Mier
Lánzate a la región noreste del país y descubre, en la frontera de Tamaulipas con EEUU, este Pueblo Mágico donde la historia, la arquitectura y la gastronomía se conjugan.
Mier: Relevancia histórica y artesanías de calidad
Situado al norte de Tamaulipas, su relevancia histórica, además de sus atractivos naturales -como las enormes presas donde se puede pescar-, dotan a Mier de una gran fuerza y belleza. Este Pueblo Mágico se encuentra a 154 kilómetros al noreste de Monterrey y vale la pena visitarlo por sus importantes construcciones, sus costuras y bordados, y por su sabrosa panadería.
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Conoce más
Mier fue fundado en 1753 y en un principio se le llamó Paso del Cántaro, luego Estancia de Mier. Durante el siglo XIX los barcos de vapor llegaban hasta Mier cuando el río Bravo llevaba mucha agua, convirtiéndolo en el pueblo más interesante de la región. Hoy cuenta con unos 7,000 habitantes.
Lo típico
Las arcillas de la región son variadas, pues producen barro hasta de siete colores; de ahí que no sorprenda la vocación alfarera del pueblo. Los artesanos de la región elaboran desde ollas, macetas y charolas hasta pequeñas piezas decorativas, todas producidas en pequeños talleres locales, con estilos prehispánicos y diversos colores.
La costura y el bordado son de las actividades artesanales icónicas de Mier, por lo que encontrarás docenas de tiendas dedicadas a ello. Aquí se elaboran preciosos diseños en bordado con chaquira, canutillo y piedras de vidrio. Sus vestidos de novia son célebres y las personas vienen de toda la República Mexicana a comprarlos. También se fabrican vestidos para ocasiones especiales como coronaciones, quince años, comuniones, etcétera. Otra de las artesanías típicas son las colchas de lana bordadas a mano.
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Plaza de Armas
Aquí se encuentra la Parroquia de la Purísima Concepción, un templo de piedra arenisca que data de finales del siglo XVIII. Ha tenido varias intervenciones arquitectónicas y, aunque sobresale su aspecto novohispano, si se pone suficiente atención se pueden ver Los distintos momentos de su construcción, como la disparidad de sus tres torres, pues la más alta fue agregada hasta el siglo XIX. En su fachada hay un juego de relieves intrigante, como la insignia franciscana o la imagen de un pelícano, alusiva a Jesucristo.
Casa de las Columnas o Edificio Consistorial
Al otro lado de la plaza se encuentra este edificio que ha sido ayuntamiento, cárcel y templo masónico en diferentes momentos desde su construcción en el siglo XIX. Su nombre viene de los seis arcos que ostenta en su fachada, aunque también llama la atención su cornisa gruesa, ondulante y moldurada.
Capilla de San Juan Bautista
Es un pequeño templo que se edificó en 1835 y se ubica a unas cuadras al sur de la plaza. Está recubierto de piedra de tono café claro y tiene una torre de campanario de dos cuerpos, elementos que la hacen muy distintiva.
Casa de los Tejanos
También es conocida como “de los Frijoles Pintos”, pues fue con frijoles que se sorteó la ejecución de unos prisioneros durante la guerra de 1842. Es emblemática por su papel en la guerra contra Texas.
Los tres ríos: el Bravo, el Álamo y el San Juan, que llenan de vida los alrededores de Mier. Cada uno tiene su propia presa, en donde puedes practicar pesca deportiva. La presa Falcón (del río Bravo) esconde unas ruinas que se pueden ver cuando disminuye el nivel del agua.
Mier es el pueblo más antiguo en la franja fronteriza, protagonista de la expansión de Texas y de la guerra contra Estados Unidos en el siglo XIX.