En México tenemos la suerte de poder estar en contacto con la Mariposa Monarca, de noviembre a marzo de cada año, estos maravillosos insectos llegan a nuestro país después de recorrer miles de kilómetros desde el sur de Canadá y norte de Estados Unidos en busca de un clima más cálido para reproducirse. El Santuario de Piedra Herrada, que está a dos horas de la Ciudad de México y a media hora de Valle de Bravo, en el Estado de México es uno de los lugares donde podrás vivir esta experiencia.

1. Renta un caballo

Ve directo a la taquilla para pagar tu entrada y prepárate para una buena caminata en el bosque. Son alrededor de 4 km de subida, lo cual puede resultar fatigoso para un niño. No te preocupes, porque hay caballos que los pueden llevar, además de que les resultará divertido, así llegarán frescos y entusiasmados para admirar el gran espectáculo: miles de mariposas apiñándose en las ramas y troncos de los árboles para poderse aparear y calentar cuando la tarde empieza a enfriarse. Se trata de un momento muy especial para sensibilizar a todos por el respeto a la naturaleza. Encontrarán mariposas lastimadas en el piso o ya débiles, a punto de morir, es posible que los niños quieran rescatarlas. Es muy importante que les expliques el significado de su viaje y la gran responsabilidad que tenemos de cuidar estos lugares y dejar que la migración de la Mariposa Monarca mantenga su ciclo de vida y siga existiendo.

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2. Calcula el tiempo de camino

Trata de llegar antes del medio día. La mariposa monarca empieza a volar cuando hace calor y cuando refresca deja de hacerlo para descansar en las ramas. Es un recorrido de unas tres horas en total, por lo que el hambre puede afectar el humor de grandes y chicos si llegas más tarde.

3. ¿Qué llevar?

Provisiones: agua, chocolates, cacahuates, manzanas. Ahí hay una pequeña tienda, pero si quieres algo más sano, mejor llévalo desde casa.
Efectivo: la entrada cuesta alrededor de $40 por persona y el caballo unos $100.
Zapatos y ropa cómoda para caminar, gorra o sombrero, chamarra y protector solar.

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4. ¡Silencio!

Aunque con los niños a veces es difícil pedirles que no hablen fuerte, corran o intenten tocar a la mariposa monarca cuando están emocionados, explícales que estas acciones las lastiman y pueden causar su muerte. Además, si guardan silencio, podrán escuchar sus aleteos, una experiencia maravillosa.

5. ¿Cuándo ir a ver las mariposas monarca?

Entre semana es ideal, aunque puedes ir en fin también, no se sienten las aglomeraciones porque el lugar es muy grande. Es mejor ir en días soleados, cuando la mayoría de las mariposas están volando. El clima es muy cambiante pero recomiendo ir en febrero, cuando los días son un poco más cálidos.

6. Para niños de todas las edades

Desde bebés que puedan subir contigo a caballo ‒o en canguro con un papá o mamá súper atléticos‒ , niños más grandes y embarazadas.

Archivo MD

7.¿Cómo llegar?

Si vas desde la Ciudad de México puedes tomar la carretera vieja a Valle de Bravo, por Temascaltepec, aunque generalmente es temporada de ir al Nevado de Toluca y te puede tocar un poco de tráfico. No haces más de dos horas, pero si lo quieres evitar, puedes irte por la autopista de México-Valle de Bravo y regresar por la desviación hacia Avándaro que te lleva a esta carretera.

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8. ¿Dónde comer?

Ahí hay un local de quesadillas, a 30 minutos tienes Valle de Bravo o, si prefieres regresar a la ciudad, puedes pararte en la Hacienda Jajalpa, que es un lugar muy cómodo para comer con los niños.

9. Otros santuarios

No importa a cuál vayas; los de Michoacán son igual de espectaculares. En esta página puedes elegir el que mejor te quede:  Santuarios de la Mariposa Monarca 

Verónica Ledesma