purépecha, que se negó a rendirse frente a los ejércitos españoles, así que ella misma encabezó la resistencia.
Vive una experiencia única:
Adrián Téllez, guía de turistas Tlalpujahua y mariposas monarca
En 1521, un grupo de emisarios purépechas emprendió un viaje rumbo a Tenochtitlán. Su misión era entablar un diálogo con los conquistadores españoles que estaban en el proceso de someter a los mexicas. Sin embrago, no contaban con la valentía y tenacidad de una princesa purépecha, su nombre era Eréndira.
Apenas llegaron los enviados a lo que hoy es Tacuba cuando lograron ver el fuego y toda la destrucción del poderoso imperio de Moctezuma.
Los emisarios desconcertados por la inminente derrota de los mexicas —considerado el pueblo con el ejército más fuerte de la época— supusieron que el pueblo purépecha correría con la misma suerte. Emprendieron el regreso a su territorio, hoy estado de Michoacán, para advertirle lo que vieron a su gobernante Tangáxoan Tzíntzicha.
Tangáxoan Tzíntzicha decide rendirse, pero su hija Eréndira se niega
Tras pensarlo mucho, o tal vez no tanto, Tangáxoan Tzíntzicha decide rendirse en cuanto entre el ejército español acompañado de sus aliados. Pero no contaba que quien no aceptaría esta decisión sería una de sus dos hijas: la princesa Eréndira, quien estaba prometida en matrimonio a Nanuma, jefe de todos los ejércitos.
Eréndira discute con su padre por su decisión de rendirse, pero éste se niega a tomar las armas para evitar la conquista española, así que habla con Nanuma para ordenarle no pelear.
Pero es Eréndira quien trata de convencer a Nanuma para no rendirse, le promete que no se casará con él en caso de que no tome las armas y luche. Pero el jefe de los ejércitos decide hacerle caso omiso a la petición de su futura esposa, así que rinde al pueblo purépecha tal como lo pidió Tangáxoan. Los purépechas sellan un pacto de paz con los españoles liderados por Cristóbal de Olid, considerado el más sanguinario de los capitanes de Hernán Cortés.
La princesa purépecha pelea contra su novio Nanuma, jefe de los ejércitos
Molesta, Erendira forma una resistencia de personas que creían en ella. Así que en realidad la resistencia purépecha fue organizada y liderada por una mujer. Los rebeldes encabezados por la princesa se van a las montañas para huir de los españoles y naturales que para esas alturas avanzaban masacrando a las poblaciones purépechas, muchas de las cuales empezaron a caer.
Eréndira se reúne en Pátzcuaro con su gente para organizar una mejor defensa, es en esta ciudad en donde pelea contra su propio ex prometido, el general Nanuma. Ella se mete a la zona que hoy comprende Santa Clara del Cobre, Michoacán con la gente y guerreros que aún se resisten a ser esclavos de los españoles.
Una versión —que algunos para descalificar la toman como solo una leyenda— señala que la gente de Eréndira le lleva un caballo a la princesa, el cual obtuvieron tras asaltar a un grupo de españoles. La intención era sacrificar al caballo y ofrecerlo como ofrenda a sus dioses y así éstos los protegieran, pero Eréndira habría decidido no matar al animal y por el contrario aprender a montarlo.
Una vez domando a la bestia, Eréndira lo monta, cabalga y así demuestra que estos animales no eran seres con poderes sobrehumanos sino simplemente animales que no conocían y que podían ser dominados, por eso ella es considerada la primera persona indígena en montar a caballo.
Montada en este caballo, la princesa purépecha se lanzaría a enfrentar a los ejércitos españoles y los aliados purépechas. Entre ellos se encontraba su novio Nanuma, sin embargo, es derrotada y vuelve a la sierra con menos seguidores.
Solo los años vencieron a Eréndira, pues se dice que fue hasta después de 1550 que ella se rinde a petición de un fraile. Al parecer fue fray Martón de la Coruña, de quien por cierto la princesa purépecha parece haberse enamorado.
¿Quieres escaparte a Michoacán? Descubre y planea aquí una experiencia inolvidable