Propiedades medicinales de las jacarandas
Las jacarandas son esos árboles con flores moradas que cada primavera nos maravillan. Te contamos acerca de sus propiedades poco conocidas.
Año con año las jacarandas nos regalan una vista espectacular en las calles y parques de la Ciudad de México. El dulce aroma de estos árboles nos ayuda a relajarnos durante nuestras caminatas de primavera, en las que podemos contemplar como poco a poco llueven flores de jacaranda.
Como si fuera poco, la naturaleza siempre está dispuesta a darnos un poco más; ya que aunque es poco conocido, las jacarandas poseen propiedades medicinales para distintas enfermedades.
Más sobre las jacarandas
La jacaranda es un género de plantas subtropicales oriundas de América del Sur. La palabra jacaranda proviene del guaraní hakuã, que tiene perfume, y renda, lugar.
El más común de este género de plantas es la jacaranda mimosifolia. Se calcula que hay 120 especies entre árboles y arbustos pertenecientes al género de la jacaranda, aunque solo han sido aceptadas en el canon 50.
Un árbol de jacaranda adulto puede llegar a medir de 15 a 20 metros, dependiendo de las condiciones. En cuanto su copa, esta tiende a ser irregular y puede alcanzar una extensión de 12 metros.
Las hojas de la jacaranda son sumamente pequeñas, de aproximadamente medio milímetro. Sus flores moradas florecen durante la primavera y miden alrededor de 4 centímetros. Sus frutos son leñosos y poseen forma de mantarraya; las semillas que poseen son aladas.
La vida de una jacaranda llega a ser de 100 años. Es ideal para jardinería urbana por su alta resistencia a la contaminación y la baja agresividad de sus raíces.
Propiedades medicinales de las jacarandas
Además de la espectaculares imágenes que las jacarandas nos han regalado, las jacarandas también pueden ayudarnos a sanar algunos males físicos. Te contamos los siguientes:
- Beber la decocción de la raíz de jacaranda puede servir como sudorífico, lo cual ayuda a expulsar toxinas y ha estimular el sistema inmunológico por medio de la transpiración; si se está resfriado tiene una acción semejante al jengibre.
- El jarabe de raíz también es usado para sanar enfermedades venéreas, gástricas y para tratar la furonculosis o ántrax, además de ayudar en afecciones hepáticas, inflamaciones de la piel, hemorroides y desintoxicación de la sangre por sus propiedades diuréticas y diaforéticas. La dosis diaria es de 4 onzas.
- Debido a las propiedades antisépticas del árbol, el líquido de la decocción puede ser utilizado en lavados externos para tratar acné, sífilis, varices, varicela, llagas y heridas superficiales. También es recomendable su aplicación externa para tratar malestares óseos como artritis o dolor de huesos. En caso de dolencias de garganta, se recomienda hacer gárgaras con el líquido.
- Otra opción es el uso de infusiones de 30 gramos de hojas en 1 litro de agua para tratar las enfermedades ya citadas, además de reumatismo, anemia, úlceras en la boca y soriasis. La dosis diaria es de 4 onzas.
- En el caso de enfermedades de la piel, dolores óseos y enfermedades genitales, se recomienda tomar baños calientes con la decocción de la planta o raíz de jacaranda.
- También se pueden triturar las hojas secas de la planta para tratar heridas abiertas.
- Las hojas de jacaranda mezcladas con hierbabuena pueden usarse en infusión para tratar las amibas. Solo se requiere tomar un té ligero durante 7 días.
- En caso de lombrices intestinales también se puede recurrir a una infusión de corteza de jacaranda con epazote y hierbabuena.
- Por sorprendente que parezca, al consumo del jarabe de jacaranda también se le atribuyen propiedades antitumorales y como inhibidor sexual.
Recomendación:
Se sugiere solo su uso externo, ya que una mala dosificación puede provocar intoxicación.
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